Adorable Tormento

11. La Amante

Con Cheryl

Cheryl No había pegado ojo en toda la noche, sus ojos estaban clavados en el techo de su habitación mientras pensaba en el beso que se había dado con Toni, era la primera vez en mucho tiempo que una mujer le quitaba el sueño sin siquiera haberse acostado con ella, no entendía aquel batiburrillo de sensaciones que tenía en su cuerpo y tampoco su necesidad de verla, de pronto el timbre lo sacó de sus pensamientos.

Se levantó de la cama solo con el pantalón del pijama y sostén,caminó por su departamento hasta llegar a la puerta, se acercó a mirar por el agujero de la puerta, suspiró con pesadez al darse de cuenta de quien era y con desgana abrió la puerta.

Cheryl: ¿y ahora que quieres Patricia?-esta entró con una sonrisa de oreja a oreja.

Patricia: ¿has visto tu cara?-soltó una risa-en fin, el caso es que me levanté muy activa esta mañana, ¿Sabes?-comenzó a desabrocharse los botones del vestido que llevaba puesto-vine a que me agotes la energía que traigo en el cuerpo.

Cheryl: ni de broma, vete-le señaló la puerta.

Patricia: ¿Perdón?-puso las manos en la cintura quedándose con el sujetador al descubierto, y Cheryl suspiró.

Cheryl: ya te di lo tuyo el otro día, ya tienes para pasar una larguísima temporada.

Patricia: Eres una imbécil!-se acercó a él de forma agresiva y trató de subirse encima de ella-¡Quiero que me hagas tuya!-dijo y Cheryl ligeramente la empujó.

Cheryl: ¡Que no!!-suspiró-pasó de todo esto, se acabó este juego, lárgate de aquí ahora mismo.

Patricia: igual y piensas que tú decides cuando paras este juego ¿verdad?

Cheryl: lo pienso y lo decido, este juego se acabó, fuiste un capricho de una sola noche, curiosidad y nada más, vete de mi vista

Patricia: no, tu a mí no me engañas-negó con la cabeza-aquí hay algo más, tú no te niegas a la carne, nunca lo has hecho.

Cheryl: pues resulta que la carne ya está pasada, así que adiós-señaló la puerta.

Patricia: esto no te va resultar tan fácil-abrochó los botones de su vestido-por hoy te salvas... cretina

Patricia salió por la puerta y Cheryl la cerró de golpe, pasó sus manos por su rostro suspirando fuertemente, cerrando definitivamente la historia con Patricia, una historia que jamás debió ocurrir, era la primera vez en su vida que se arrepentía de meterse con una mujer.

Con Toni

Betty: ¿Te besó!?-gritó y Toni le hizo un gesto de silencio.

Toni: estoy como un flan-apuntó nerviosa-quiere que el lunes me presente en su oficina para hablar del bar, seguro va a echarme-se lamentó.

Betty: seguro que no, a lo mejor solo quiere hablar de lo que haces en el bar o no sé por qué trabajas ahí-la puerta sonó y Toni se levantó a abrir.

Toni: Dalia, mil perdones-se abrazó a ella.

Dalia: no tienes nada que pedirme-entró-solo vine a saber cómo estas y en que acabó la noche.

Betty: con un beso-murmuró y soltó una pequeña risa.

Dalia: ¿la besaste?

Toni: obvio yo no fui, ella me agarró de sorpresa y me besó, acabé sucumbiendo al beso como una tonta-desplomó su cabeza entre sus manos-no debió pasar, eso jamás debió ocurrir -suspiró-Patricia va exigir mi cabeza en bandeja de plata, tú ya verás.

Dalia: pero esa mujer ¿tiene algo con Cheryl?

Toni: puede ser, no lo sé... las vi un día irse juntas y bueno ella me exigió que ni la mirase que era de ella, pero Cheryl a veces no le contesta bien, no sé, Cheryl también es una persona muy extraña... no la conozco lo suficiente.