Simplemente Yoongi ➳ Yoonmin

Para ti, quien siempre brilla

Yoongi podía sentir las miradas sobre él, era exagerado, porque volvió a ser un don nadie, a pesar de que participó en unos cuantos partidos del equipo de básquetbol, supuso que eso era lo conocido como ser "un artista de un solo hit", pero no le importaba, ya que jamás quiso ser popular o algo así.

Pero ahora tenía amigos, más de uno y todos esos estaban observándolo fijamente y con una sonrisa de por medio, como si esperaran algo de él.

Incluso ahora, estaba picando su pechuga de pollo a la plancha mientras su mejor amigo estaba casi respirándole la nuca. Se sentía como en una película de terror, ya entendía por qué el protagonista terminaba enloqueciendo, él estaba por las mismas.

—Mañana es el cumpleaños de Jimin~ —canturreó Taehyung cuando Yoongi abrió su boca para preguntarle por qué todos estaban actuando tan raro con él, al parecer él y Jimin eran la parejita del grupo y había expectativa en este suceso. De nuevo, Yoongi hace mucho había considerado muchas cosas menos vivir un romance adolescente.

Entonces lo sintió, la presión y expectativa de Taehyung, Nayeon, Hoseok y del mismo Jimin, quien estuvo actuando extrañamente lindo con él, como si estuviera haciendo puntos para que le compre algo bueno por su cumpleaños.

Yoongi quiso que su agua se hiciera vino para así poder afrontarlo.

Aunque poco le duró, porque Taehyung seguía observándolo con esa sonrisa extraña, mientras subía y bajaba sus cejas repetidas veces. Eso solo empeoró su humor.

—Deja de hacer eso. Me asustas.

Eso fue suficiente para que Taehyung se callara, pero Yoongi no dejó de pensar sobre el bendito regalo para Jimin durante las clases, porque, vamos, no podía hacerse el loco y no darle nada, eran amigos, antes estaría bien, porque ni se hablaban y a él poco le importaba lo que sucedía con Jimin, por eso mismo no tenía idea de que su cumpleaños prácticamente era mañana ¡Mañana!

Lo peor de todo es que Yoongi no sabía qué regalarle.

Vamos, Jimin podía aceptar una roca con una sonrisa radiante y hacerte creer que acertaste y que en verdad quería recibir una maldita roca, tenía buena labia, bueno, su padre es el alcalde, es un político que a la vez es un empresario, por supuesto que tendría el don de la manipulación corriendo por sus venas, porque así era Jimin, luciría de lo más gustoso, pero en su interior estaría maldiciendo y luego lo tiraría a la basura ni bien le dieras la espalda. Ya lo había visto hacerlo en cumpleaños anteriores. Así que tenía ese miedo de darle algo y que terminara tirándolo a la basura, porque auch, eso dolería, tanto como persona, amigo y también a su billetera.

No es como si quisiera impresionar al omega, pero al final del día, él era su amigo y el alfa que le gustaba. Sabía que había expectativa, más porque Taehyung, Hoseok y Nayeon lo estuvieron fastidiando con lo mismo desde que se los encontró y ya sabía por qué de su actuar, entonces aquí estaba, en el centro comercial al lado de su madre, porque ella era omega y tenía buen gusto, la mayoría de veces, porque se había metido con su padre, entonces tan buen gusto no siempre iba a tener, pero se lo perdonaba, es decir, los humanos cometen errores, aunque Yoongi se preguntaba cuánto ese error podría durar, ya llevaba dieciséis años junto a su padre alfa y contando, pero eran cosas que suceden. Al menos su padre le dio más dinero de lo esperado, porque le tenía estima a Jimin y no era un secreto para Yoongi que sus progenitores querían a Jimin como yerno, entonces su madre lo estaba llevando de una tienda a otra, a estas alturas ya conocía el centro comercial al derecho y al revés.

Yoongi no quería sonar grosero, pero se sentiría más seguro si ella los hubiera acompañado, pero sabía que se le decía que necesitaba su ayuda para comprarle el regalo perfecto a un omega en específico sería una catástrofe, así que mejor se lo guardó, ya que podría malinterpretarse y él no era estúpido. Claro que no, pero al menos hubiera tenido mucho más dinero para el obsequio y la opinión de otra mujer, una alfa, pero mujer con buen gusto, al fin y al cabo.