Dragon's Obsession

Capítulo 17

Aemond marchó a Harrenhal mientras Daemon marcharía en tres días a Antigua para poder derribar a los Hightower desde su sede.

Las cenizas de Rhaenys llegaron a Dragonstone y el cuerpo de Meleys tuvo que ser enterrado en el lugar de su caída.

Lucy permaneció al lado de su abuelo en el momento que el barco de los Manderly arribó a las costas. En una urna completamente roja con detalles de dragones volando pintados a detalle.

El capitán Hester Windrood, uno de los hombres de Manderly dio sus pésames a todos. Hubo una pequeña ceremonia en Valyrio antes de colocar las cenizas de Rhaenys Targaryen junto a las de su padre que reposaban hace décadas en el hogar ancestral de la familia.

Luceanerys se empezó a sentir mal mucho antes de la partida de Aemond hacia la tierra de los ríos. Se sentía agotada y no hacía nada más que comer y dormir, aunque lo que comía siempre terminaba vomitando.

En una de sus secciones de Alto Valyrio de Joffrey se desmayó cayendo al suelo y todo se volvió oscuro.

Despertó con el maestre susurrando cosas a madre quien sostenía a Visenya, ya de tres lunas completas en sus brazos.

—¿Estás seguro? — preguntó madre.

—Casi cuatro meses exacto mi reina — dijo el Gerardys — Un verdadero milagro.

—¿Qué es un verdadero milagro? — preguntó Lucy apoyándose en sus brazos mientras veía a los tres intrusos.

—Oh querida — madre se acercó a ella. —El maestre nos ha dado buenas noticias.

—¿Buenas noticias? — Lucy miró a Gerardys.

—Está embarazada princesa — contestó el Maestre — Y no es nuevo embarazo. Por lo que vi y luego de examinar. Intuimos que su aborto no fue uan perdida completa.

—No entiendo...— Lucy miró a su mamá.

—El maestre dice que fueron mellizos lo que esperabas — respondió ella mientras se sentaba a su lado y palmeaba su mano izquierda — Pero fue uno que se perdió por completo.

—Y esa una suerte que Munkun no hiciera una limpieza profunda o se hubieran perdido los dos— agregó el Maestre.

Lucy empezó a llorar de felicidad mientras colocaba sus manos sobre su vientre mientras reía. Madre la abrazó.

—Ahora debemos tomar en cuenta muchas cosas— dijo Gerardys después de las lágrimas de alegría — Este embarazo es mucho más delicado ahora por el historial de la pérdida.

Gerardys advirtió:

*Nada de corsé.

*Sin poder volar un dragón.

*Mantenerse calmada

*Nada de entrenamientos con espadas.

Lucy asentía a cada indicación que daba Gerardys. Ella se aferraría a esta nueva oportunidad de tener a un bebé en brazos.

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Estaban perdiendo la guerra.

Era el pensamiento de Alicent ante la situación. Perdieron a Aemond en el momento que cambio su capa Verde por el negro de Rhaenyra.

O como el pueblo supo de la pérdida del bebé de Luceanerys y perdieron su favor.

Oh el escándalo. La pequeña Madre perdió a su bebé por culpa de la reina viuda y sus Septas.

Ahora Aegon tiene quemaduras en toda su espalda por su enfrentamiento con Rhaenys.