Luceanerys Velaryon estaba maldita. En un mundo donde los omegas son tratados como regalo de los Dioses, ser una significó grilletes de oro, cuando en medio de La Guerra de los Cuervos tuvo su primer celo y fue atrapada por Ameond Targaryen.
Sellánd...
El bufón de la corte, Champiñón describió con respecto a la hija de la princesa: Era una criatura muy chillona, no le gustaba estar en brazos de nodrizas, criadas o Septas betas, lloriqueaba hasta que era puesta en los brazos de la princesa Rhaenyra.
Por lo que siempre se podía ver a la princesa de Dragonstone con su hija en brazos por la fortaleza roja.
Al igual que su hermano mayor, la princesa Luceanerys Velaryon, contaba con un cabello castaño que con el paso de los años se le formaron rizos adorables. La diferencia de su hermano con respecto a la princesita eran los ojos, muchos que conocieron a la difunta reina Aemma concordaron que la princesita regordeta heredó los ojos de Arryn, un azul grisáceo.
Champiñón decía que los susurros sobre la bastardía de los tres primeros hijos de la princesa Rhaenyra afectó mucho más a la princesa Lucy, ya que muchas veces la Septas decían que las niñas bastardas florecían a temprana edad era por la lujuria en la que fueron concebidas.
La princesa Luceanerys floreció como doncella cuando solo contaba con once Días del Nombre, para sorpresas de todos en Dragonstone y la corte, la princesa Rhaenyra Targaryen no buscó alianzas matrimoniales para la pequeña princesa.
El Gran Maestre Munkun afirmó que la princesa Luceanerys era una beta, debido que pasaron tres ciclos lunares y no había entrado en una Rutina de calor, por lo que las posibles que fuera presentada como Omega eran nulas.
El bufón Champiñón decía que la Reina Alicent profesaba que ninguna hija bastarda sería bendición con ser una Omega, ya que los omegas nacían de hijos que fueron concebidos dentro del lecho matrimonial, ya que los omegas eran considerados como regalos de La Madre ante los ojos de Los Siete.
Era bien sabido que la reina Aemma fue casada y encamada en su primera rutina cuando contaba con la edad de Once años, y de este hecho se podría explicar porque casi todos sus embarazos terminaron en tragedias. Con miedo a repetir la misma historia con su hija, la princesa Rhaenyra esperaba que su hija alcanzara una madurez idónea para casar a su única hija por el momento.
Luego de que la princesa Rhaenyra se casará por segunda vez con el príncipe Daemon Targaryen y la familia se instalará en Dragonstone, la princesa Lucy montó a Arrax por primera vez en compañía y vigilancia del príncipe canalla.
El dragón de la princesa Lucy era una bestia que crecía cada año, una bestia blanco color perla y ojos dorados.
Al igual que sus hermanos Velaryon, fue instruida por los maestros de armas con la espada. Cuando las Septas encargadas empezaron a negar que era adecuado que una princesita anduviera con espadas, la pequeña princesa Negra respondió:
—No soy una princesa cualquiera, soy una princesa Targaryen— dijo con su boquita chillona —Visenya Targaryen tenía una espada colgada en su cadera y volaba en dragón. ¿Por qué yo no podría hacer lo mismo?
La princesa Rhaenyra no contradijo a su hija, pero siguió insistiendo que debía asistir a sus lecciones de dama con sus Septas.
Sus lecciones con sus hermanos fueron impartidas por el mismo príncipe Daemon, el príncipe canalla quería muchos a sus hijastros que le prometió a Hermana Oscura a la hija de su segunda esposa.
—El rey será Jacaerys y portará a Fuegoscuro— dijo el príncipe Daemon —Por lo que Hermana Oscura será tuya.
Los relatos afirman que pasaba más tiempo entre el patio de entrenamiento con sus hermanos y las cocinas del castillo de piedra que con sus Septas.
Las cocineras de Dragonstone amaba a la princesa Lucy, el pasatiempo favorito de la adoración del Rey Viserys era hornear cualquier postre. Se debía que casi todos los días el postre servido en la mesa de la familia era elaborado por la princesa Lucy.
La princesa Luceanerys creció hasta formarse como una mujer muy desarrollada para su edad. A diferencia de su madre que tenía la figura esbelta, la princesa Negra era una belleza algo regordeta, los vestidos le subían los pechos haciéndolo ver brotados, con rostro redondo y pálidos, haciendo resaltar su cabello castaño y ojos de la sangre Arryn.
La princesa gozaba de una gran popularidad en Dragonstone, le gustaba visitar la costa, escuchar a los bardos entonar sus canciones. También era partícipe de los festivales, siendo muy querida por los vasallos de su madre.
Si bien, no era tan hermosa como sus hermanastras Baela y Rhaena, tenía su propio encanto.
Champiñón dijo que muchos se disputaron el honor de quitarle la doncellez a la Princesa Negra, aunque solo un afortunado tendría de aquello.
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N/a: En este fic quiero agregar el elemento de crónicas narrado por Champiñón, Munkun y Eustace.
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