121- Sexo y no amor -121

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Mauro es el típico chico que se acuesta con todos sin ningún compromiso.

A él le da "pánico" esa palabra. Compromiso.

La única relación por la que pasó, terminó más que mal. Y él quedó traumado, por así decirlo. Y desde ahí, nunca más en su vida hizo más que un par de besos y sexo del momento, de una vez y hasta luego, o hasta nunca.

Se encontraba junto a su amigo Thomas saliendo de la universidad.

-Eu, ¿ese no es Tiago? Del que todo el mundo habla diciendo que es re lindo pero re cara de orto.- Habló Thomas viendo atentamente a ese tal Tiago.

Mauro lo miró sin demasiada importancia, pero cuando los ojos de aquel morocho se fijaron en los de él mismo, se congeló y sus palabras fueron distintas a las que planeó.

-A la mierda que es lindo, es hermoso boludo.

Thomas miró a Mauro con el ceño fruncido.

-¿Te está mirando?

Mauro asintió un poco nervioso.

-Cuando te deje de mirar, anda a hablarle, conocelo. ¿Qué perdés?

-¡No! Sería rarísimo, él no me conoce.

-¿Qué sabés?

-Sé cuando alguien me conoce.

-¡Mauro! Sos re "famoso" en la facu, te debe conocer, posta.

Mauro negó. Eso suena ridículo, pensó.

-Bue, si no entendés por las buenas...- Thomas se alejó y se vió como le dijo algo al oído a este morocho de cara bonita.

Mauro insultó por dentro a su amigo. ¿Para que enemigos si tiene a Thomi?

El morocho un poco confundido se acercó al pelirrojo ahora también con la cara roja.

-Hola, ¿Mauro? Ese tal Thomas me dijo que querías hablar conmigo.

Mauro estaba totalmente congelado, ni podía formular una oración.

-E-eh... No, o bueno... Sí(?... Él... hace eso jodiendo, ¿Tiago te llamas?

Definitivamente no estaba en su mejor faceta de chamuyero y coqueto.

Tiago se quedó confundido con la actitud del pelirrojo.

-Sí... Tiago... ¿Estudias acá?

Mauro pensó: Esa pregunta es TAN tonta. Osea, ambos se vieron dentro de la universidad, ¿y él pregunta esa pavada?

-Y sí.- Rió. -Si nos hemos cruzado.

-Bueno, es que no sé qué preguntar.- Dijo Tiago, mirando hacia otro lado, con un gesto aburrido.

Mauro se insultó a él mismo mentalmente. Si querés coger con él, chamuya, no seas un imbécil virgo y aparentemente virgen.

Un incómodo silencio se armó, muchos segundos, demasiados.

-Bueno, nos vemos.- Dijo Tiago. Dió media vuelta y dió pasos para alejarse de Mauro.

Mauro lo frenó, poniendo su mano en el hombro del chico. -No espera.- No podía terminar la conversación ahí. ¡Vamos Mauro!

-¿Qué?- Los oscuros y profundos ojos del morocho brillaban de una forma increíble gracias a los rayos del sol.

-Hablemos... Perdón, no soy así de que no saco tema. No sé qué me pasó.

Tiago se quedó serio viéndolo fijamente.

-Todos dicen que sos el típico chamuyero, que se chamuya a todos y nunca tenés miedo a hablar. ¿Por qué conmigo sí?- Tiago estaba usando ese tono como... confiado.

One shoots LitiagoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora