Frutal

7 Mimosa de naranja

Después del trabajo necesitaban relajarse por lo que fueron a un bar exclusivo en la parte sur de la ciudad. A William no le gustaban los lugares así, pero este era especial pues aseguraba la privacidad de sus visitantes. Rentaban salas especiales para mayor discreción y los cocteles que ofrecían eran exquisitos. La pareja se encontraba disfrutando de unas mimosas que tenían champán y jugo de naranja a partes iguales.

-Hoy fue un día esplendido pero agotador- dijo el rubio mientras tomaba un sorbo de su bebida.

Sherlock se encontraba masajeando los hombros de su pareja y hacía un excelente trabajo pues este se sentía menos tenso. Coincidentemente hoy tuvo que grabar una escena de bar con una coprotagonista. Esta era una muchacha que era bailarina de nombre Frida quien en la película tenía que interpretar a una mesera que tiene sueños de danza.

Había un joven camarógrafo que se llamaba Lucien Atwood que se había enamorado de la chica y juntos habían formado una pareja con aspiraciones de boda en el futuro. William fue quien los unió como una especie de celestina.

-Liam eso fue muy lindo de tu parte- le dijo Sherlock al deducir que este había ayudado, aunque no quisiera presumir de aquello.

-Los jóvenes merecen vivir su amor – declaró simplemente el rubio con una sonrisa.

Mientras conversaban se daban pequeños besos y manifestaban su afecto estando lo más juntos posible. La calidez que sentían al rozar sus rodillas era una dulce sensación y sus manos acariciando por sobre la ropa de vez en cuando mientras tomaban sus copas llenas de alcohol y jugo de naranja. Tenían varias botellas de licor y una jarra con jugo fresco de aquella fruta.

-El sabor de la mimosa en su boca es lo mejor- pensaban ambos.

Las cosas estaban subiendo de tono por lo que prefirieron pedir un vehículo de una aplicación para que los viniera a recoger. Ya que Jack estaba ocupado y Sherlock no se arriesgaría a usar su motocicleta sabiendo que iban a beber.

-Liam, no te duermas- le dijo mientras se acomodaban en el asiento trasero del vehículo donde un hombre se presentó como Jefferson Hope.

-Sherly- murmuró este mientras se acomodaba en el hombro de su pareja.

-Ya llegaremos- le dijo con una sonrisa sabiendo que su amante no despertaría hasta la mañana siguiente.

Sherlock a pesar de sentir calor en su parte baja y desear a su Liam tendría que arreglárselas solo en el baño de su apartamento. Pero de algo estaba seguro es que apenas tuviera la oportunidad se dedicaría a amar el cuerpo del rubio como corresponde.

Fue una noche tranquila hasta que en la mañana fueron despertados por el sonido del celular de William quien se levantó rápidamente pues se trataba de Jack.

-Buenos días ¿sucede?- preguntó educadamente William.

-¿Has visto las noticias del canal de celebridades?

-No, no suelo verlo.

-Es mejor que lo veas para que sepas de lo que hablo.

Entonces el rubio encendió la televisión y su boca se abrió de la impresión pues el titular era:

El joven actor William James Moriarty: ¿Una borrachera junto a su amante?

El reportero de chismes Charles Augustus Milverton estaba dando la exclusiva pues uno de sus fotógrafos había captado en cámara al actor. Sus palabras eran venenosas al referirse a la poca "Disciplina actoral" que William tenía con ese acto.

-Verán, la joven promesa del mundo del espectáculo también necesita "divertirse" no podemos juzgarlo. Pero ser cargado por su pareja después de un par de tragos de más ya está a otro nivel. Es nuestro deber velar por que la noble profesión de actores no se vea manchada por actos de esta índole.

Sherlock odio cada palabra que salía de esa ponzoñosa boca y su mirada de serpiente era aún más aborrecible. Aún recuerda cuando este descubrió la relación que el detective tenía con el actor. Los acoso tanto que William para "Proteger" a Sherlock le propuso romper, después de una conversación profunda acerca de su relación acompañada de un acto más carnal los motivo a hacerle frente a la situación.

Jack tuvo mucho que ver con que el reportero los dejará en paz, pero ahora volvió a las andanzas molestándolos una vez más. Sherlock vio a su compañero que sin decir más palabras y apago la televisión quitándole amablemente el control remoto de sus manos.

-No te preocupes Sherly, sé exactamente que hacer.- le dijo de manera confiable.

-Pero primero ve a Jack ¿sí?

Entonces llamaron al manager nuevamente y este les dijo que los iría a recoger para hablar en el camino. Esperaron al menos quince minutos cuando el hombre de mayor edad llegó y con una sonrisa cómplice recibió a aquel par.

-Ese tal Milverton no los volverá a molestar nuevamente después de esto.

Jack había agendado una rueda de prensa para que William aclarará las cosas y este sabía con claridad lo que tenía que decir.