Capítulo 21

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Hacía dos semanas desde de que comencé a trabajar para Víctor, cada noche me quedaba con él a cenar, siempre por petición suya. Como me sentía muy agradecida  por todo, aceptaba.
Después caminaba conmigo para acompañarme a mi casa, ya cuando las calles estaban vacías, la mayoría de las tiendas estaban cerradas. También cada noche un coche negro nos seguía lentamente, casi imperceptible.
James que se rehusaba a dejarme en paz, una noche incluso se atrevió a tocar la puerta y entró con la excusa de querer darle el pésame a Víctor, sé que él no le creyó pero igual lo invitó a entrar a cenar con nosotros, fue incómodo. James no dejaba de lanzarme miradas de reproche cada que yo le regalaba una sonrisa a Víctor. También se amargó más cuando notó que ya no usaba el anillo de compromiso, de hecho dejé de usarlo la noche que me faltó al respeto.

Conocer a Víctor como compañero de trabajo era muy diferente a conocerlo como persona, es un hombre muy amable y educado, servicial también. Es una lástima que le haya pasado eso a su esposa, a veces su mirada se tornaba triste, parecía estar aquí pero a la vez no, supuse que en parte por el duelo que ha estado llevando, en general cuando no tenía esos episodios era muy atento a cada detalle, ahora con su presencia ya no me sentía incómoda, podía decir que nos estábamos volviendo amigos.

— Es un tipo perseverante — comentó Víctor al notar que miré de reojo detrás de mí.

— Es un necio — le respondí.

— Está enamorado, es normal que nos volvamos unos necios.

— No lo quiero cerca — dije sin creérmelo.

— Entonces díselo.

— Ya lo hice.

— Puedo ayudarte con eso si quieres — volteé a verlo, se mantenía sereno y con la vista fija hacia adelante.

— ¿Como harías eso?

— Haciéndole creer que estas conmigo — dijo como si nada. Recordé la amenaza de James, no quería por ningún motivo que le hiciera daño a Víctor.

— No creo que sea buena idea — el coche aún nos seguía pero nunca se acercaba a menos de diez metros de nosotros.

— Sí quieres que te deje en paz debes buscar algo que lo aleje.

— Sólo esperaré a que se canse.

Llegamos a mi casa, las luces de adentro estaban apagadas, Luisa ya no me esperaba despierta desde que comenzó en su nuevo trabajo y Emma usualmente se quedaba dormida después de cenar.

— Llegamos.

— Sí, nos vemos mañana, buenas noches — dije para despedirme.

Víctor se inclinó para besar mi mejilla su beso fue húmedo y tierno, luego se apartó de mí con brusquedad, James lo había tirado al suelo.

— Quítale las manos de encima — Víctor se puso de pie y se sacudió el saco, miró a James quién estaba furioso y le dio una sonrisa. James entendió su provocación porque se acercó a él y le dio un puñetazo en la cara, Víctor no hizo nada para esquivar o detener el golpe.

— ¡Ya basta! — lo tiré de la manga de su chaqueta para apartarlo de Víctor.

— No lo defiendas — me tomó del brazo para evitar que me agachara junto a él.

— ¡Deja de comportarte como un idiota! — le grité al borde de las lágrimas — ¿Estas bien? — le pregunté mientras le ayudaba a ponerse de pie. Víctor tenía el labio partido y la sangre manchaba su saco, se veía negra a la luz de la luna.

— Sí, no te preocupes, no fue nada.

— Puedo demostrarte que tengo más — provocó James.

— Ignoralo — le dije a Víctor y lo tomé del brazo para guiarlo a la casa.

M U J E R C I T A 💋//TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora