| Especial de Halloween 2. | Vinnie:
— Lo siento por eso. —dice risueño el chico que me apartó de Oliver.
<< Su voz... >>
Él se apega a mí entre pequeñas risas y me hace rodear su cintura, yo rio extrañado por tal actitud llena de confianza.
— És mi primer baile de máscaras y no sé muy bien cómo funciona todo esto, así que lo siento si soy muy torpe.
— No te preocupes, también es el mío así que estamos igual. —sonrío, afirmando mi agarre en su cintura para comenzar a guiarlo al ritmo de la música. Lo detallo mientras él mira a su alrededor maravillado, parecía un niño pequeño.
<< Se parece demasiado a... >> niego.
La máscara del desconocido no dejaba ver casi nada de su rostro y sin embargo mi cabeza comenzaba a maquinar estupideces.
— Te quiero. —susurra, rodeándome del cuello entre un abrazo.
— Vale, decirle a un desconocido que lo quieres no es algo normal, ¿lo sabes?, así que voy a confirmar mis sospechas y suponer que estás un poquito "alegre". —ladeo la cabeza, me parecía a que estaba pasado de copas.
— La verdad es que... me dejaron plantado. —vuelve a reír, acurrucándose contra mi pecho aún cuando intento que me suelte y la familiaridad en ello comienza a ponerme nervioso.
— És que te pareces demasiado a un lindo chico que conozco y te aseguro que él no me hubiera dejado plantado, y... te pareces mucho, y... eres muy guapo, y... ¿te puedo besar? quiero besarte. —balbucea y con una de sus manos aparta lo suficiente su máscara para que al ponerse a la altura de mi rostro, sea capaz de besarme con facilidad.
Y lo hace.
Él toma mi mejilla, a punto de profundizar el beso hasta que yo me separo, frunciendo el ceño.
— Besas igual que... —él me mira y sé que esos ojos azules con pequeñas motas verdes son inconfundibles. Cuidadosamente aparto el resto de la máscara, confirmándolo. Él intenta alcanzarla sin éxito por la diferencia de alturas y la torpeza debido al alcohol.
— No puedo... —masculla con fastidio entre un leve puchero— yo también te quiero ver. —susurra y me alza la máscara por igual, el solo se queda repasando mi rostro.
— Eres idéntico. —ríe con diversión— Me gusta eso, me gusta mucho, si.
Tomo su mejilla, acariciando levemente esta antes de acercarme y besarlo devuelta, percibo como se apega a mí y con mi agarre en su cintura ayudo a que se mantenga de esa manera, no se queja en lo absoluto. Y sin embargo es él quien rompe el beso.
Noto cómo se relame los labios, aún sin apartar su cuerpo del mío.
— ¿Me acompañas a buscar otra copa? —dice y yo niego, aún con la respiración acelerada.
— No creo que debas seguir tomando, te pones muy loquito cuando bebes. —rio y el sonríe con inocencia.
— ¿Cómo puedes saber eso..?, ni siquiera me... ni siquiera me conoces, tonto.
— Yo solo sé que Oliver va a matarme. —suspiro, volteándome unos segundos para buscarlo con la mirada, pero al volverme hacia Lucas, no lo encuentro.
— ¿Lucas? —hago una mueca, comenzando a buscarlo y lo noto con un tipo que aunque él insistía en querer apartarse, no lo dejaba en paz y comenzaba a sobrepasarse con Lucas.
Al final este se rindió y acabó abrazándolo como si nada, y yo me apresuro entre la multitud hasta separarlos.
— Basta. —alzo a Lucas en brazos para continuar buscando a Oliver y este se queja entre balbuceos y uno que otro golpe en mi pecho, queriendo buscar más bebidas con las que emborracharse.
