Rhaenyra Targaryen
Habían pasado ya algunos meses desde que Daemon y yo descubrimos mi embarazo, en estos meses solo había tranquilidad y paz, solo muestras de apoyo y cariño por parte de mi esposo hacia mí, pero cuanto menos quedaba para el gran momento del parto Daemon se le notaba más irascible. Aunque su intención era estar lo más calmado y sosegado posible su propósito de mantener la mente en blanco le resultaba un castigo y una tarea que cada vez le resultaba más imposible. Por no hablar de que en estos meses a no ser que fueran muestras de cariño como un beso en la frente o un misero abrazo Daemon no me había tocado ni un solo pelo, resultaba casi abrumador estar sin su contacto y no sería por las múltiples veces que había intentado seducirle o había intentado insinuar mis ganas de pasar la noche junto a él. Pero había sido en vano, yo creo que la idea de que un niño con sangre Strong este creciendo en mis entrañas le resultaba repugnante. Durante un tiempo pensé que yo era la culpable de su desprecio y comencé a llorar hasta deprimirme, tiempo después comencé a asumirlo y empecé a aceptarlo. En el último mes Daemon se había cambiado de habitación no de repente sino fue de manera sutil, empezó a quedarse un rato después de que yo entrara de la habitación en uno de los grandes salones junto a la hoguera, pero al paso de los días cada vez llegaba más tarde a nuestra habitación hasta que unos días después ya dejó de venir . Ahora prácticamente solo le veía a la hora de las comidas en las cuales seguíamos disfrutando juntos, aunque me aterrorizaba no saber durante cuánto tiempo. Mi mayor temor ahora era que el niño fuera Strong y que Daemon lo despreciara, tanto al bebe como a mí, mis pesadillas de ese tema ocurrían con mucha frecuencia.
Nos encontrábamos él y yo sentados en la mesa en la cual cenábamos. La mirada de mi esposo se dirigió a mi vientre unos instantes y la volvió a dirigir a su plato, de mi boca salió un ligero suspiro, rocé mi vientre hinchado que tocaba ya la mesa.
-¿Como ha ido el entrenamiento con Balryon?- Intente ahogar el terrorífico y solitario silencio que había en la habitación, los ojos de Daemon se posaron de nuevo en mí.
-Aprende y crece rápido, pero es muy terco- Dijo mientras cogía el cuchillo y el tenedor para partir la carne que estaba en su plato, su mirada se desvió de nuevo.
-Me recuerda a alguien- su mirada se fijó en mí y en sus ojos pude ver un apéndice de tristeza, algo que no había abandonado su mirada en estos meses.- Lo lamento, no debí...
-Tranquila- se levantó de la silla y yo le miré con confusión- He terminado
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Our Blood ~Daemon Y Rhaenyra~
RomanceHaz cada cosa en la vida como si fuera lo último que hagas. Pasión, amor, impulsos, deseos reprimidos, aunque también dolor, traición y Soledad. Cuándo reconoces tus sentimientos ¿es momento de hacerlos frente o de hacer lo que debes hacer y se espe...