Era una apacible mañana en el departamento que compartían Sherlock y William. El detective se hallaba realizando experimentos en una sala que habían destinado para ese fin. El hombre de cabellos oscuros tenía principalmente cuatro pasiones: su amado amante, los misterios, la química y el violín. Era un experto en todas ellas sin embargo nunca terminaba de descubrir nuevas cosas acerca de su amado Liam como lo llamaba con dulzura.
Se podría decir que aquel rubio era un gran misterio andante, sus reacciones eran mucho más apasionantes y su voz era toda la música que necesitaba en su vida. Sin embargo, a pesar de que le gustaría que sus mentes se fusionaran en una sola era mucho mejor mantener sus esencias separadas para poder mezclarlas una y otra vez disfrutando de la experiencia.
La película del día anterior había sido maravillosa y definitivamente era una de sus favoritas. Sin embargo, observar a su amante dormir era algo mucho más gratificante, según este le había contado hace un par de días hoy tendría la mañana libre por lo que podrían pasarla juntos. Estaba a punto de colocar agua en el hervidor para preparar ese café que les gustaba tanto a ambos, pero su teléfono empezó a sonar.
-¿Quién diablos puede ser tan temprano?- refunfuño dejando el hervidor en su sitio.
Pero grande fue su sorpresa al ver que se trataba de uno de sus informantes que tenía una pista para resolver uno de los casos en los que trabajaba.
-¿No puede ser más tarde? Estoy en medio de algo
-No, el objetivo solo estará en esa tienda a esa hora para cerrar el trato.
-Agh, está bien. Voy en camino.
Entonces termino de arreglarse y dejo una nota en la mesa de la cocina diciéndole a Liam que saldría por un par de horas. Se disculpo y le aseguró que se lo recompensaría con una sorpresa. Su letra no era tan elegante como la de su amante, pero era perfectamente entendible.
Tomo un par de esposas y las escondió entre sus ropas al igual que su arma, una vez listo no pudo evitar dejar un beso en la frente del rubio además de acariciar los cabellos rubios. Su amante tenía el sueño pesado y seguramente no despertaría hasta que tuviera que ir a el set de grabación. Así que tomo la motocicleta para ir hacía allá. Jack el manager de Liam se encargaría de que este llegará bien al trabajo
El caso en cuestión era acerca de un asesinato aquel en la cual la víctima fue el esposo de una ama de casa, ella sospechaba que se trataba de un asunto de drogas pues su marido se había negado a trabajar como químico para ellos. Recientemente había sido condecorado por sintetizar un nuevo estimulante.
El líder en persona llegaría a hacer el trato pues no confiaba en nadie más para el trabajo y eso sería su caída. Sherlock tomo uno de sus mejores disfraces y usando los consejos de maquillaje de Irene se dio un gran cambio de apariencia. Todo con el objetivo de no ser reconocido.
Su nombre en clave era Francis Jones y acompañaría al químico como su asistente. Los criminales tuvieron que aceptar pues el producto era sumamente importante y valioso. Una vez en el lugar de encuentro su protegido se alegró tanto de verlo pues sabía que su vida estaba en riesgo y seguramente sería secuestrado para que preparará la formula. Pues era el único que conocía las proporciones correctas. Es un medicamento en desarrollo con amplio margen de mejora. Su color azul característico y natural era toda una novedad en el mundo de las medicina.
-Muy bien señor Smith, estamos listos para entrar- le dijo al químico de piel oscura y lentes que lo estaba esperando en una parada de autobús cercana a unas oficinas donde estaría el narcotraficante.
-Muy bien... Colega- le dijo con una sonrisa como si se sintiera protegido y le entrego un maletín que llevaba.
Entonces entraron al edificio buscando la oficina 117 y no fue una sorpresa encontrar al narcotraficante sentado en la silla frente a la mesa, su mirada penetrante solo invitaba a una cosa: Entregar la formula y al químico para prepararla.
Después de un intercambio de palabras le mostraron aquella droga que venía en el maletín y ante él se mostraron pastillas de color azul que tenía un efecto mucho mayor a las que eran comercializadas normalmente. Entonces cuando este se tomó una para probar la mercancía empezó a sentir mucho sueño pues en realidad le habían dado somníferos. Todo fue idea de Sherlock que conocía bastante sobre los efectos de las diferentes drogas.
Una vez su cabeza golpeó sobre la mesa el detective se apresuró a colocarle las esposas y a llamar a Lestrade para que terminara el trabajo.
Una vez listos no levantaron sospechas pues ya no traían el maletín y los compañeros del narcotraficante se mantuvieron a raya pues Sherlock estaba listo para usar su arma.
-No sé cómo podré pagárselo, pero mi esposa está preparando tarta de ciruela ¿quiere llevarse un par de trozos?
-Mi pareja adora las cosas dulces, así que eso vendría muy bien para la cena.
Entonces fueron a la casa del señor Smith donde lo esperaba su esposa con el delicioso postre y ella abrazo a Sherlock con lágrimas en los ojos pues no esperaba que su marido volviera con vida.
-Lleve toda la tarta, se lo merece- le dijo ella mientras colocaba el pastel en un envase plástico.
-¿Hey y para mí no hay?
-¿No puedes contentarte con la dulzura de tu esposa?- le dijo ella en tono seductor
-Por supuesto.
Sherlock al ver que esos dos se estaban poniendo cariñosos decidió que lo mejor sería irse a su casa con el postre que seguramente le gustaría a su Liam.
Una vez llegó a su departamento pilló a su pareja leyendo una obra de Shakespeare y este estaba tan concentrado o al menos eso parecía pues este al notar los pasos de su amante lo llamó con cierta dulzura en su voz.
-Sherly llegaste y¿ qué traes allí?
-Es una tarta de ciruela , me la dieron en el trabajo.
-¿Qué esperas? Sirvámosla, me muero de hambre.
-¿No comiste nada?
-Al menos no desde el almuerzo, comer solo no es muy agradable
-Debes comer, aún si no hay nadie acompañándote.
-Lo sé, Darling.
-No puedo enojarme contigo, Liam. Ahora voy a buscar unos platos y todo lo necesario para disfrutar de esta tarta.
Mientras se contaban como estuvieron sus días disfrutaban del delicioso pastel pues su relación era tan dulce como las ciruelas.
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Frutal
FanfictionSherlock el mejor detective está saliendo con el extraordinario actor William James Moriarty. Ambos viven su día a día en donde se entremezclan los sabores y aromas a fruta. Las vivencias de ambos estarán acompañadas de un gusto frutal siendo una d...