Feliz cumpleaños Leon

8 1 1
                                    

Lamentablemente yo me deshago del bonito suéter que la abuelita de Fritz me obsequió y solo me coloco la chaqueta para cubrir mi cuerpo y la horrible herida que me hicieron aquellos idiotas.

- Bien, ya estoy listo. – digo mientras acomodo mi chaqueta.

- Ok, entremos. – Fritz cierra la puerta del auto.

- ¡Espera! – lo detengo.

- ¿Qué sucede?

- No podemos dar nuestros nombres reales o pagar con la tarjeta de crédito, yo cambie algo de efectivo antes de venirnos ¿Y tú?.

- Yo igual.

- Bien, entonces pagaremos con efectivo y tú nombre será Freud. – comienzo a reír levemente. – Y yo seré Thomas.

- ¿Qué es tan gracioso?

- Vamos entra, te lo explicaré después... - lo tomó de la espalda y él solo me mira confundido.

En cuanto entramos al lobby, observamos que el hotel está totalmente lleno. Bien, será fácil escabullirse si el loco de Reinhard vino a seguirnos. El hotel se ve elegante, pero algo minimalista, aun así despide esa cercana temporada navideña, pues el otoño está por irse pronto en Helsinki. Al llegar a la recepción, un chico nos da la bienvenida.

- Welcome to the Haven hotel, my name is Vanno, how can I help you? (Bienvenidos al hotel Haven, mi nombre es Vanno, ¿en qué puedo servirles?)

- Uhm yes... hu, we need a room for two people, please. (Umm si... hu, necesitamos una habitación para dos personas, por favor) - le contesto al recepcionista, mientras observo unos panfletos.

- Very well, what is your name, sir? (Muy bien ¿Cuál es su nombre Sr.?)

- Klausen, Thomas Klausen and his name his Freud Klausen. (Klausen, Thomas Klausen y su nombre es Freud Klausen.)

- Very good, Do you have any kind of luggage? (Muy bien ¿Llevan alguna clase de equipaje?) - el recepcionista ladea su cabeza para observar si tenemos maletas y rápidamente le contesta Fritz.

- No... just some backpacks. (No... solo algunas mochilas.) – dice Fritz un poco nervioso y entonces lo tomó de la mano para que se tranquilice, se lo difícil que debió ser manejar todo el camino hasta acá, pensando en que el loco de su padre viene siguiéndonos.

- Very good Srs. Klausen, this is your keys, your habitation is the 668, and ¡enjoy your stay at the Haven hotel! (Muy bien Srs. Klausen, estas son sus llaves, su habitación es la 668, ¡y que disfruten su estadía en el hotel Haven!)

- Kiitos. (Gracias.) – ambos agradecemos y nos marchamos tranquilamente.

- Your welcome. (De nada)

Rápidamente llegamos al ascensor e ingresamos en cuanto las puertas se abren. Noto que Fritz aún se encuentra nervioso ya que no deja de mover la pierna, entonces decido besarlo cariñosamente al ver que estamos solos.

Comienzo por tomarlo del rostro y después a juntar mis labios con los de él tiernamente, pero como nuestro piso se encuentra demasiado arriba, aquel beso empieza a intensificarse y de pronto siento como Fritz mete su mano por debajo de mis jeans ajustados, tomando lo que ahora le pertenece.

- Fritz... ¿O debo decir Freud? Detente... Porque si comienzas, no hay quien me pare y lo sabes...

- Interesante Sr. Thomas... - ríe. - Carajo no puedo creer que hayas usado ese nombre. - continúa riendo y después se pone de rodillas enfrente de mí.

- Vamos Fritz, no te atreverías... - lo tomó del rostro y comienzo a acariciarlo del mentón. Mierda, cuando se pone en esta posición me excita bastante.

¿Te portarias mal conmigo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora