Our Blood ~Daemon Y Rhaenyra~

Capítulo XXXVII-Always

Rhaenyra Targaryen

Estaba harta de parecer una mera cobarde, de no luchar por lo que quería.  Asique no lo pensé más. Mire a Daemon y cogí su mano sin dudarlo. Él sonrió satisfecho y tiro de mi para subirnos al dragón. Todos allí nos miraban sorprendidos, pero nadie más sorprendido que mi padre el cual me miraba con decepción. Pero ya no importaba lo que he anhelado antes incluso que el trono de hierro ha sido a Daemon. 

-tenemos que ir a por Vaegor y Saera -dije a lo cual  el asintió y le ordeno a Caraxes que ascendiera el vuelo, el vuelo de Caraxes era tan intenso que hizo a varios guardias caerse al suelo.

Pude oír por lo bajo como mi padre me ordenaba que bajara del dragón, pero era tarde había tomado mi decisión. Mire hacia abajo y vi que leanor me miraba con una sonrisa de medio lado, una sonrisa cargada de dolor y posible decepción. Yo formulé un lo siento con mis labios y me agarre a la cintura de Daemon para evitar caerme del dragón

Emprendimos el viaje hasta el castillo hasta llegar a la pequeña ventana de mi habitación. La cual atravesamos, para entrar dentro. Miré a Daemon confundida mientras lo vi entrar en la habitación.

-no debería quedarse uno con caraxes ?- hable intentando que nuestro plan saliera a la perfección, Daemon me miro incrédulo

-la última vez que te deje sola te encamaste con tu guardia real, asique prefiero acompañarte - dijo haciendo que yo achinara los ojos molesta, rodé los ojos y decidí no darle demasiada importancia al comentario.

-no quiero discutir ahora, coge a Saera no tenemos tiempo - hable haciendo que el me obedeciera y cogiera a la niña la cual estaba en la cuna, saera se revolvió entre los brazos de Daemon los cuales intentaron acunarla para que no comenzara a llorar sin embargo algo no me cuadraba tendría que haber una doncella cuidando al bebe. 

Acto seguido la puerta se abrió dejando ver a una doncella la cual iba a gritar de sorpresa al vernos, yo me acerque a ella tape su boca. Ella se revolvió asustada, en sus ojos se veía reflejado el miedo que sentía hacia esta situación.

-osa gritar y me aseguraré de que no. Vuelvas a poder hacerlo - amenace a lo cual ella se quedó en silencio y corrió por los pasillos - tenemos que ir al estudio del maestre

-no sabes lo que me excita cuando sacas esa lengua afilada princesa- dijo Daemon en respuesta yo rodé los ojos y le mire con una sonrisa - te sigo nyra

Empezamos a correr por los pasillos como si la vida nos fuera en ello, hasta que llegamos a la puerta del estudio, la cual Daemon abrió de una patada haciendo sobresaltar al gran maestre.

-sorpresa- hablo Daemon con sonora burla, yo mire mal en su dirección y me acerque al maestre

-donde esta vaegor?- pregunte con impaciencia, el maestre sabía que tendría problemas si me lo decía pero también sabía que si no me mostraba donde estaba moriría al instante, el apreció dudar unos segundos sobre qué acción no le llevaría a la muerte.

Al final parece que opto por ayudarnos a mí y a Daemon, yo sonreí en respuesta sabiendo que al menos el maestre nos ayudaba . Él se alejó de nosotros y fue en busca de vaegor al cual trajo segundos después envuelto en mantas. VI como la temperatura del niño había bajado y ya estaba con los ojos abiertos. Suspiré aliviada, gracias a los dioses pudo salvarse.