Our Blood ~Daemon Y Rhaenyra~

Capítulo XXXVIII- Cry

Rhaenyra Targaryen

Daemon se acercó nuevamente y volvió a besarme, nuestra excitación crecía por momentos los dos queríamos más que un simple beso

-mis señores es hora del banquete, hemos preparado la cena con la mayor rapidez posible para que tengan un buen banquete nupcial - hablo el maestre haciendo que yo asintiera hambrieta

-yo tengo mi propia comida preparada- dijo daemon mientras se agachaba y agarraba mis piernas para acto seguido subirme a sus hombros

-daemon, deberíamos comer algo- dije revolviendome en sus hombros, su acción me sobresaltó demasiado haciéndo que mi corazón palpitara a mil por hora.- los niños

-te daré algo de comer no te impacientes, acuestenlos en la habitación de al lado, iremos a verlos en un rato - ordeno daemon A las doncellas haciendo que ellas asistieran

Daemon atravesó los pasillos conmigo en sus hombros hasta llegar a nuestra habitación, abrió la puerta con una mano y la cerró de golpe.

-bien, hoy vas a pasar la mejor noche cargada de placer y excitación de tu maldita vida princesa - hablo el mientras me dejaba caer en la cama

Se acercó a mi como si de un depredador de tratara, me observa con lujuria mientras quitaba su camisa y la tiraba al suelo, su torso ahora desnudo hacia que mis mejillas se emcendieran

Queria tocarlo, quería sentirlo, quería tocar su piel, asique Estiré mi mano ligeramente y toque el torso desnudo de daemon el cual obserbaba curioso cada uno de mis movimientos, baje mi mano ligeramente hasta llegar al borde de sus pantalones, el agarró mi muñeca deteniendo mis movimientos, yo le mire con confusión.

-shhh que impaciente princesa, estoy en clara desventaja aquí, tienes demasiada ropa puesta no crees?- dijo el mientras yo sonreía juguetona, el se acercó a mi y me dio la mano para que me levantara de la cama yo obedecí

vi como puso sus manos en mi espalda alta para desabrocharme los tediosos enganches del vestido. los nudos se iban aflojando uno por uno. Cuando termino de desengancharlo el vestido cayo al instante al suelo, ahora mi cuerpo solo estaba cubierto por un ligero camison. Acto seguido cogió el borde del camisón y lo quitó dejándolo caer al suelo, ahora estaba desnuda ante el, daemon me miraba sin decoro alguno, observaba cada detalle de mi cuerpo cosa que no me incomodaba sino que me excitaba, vi como su pantalón tenía ya un bulto notablemente grande

-creo que es tu turno - dije mientras me sentaba de nuevo en la cama para disfrutar del espectáculo, el sonrio y agarro el borde de sus pantalones

-como ordenes - dijo mientras desataba el nudo que hacía que esos molestos pantalones sufrieran en su lugar

Cuando daemon iba a quitarse porfin los pantalones que retenían su gran erección se oyó un llanto en la habitación de al lado, un llanto de uno de los niños.

-maldita sea- maldijo daemon en tono bajo mientras volvía a atarse el nudo que sujetaba los pantalones, me dispuse a levantarme para vestirme e ir a consolar a nuestro hijo que lloraba en su cuna, pero daemon negó con la cabeza - voy yo, tu relájate por hoy.