Under temptation - Kookmin

Capitulo 27

   "Todos tenemos deseos ocultos los cuales solo dejamos salir cuando ya nuestro ser no los soporta más"

  
     Estiró su cuerpo dolorido sobre las sábanas, y buscó con el brazo a su compañero, quién ya no estaba a su lado.

— ¿Jungkook? — habló adormecido.

  Con dificultad se removió cubriendo su anatomía desnuda con el cobertor y se puso de pie para salir a buscarlo.

  Una punzada de dolor en su espalda baja lo hizo jadear y en ese instante el mayor entró a la habitación — No, no, por favor vuelve a la cama. Solo fuí a la farmacia por algunas cosas ¿Te duele mucho?

— Sí — puchereó volviendo a recostarse — pero está bien, Jin dice que pasará.

— Te compré unas cremitas y unas pastillas para que calmen el dolor.

  Se escuchaba tan preocupado y dedicado que el corazón de Jimin solo lograba saltar de alegría por estar recibiendo tanta atención del más alto.

— Gracias — dijo con las mejillas rojas.

— Buscaré agua para que tomes la medicina y luego te aplicaré el ungüento.

— Ok — sonrió cerrando los ojos mientras estaba acostado boca acabo. Hasta que los volvió a abrir de golpe — ¿Me pondrá la crema? ¡¿En el trasero!?

   Jungkook volvió sosteniendo un vaso de cristal en sus manos junto a una pastilla — Esto es para desinflamar... Lamento si fuí un poco brusco.

  Jimin la tomó sólo levantado un poco el torso, ya que el pelinegro le dió de beber todo — Estoy bien, yo lo quería — escondió rápido su rostro contra la almohada muriendo de vergüenza por lo que acababa de decir.

— También yo... Aplicaré esto — sacó un tarrito y metió un dedo para sacar producto — separa un poco las piernas, quitaré la cobija — sin levantar la cara, el menor hizo lo pedido y abrió — Joder... Está algo rojo.

  La verdad sí, estaba rojo pero verle su entrada así de rosada junto a sus hermosas nalgas redondas lo tenía desconcentrado. Se veía muy erótico; tuvo que tragar saliva y limitarse a hacer lo debido o terminaría maltratándolo más volviendo a fóllarlo.

   Con el dedo medio aplicó de a poco la pasta blanca haciendo círculos al rededor. No lo podía evitar se estaba calentando mucho — ¿Te duele si hago eso? — preguntó con voz ronca sin apartar la vista de su acción.

— N-no... Se siente fresquito — jadeó completamente deleitado y al igual que Jungkook excitado.

  El pene del rubio sobresalía hacia atrás entre sus piernas y todo su prepucio estaba estirado hacia abajo dejando ver una linda cabecita rosada erecta.

  Sin dejar de masajear, Jeon tocó esa parte, ganándose un glorioso gemido lastimero. Llevó esa mano a su bulto y lo apretó sintiendo su propia dureza — Jimin...

— Kook...

— ¿Te duele demasiado?

— No

  Ambos se rieron y es que, todo era nuevo para ellos y estaban como dos adolecentes hormonales después de haber tenido su primera vez; queriendo más y más.

— Eres muy bonito... — expresó pasando el pulgar por la pequeña gota que salía por la punta.

— Tú... Mmgh, más.

  El mayor jamás se imaginó tocando otro pene que no fuese el suyo propio pero ahora solo quería masajearlo y darle placer.

— Volteate y abre un poco las piernas — pidió dejando un besito en una nalga.