No somos amigos

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Narra Jules:

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Narra Jules:

— ¿Es en serio?— pregunté con mis ojos abiertos— Oye, soy fan de ver películas acostada, y sé cómo termina esto. Me llevas a tu casa, me meto en tu ducha y terminamos teniendo sexo— lo miré a los ojos, él se sonrojó— Y yo no pienso tener sexo contigo o posar mi maldita lengua en tu pito.

—No es necesario ser así, sólo quería ayudarte. Recuerda que sigo siendo tu amigo, pese a todo esto que ha pasado— Eddie estaba nervioso.

— ¿Amigos?— pregunté con sarcasmo— ¿En serio crees que podemos ser amigos?— lo apunté a él y después a mí.

— No me gusta verte así, me preocupo por ti— no podía creer que ya estaba al borde de llorar. Eddie tomó con suavidad mi brazo—Detesto todo lo que está pasando entre los dos.

—El problema Eddie, es que a pesar de verte temible y cruel, no tienes bolas—solté cerca de su rostro— Con mis amigos me gusta salir a tomar helado, salir a pasear y tomar cervezas , en cambio contigo, cuando te veo, me dan ganas de comerte a besos, me dan ganas de abrazarte, besar tu rostro, decirte lo lindo que eres y que me lleves a tu casa para que me cojas la noche entera. Es por eso, que tú  y yo no podemos ser amigos, porque a mis amigos no los quiero de la forma en que te quiero a ti— Lo miré fijamente, él suspiró— Nos vemos en una semana, Edward— me volteé y él quedó solo, en medio del camino.

Narra Eddie:

Volví a la escuela, caminé directo y furioso a la sala de música, donde estaba Gareth, Jeff y Sue.

— Llegas tarde viejo— Jeff soltó— ¿todo bien?

— Sue, estás fuera de la puta banda—solté, y tomé la guitarra eléctrica, comencé a tocar Peace Sells.

— ¿Qué mierda hablas Edward?— Se cruzó de brazos.

Gareth y Jeff me quedaron mirando atónitos.

— ¿Qué puta mierda haces, viejo?— Jeff me quedó mirando.

— Echo a Sue de esta puta banda—seguía tocando— Has tocado a mi chica y eso no se perdona, te has metido con la chica del líder de esta puta banda y eso no se perdona— no la miraba a los ojos.

— ¿Qué dices Eddie? ¿Sabes que no son nada sin mí, verdad?—Sue me miraba sin comprender lo que pasaba— ¿Gareth?¿Jeff? Díganle algo a su puto líder...— Ellos me miraron.

— Vamos Eddie...¿Y si nos esperamos hasta el concurso?— Jeff hablaba en mí oído.

— No Jeff, ¡No!— hablé golpeado— Sue, deja el puto bajo en el estante y vete de acá, estás fuera. Lo que le hiciste a Jules es horrible, no tiene nombre...

— ¿En serio vas a defenderla? ¿Cuando no es capaz de ponerse de tu lado ni un puto segundo?

— Amo a Jules, y si te metes con ella, entonces el problema es conmigo— solté sin más. Sabía que ahora era Jules quien no me daba ni la hora, pero al menos me estaba despojando de Sue y de sus actitudes de mierda.

— ¿Perdón?— ella preguntó, como si debiera de darle explicaciones por decirle que amaba a Jules.

— Te dije que amo a Jules, y si te metes con ella, te metes conmigo—La miré a los ojos— Me vale una mierda que seas la bajista, podemos conseguir a otro o qué demonios sé yo. Pero en esta banda no te quedas—solté. Sue se marchó malhumorada.

— Te juro que te vas a arrepentir Edward Munson— me apuntó— Te vas a arrepentir mucho, era la mejor puta opción que tenías y has mandado todo a la mierda.

— ¡Que no me importa, dije!— grité y ella se marchó furiosa, ni entendía cómo es que estaba tan tranquila después de lo que había pasado con Jules.

