16. West

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Advertencia: contenido sexual.

24 horas después

James estaba nervioso, el gran jet ahora lucia muy pequeño debido a la enorme presencia de cierta castaña que se encontraba en su asiento reclinable con los ojos cerrados debido a la furia que poseía, en 10 minutos aterrizaban de nuevo a realidad que ya deseaban ambos.

Aquel viaje precipitado fue mágico en toda la estancia hasta que llegaron a jet y James hizo un comentario que nunca debió haber dicho.

Pero ahora era muy tarde, no podía echarse para atrás, y menos ahora que sabían que Peter y Gwen los estaban esperando en el lugar con miles de cuestionamientos que ambos querían evitar.

La castaña salió del jet, ni siquiera le dirigió la mirada al chico ojiazul y partió directamente con su cuñada. En dos horas nuevamente estaría en el aeropuerto debido a que iría con Jane para huir de sus sentimientos.

Definitivamente el viaje a la isla había sido un error.

24 horas antes:

Alexis había empacado únicamente un vestido rojo, un traje de baño y ropa cómoda más la que traía puesta. Supuso que para un viaje relámpago era demasiado, pero todo entró en su pequeña mochila así que no importó.

Envío un mensaje a Valikiria indicándole que no podía acudir a la entrevista y que la pospusiera hasta que regresara a Nueva York. La situación era tan rápida, loca y espontánea que sentía mariposas en el estómago o tal vez era la adrenalina.

James tocó a su puerta, al parecer Steve y Nat habían desaparecido o ellos llegaron estúpidamente rápido y empacaron de la misma forma.

—¿Estás lista?—. Musitaba James, ingresando a la suite de la castaña. Todo era tan rápido que la emoción los abrumaba a ambos.

—Eso creo...—. Sonríe Alexis hacia James, y a él se le contagió esa sonrisa.

—Hay que hacerlo bien, Alex, te prometo 24 horas de desconexión—. Dice James, buscando algo dentro del bolsillo de su pantalón. La castaña lo miró curiosa al descubrir que estaba sacando su IPhone dejándolo en la mesita.

—Desconexión completa entonces—. Responde la castaña, y saca su IPhone del pequeño bolsillo que había en su mochila, de igual forma, dejándolo en la misma mesa, solo que también tomó una servilleta y buscó un plumón para dejar una nota.

"Nos iremos durante 24 horas. Si buscan explicaciones, buscar a Steve y Nat

Atte: J&A 💋"

Eso se ve bien—. Dice James mientras le quita la pequeña mochila a Alexis y la posiciona en su hombro.

—Siento que es muy agresivo pero, ellos tampoco es que hayan dado tantas explicaciones—. Explica la castaña mientras se encoge de hombros.

—¿Nos vamos?—. Cuestiona James mientras le ofrecía la mano para que ella la tomara.

Alexis, dudosa, tomó su mano de James, se percató que encajaba a la perfección a pesar de que la mano de él era estúpidamente enorme. Y le sonríe sin emitir ninguna palabra de por medio, mientas James la guía rumbo al lugar donde estaba el jet privado de la empresa.

La isla West estaba a solo 45 minutos de Atenas, se encontraba en los límites de Grecia y le pertenecía al Barón Zemo, explicando que era su pequeño lugar sin restricciones, así que ambos castaños iban a un lugar sumamente salvaje y caótico, como eran ambos.

Al llegar al lugar, se fueron al único hotel privado, ya que el Barón solía invitar a gente muy exclusiva que venía de diferentes lados del mundo por vivir la experiencia oculta y libre de cualquier pensamiento o deseo oscuro que se tenga escondido.

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