Haz lo que quieras.

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Escuché la ronca voz de Majima cerca de mí. Por más que quisiera abrir los ojos simplemente no podía. Tal vez lo que dijo mi subconsciente era cierto, me corté el rostro con un trozo de vidrio.

Mis sentidos estaban pobres, pero activos, él con algo de dificultad tomó mi brazo y lo rodeó por su hombro haciéndome levantar a duras penas.

- ...¿Q-que sucede?.

Creí que no podría hablar, pero de alguna forma, por algún milagro mi voz fluyó sin problema.

- Este vejestorio se está cayendo a pedazos. Tenemos que salir pronto - Contestó en un breve suspiro. Se quejaba de todo lo que pasaba, pero seguía adelante en busca de su hermana, Senpai - . Ella se alegrará mucho cuando te vea viva.

Intenté levantar mi otro brazo para dale un golpe, no era momento para decir esas cosas.

Pero como supuse no pude siquiera levantar mi hombro, algo grave me estaba pasando.

- ¿Sabes que ella está colgada en un pilar en la punta de la torre?, ¡Tenemos que darnos prisa! - Si no podía golpearlo, al menos debía ponerlo al corriente de la situación. Escuché cómo se reía, maquiavélico como siempre.

- Eso fue un cebo para traernos hasta aquí, bueno, a mí más que todo.

Un cebo... Me pregunté qué lograban esos dos al usar a Senpai así.

- ¿Que les hiciste para que se pusieran tan molestos contigo?.

Mientras hablamos subimos una escalera, fue complicado poner un pie en cada escalón, pero él me ayudó en lo que pudo.

- Mi papá era miembro de este grupo de terroristas - Empezó a decir, un verlo pude imaginarlo con una expresión pensativa en ese momento - . En una de sus misiones se lastimó la pierna, era uno de los miembros más fuertes y valioso para un tal Yoshi. Llegó el tiempo en que su pierna se convirtió en un obstáculo para él, por lo que renunció, al hacer eso, los ingresos del grupo se vinieron abajo y estuvimos a punto de desaparecer.

- ...Así que era eso.

- Hay más - Tocio - . Al pasar por el mal momento lo culparon a él y a nosotros por sus pérdidas millonarias. Intenté hacer que nos dejarán en paz uniendome a ese grupo, pero se lo tomaron como una falta de respeto....y aquí estamos.

Todo empezó con su padre, por un simple error que cometió comprometió a toda su familia a pasar un infierno. No tenía experiencia con los padres, pero de cierta forma sentí lástima por él.

- Tienes suerte de estar completa. Tus compañeras estaban tiradas en el piso.

Al oír eso mi respiración se alteró y mi temor no hizo más que aumentar.

- ¿¡Están muertas!? - Chillé arrugando mi nariz. Como esperaba, Majima no se alteró por mi cambio de ánimo.

- Estaban inconscientes, pero tienen quemaduras por su cuerpo. Imagino que tú no saliste tan mal porque estabas en el lugar más apartado de la bomba.

- Ya veo.

Pasaron los minutos, pero sentí que eran horas. La preocupación por Senpai y las demás me carcomía por dentro, sentía culpa por no poder ayudarlas como debería, pero en ese momento mi mayor prioridad era ella, la chica por la que vine aquí en primer lugar.

- ¿Senpai sigue viva? - Interrogué tratando de no sonar demasiado directa -. Digo, ya ha pasado tiempo y-

- Viva y sana - Contestó como cuchillo a mis palabras - . Esos desgraciados no dejan de enviarme mensajes con amenazas y fotos de ella, pero no te preocupes, no tiene caso matar a Chisato cuando el que buscan es a mí.

No tenía caso, pero podría pasar.

- ... Apresurate.

Irónicamente le pedí eso, pero él se detuvo en seco, tal vez me miraba o algo, mis ojos se sentían pesados así que no pude distinguir nada.

- ¿Entiendes que lo que estás haciendo no lo haría cualquier persona? - Ahora era yo la que era interrogada.

- ¿A qué te refieres? - Me hice la tonta, sabía lo que me decía, al igual que en mi cabeza él trataba de hacerme decir lo que no quería ni pronunciar.

- ¿Tengo que hablar como un estúpido para que entiendas algo tan simple?.

- Estúpido ya eres, pero-

- ¡Ese no es el punto, idiota! - Lo saqué de quicio, empezó a vociferar palabras al azar y continuó con la conversación - .¡ Lo que trato de decir es que ya a estas alturas y circunstancias dudo que hagas todo esto para estar a mano con mi hermana! ¡Nadie haría algo tan descabellado por esa estúpida razón de mier-

- ¡Cállate! ¡Sólo... cállate!.

Perdí los estribos, comprendía lo que sentía, bueno, eso pensaba, Senpai influyó de muchas formas en mi vida, por qué claramente ya la veía como alguien diferente a un estorbo.

Todas esas ocasiones donde me sonrojaba sin razón, fueron por mis emociones confusas.

Pero consideraba mejor hacer que esos sentimientos desaparecieran sin más.

Pero, llegó un momento donde me dije a mi misma que lo que sentía Senpai era una fachada y que pronto mostraría su verdadera forma de ser.

- ¡Ya tuve suficiente con esa pregunta por hoy! - Majima guardó silencio mientras yo continuaba alzando la voz - ¡ Déjenme en paz, lo que siento....lo que siento.... Senpai-

- ...creo que debemos dejarlo asi-

- La quiero.

- ¿Uh? ¿La quieres de que forma?.

Me mordí el labio pero continué - . No lo sé bien, pero no quiero perderla. Desearía que los días de la escuela fueran más largos para poder charlar más tiempo. Cuando se quedó el otro día en la noche, fue agradable tenerla cerca y compartir con ella - Tal vez me desvié un poco del tema. Carraspee y añadí - . Quisiera... Quisiera pasar mis días con ella.

De cualquier forma me gustaba la idea de ver a Senpai más a menudo, sea como sea, amigas o mejores amigas, quería compartir más con ella y llegar a comprenderla mejor que nadie. Esperaba que ella se sintiera de la misma forma.

- Entonces te gusta, Takina.

- ...Somos amigas - Dije, pero no pude evitar recordar esa tarde donde ella, por celos, me besó. Me descontrole por tal recuerdo pero me mantuve fría por fuera - . Pero me gustaría ver hasta dónde llegamos.

Majima sonrió y proseguimos. Estábamos cada vez más cerca de encontrarnos con Senpai y los otros hombres para nuestro encuentro final.

- Estaré encantado de decirte cuñada desde hoy.

Mantuve mi cabeza en alto, pero en el fondo sonreí un poco ante la idea.

- Haz lo que quieras.

Mi yo del pasado no diría algo como eso, definitivamente estaba cambiando.

Cambiando por Senpai.

Mis dias contigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora