M U J E R C I T A 💋//TERMINADA

Capítulo 8

— Sí quieres puedo pasar a recogerlas a las dos cuando salgas del trabajo, paso por ti y luego vamos por Emma.

— Ya hiciste eso ayer. Si lo haces seguido la gente va a pensar mal.

Jasson llevaba con nosotras una semana completa. Ayer por primera vez se ofreció a buscarme en el periódico y estuvo bien caminar junto a él como lo hacíamos antes, pero ahora teniendo en cuenta que soy Benjamín Andrews y no Beatriz eso se vería sospechoso y no queremos ese tipo de sospechas.

— Al carajo con la gente. Eres mi hermana y quiero pasar el mayor tiempo que pueda contigo y Emma.

— Lo sé, pero no nos conviene que se malinterpreten las cosas, más teniendo en cuenta tu profesión.

— Me iré pronto Beatriz.

— Lo sé, tu te irás y yo me quedaré aquí junto con todos los chismes de que Benjamín se enamoró de un luchador.

Jasson gruñó y siguió comiendo de su plato.

— Bien, las esperaré en la casa — dijo luego.

Teníamos casi tres días en la nueva casa, era pequeña, con un baño, dos habitaciones, una pequeña sala y una cocina igual de pequeña, Emma dijo que parecía una casa de muñecas, estaba un poco alejada del centro. Tenia árboles alrededor lo que hacía que el frio fuera más intenso, pero siendo sincera me gustaba, me gustaba muchísimo, era un espacio más privado y bonito. En una de sus muchas caminatas Jasson la encontró, estaba en venta y no dudo en decirle a su jefe que le hiciera un préstamo, me negué al inició pero Jasson dijo que era lo último que podía hacer después de todo lo que había pasado.

Tomé mi valija pero antes de girar el pomo me volví hacía él.

— No me esperes, tengo que ir a un lugar — después de unos minutos no me parecía tan mala la idea de que Jasson fuera por Emma.

— No te tardes Beatriz, escuché que hay un asesino suelto.

— No me pasará nada, ese solo asesina mujeres y si ves bien, yo no lo soy.

— Entiendo, solo no te metas en problemas.

— No lo haré. Ve por Emma hoy. Dile que me quedé hasta tarde en el trabajo. Aprovecha el tiempo con tu hija.

Jasson arrugó la frente y sonrió de lado. Sabía por él que las cosas con Emma no estaban avanzando, por parte de Emma ella era una tumba cerrada con respecto a su padre.

Llegué a la prensa y me dispuse a sacar mi grafito, hasta que el golpe del cuero contra la madera de mi escritorio llamó mi atención, alcé la vista para encontrar a Dassler delante de mí.

— Lee esto y luego ven a mi oficina.

Lo hice. Era un borrador de la carpeta que se abrió sobre el caso de los asesinatos. Tres víctimas con las mismas descripciones, nada fuera de lo ordinario. Me levanté sin ganas de mi asiento, hasta llegar a su oficina.

— ¿Quieres café? — preguntó Dassler a la vez que él se servia uno — ¿O prefieres algo más fuerte?

— Un café esta bien.

— No bebes mucho, por lo que veo.

— Solo cuando es necesario.

— Entiendo — colocó la taza frente a mí, desabrocho su chaqueta y tomó asiento — ¿Que piensas?

— Nada que no sepamos ya.

— Observa bien la ubicación, todo sucede en el centro. La señorita Bliss fue asesinada en el centro aún viniendo del lado norte. Lo que indica que el asesino está en la cuidad.