Luceanerys Velaryon estaba maldita. En un mundo donde los omegas son tratados como regalo de los Dioses, ser una significó grilletes de oro, cuando en medio de La Guerra de los Cuervos tuvo su primer celo y fue atrapada por Ameond Targaryen.
Sellánd...
Aemond la vio sollozar, ella lo ignoró mientras seguía tratando de hacer algo con esa pila de heno.
—No, no, no, no — sollozó Luceanerys, —No es perfecto. No es perfecto.
Ella soltó un sollozó más alto, se puso de pie y le quitó la capa con fuerza, ella vio hacia su pila poniendo la capa de Aemond junto a la de ella.
—¿Qué haces Lucy? — preguntó Aemond mientras se quitaba el cinto donde guardaba su espada.
—Un nido, necesito hacer un nido— ella se frustró al ver lo que hizo. El aroma a bayas se volvió ácido. Aemond se acercó a ella, envolvió su brazo por debajo de sus pechos, ella soltó un suspiro de alivio ante su toque.
—Tranquila— Aemond empezó a desatar los cordones del vestido por la parte de atrás— Es un bonito nido. — terminada la tarea le bajó la prenda —Cuando terminemos aquí, te llevaré a casa donde podrás hacer un nido más bonito.
—Casa — ella suspiro aliviada.
Aemond le quitó el vestido y lo tiró por alguna parte de la cabaña, con cuidado la recostó sobre el nido de heno que hizo en desesperación, Aemond se relamió los labios ante la vista de la omega a merced de él.
Con un notable rubor desde su mejilla que se expandía a su cuello, bonitos senos regordetes pálidos sin marcas de pecas y coronados por dos pezones rosados. Lucy jadeaba por el calor que su cuerpo emanaba.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aemond rugió al sentir como se liberaba su semilla en el vientre de Luceanerys mientras su nudo se expandía dentro de ella, con cuidado se sentó con ella sus brazos mientras ella aun soltaba pequeños jadeos de placer.
Lucy frotó su rostro contra el cuello de Aemond, casi ronroneado de satisfacción. Él mueve toda la cortina de rizos castaños exponiendo su cuello, sintiendo sus caninos de alfa emerger se acerca a la tierna carne de la glándula de apareamiento.
Depositó un par de besos antes de clavar sus dientes y atarla a él para siempre.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
N/a: Oh por dioses antiguos, me siento sonrojada hasta el cuello escribiendo esto. Quisiera agradecer a los múltiples fanfics A/b/O Reylo en Ao3 por darme inspiración para esto. Lamento si quedo horrible, soy nueva en el campo smut.
N/a: En serio lamento censurar, pero aquí andan de delicaditos últimamente que no me puedo arriesgar a que tumben esta cuenta.
¡Pero para eso está Ao3! ¡Es como Disneylandia para las hornies!
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