— ¿Sí sabes que estamos cagados, verdad?—Gareth suspiró y se sentó en el piso— ¿Qué mierda has hecho? y no justifico lo que pasó con Jules, pero...la banda.

— Sue no era de fiar, nosotros somos amigos, amigos fieles, nos cuidamos y queremos, Sue no es de las buenas— solté sin más— tenemos tiempo, podemos hallar un buen bajista.

...

Salí de la escuela. llegué a mi casa, entré a mi cuarto y me lancé a la cama, sentía tanta impotencia, estaba enamorado de Jules, y ella me odiaba, ahora me odiaba. 

Respiraba rápido mientras estaba en mi cama, pensando en cómo diablos lo haría para poder verla, ahora ella se había ganado una suspensión y en parte era mi culpa, tampoco podía llegar e ir a su casa, sus padres probablemente me tacharían de esperpento si me vieran .

Cuando la vi llena de frijoles y leche, cuando la vi furiosa, con sus excelentes argumentos de por qué no podíamos ser amigos, lo pensé bien, y claramente a mí tampoco me dan deseos de besar a mis amigos, ni decirles cosas lindas al oído, ni abrazarlos, ni querer cogérmelos, y vaya que los quería. En cambio Jules, despertaba todo eso y mucho más, estaba enamorado de ella, Jules era mi chica, la única que quería en mi vida, me había sentido solo durante tanto tiempo, y ahora estaba ella, revoloteando en mi cabeza toda la puta noche y todo el puto día.

Cuando llegué a esa conclusión, me paré de la cama y no supe qué hacer, daba vueltas por doquier, tomé mi furgoneta y fui hasta el lago. Llevé un pack de cervezas y me senté en el muelle a beber. Ese sentimiento no era normal en mí, pero lo sentía y estaba más vivo que nunca, cerraba mis ojos e imaginaba a Jules con su melena bien cortada, con sus ojos azules, recostada en mis piernas, acariciando mi rostro y yo sólo me escudaba en un: Estás loca Jules, cuando el único que estaba loco era yo, y lo estaba por ella.

Sólo rogaba para que llegara a la tocata del fin de semana, pero ni de eso había posibilidades , porque de seguro la castigarían por que lo había hecho.

Narra Jules: 

—Si sabes que estás cagada ¿Verdad?— Dustin me miraba divertido— Papá y mamá no llegan aún, pero vaya qué cagada estás.

— Sólo vete— le lancé un cojín— Gracias por tus putos ánimos. Escuchamos cómo entraron a la casa, se podía sentir el sonido, pero lo extraño era que no sólo se escuchaban las voces de papá y mamá, había más gente.

Bajamos con Dustin, habían llegado con visitas, era Maddie, Frankie y Steve Harrington. Lo que menos necesitaba era más personas, necesitaba poder soltar la puta verdad de mi día y decirles que estaba suspendida por una semana.

— Chicos, los Harrington han venido a tomar el té. Así que bajen y saluden a las visitas. Tomaremos el té— nos sonrió. Yo me puse más que nerviosa, entre que Steve estaba buenísimo y que estaba suspendida, no sabía bien cómo funcionar.

Dustin y yo nos tomamos de las manos como buenos hermanos y les sonreímos.

— Hola— saludamos al unísono— Steve me miró gracioso, Frankie nos miró sin más. No sabía cómo decir que no había necesidad de ir a la escuela.

— Hola Jules— me respondió Steve— ¿Así que este año te gradúas?— me preguntó con su hermoso cabello que todas las chicas amábamos en la escuela— mamá me miraba con una sonrisa.

— Y se gradúa con honores— agregó, haciéndome sentir incluso más culposa.

— Y se gradúa con honores— agregó, haciéndome sentir incluso más culposa

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bigger boys and stolen sweethearts (Eddie Munson) TERMINADA ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora