19

380 38 22
                                    

—¡No puedes traerle más problemas a Colt! Acabamos de perder casi todo.

Mikasa se asomó para poder ver a su hermana y a Eren en el pasillo.

—Lamento su situación pero eso no tiene que ver con lo que vengo hablar con él. Has cruzado la raya Pieck, te dije muchas veces que ya no te metieras en mi matrimonio —él frunció el ceño.

Pieck se veía molesta.

—¡Es algo absurdo! —chilló en voz baja— ¿Cómo podías quedarte con Mikasa cuando te estaba ofreciendo el irte conmigo? Fue algo que siempre quisimos ¿lo recuerdas?

—Eso fue mucho antes de que decidieras cambiarme por Colt. Esto ya lo hemos hablado Pieck, me estoy fastidiando —Eren también controlo su tono de voz para que nadie más escuchara—. Sobre todo porque esta vez lastimaste a Mikasa.

—No le pasó nada, ella solo se resbaló. Nunca se destacó por ser muy equilibrada.

—¿Por qué te creería? —Eren casi se rio en forma de burla.

—Deja de mentirte, de jugar a que estás enamorado de ella. Si querías castigarme lo has logrado, pero por favor —Pieck se acercó a Eren para tomarle el rostro con ambas manos— vámonos, aprendí mi lección, en serio. Nunca debí dejarte por Colt, lo sé y no sabes como me arrepiento.

Eren rompió el toque de forma brusca.

—Mi lugar está a lado de tu hermana porque ella tiene mi corazón.

Pieck retrocedió sin poder creer aquello.

—Si no me quieres de regreso esta bien —dijo Pieck, frunció el ceño— pero no trates de fingir que esto lo haces por Mikasa porque no te creo nada.

—¿Por qué te mentiría?

—Es Mikasa, ¡por todos los cielos! ¿Cómo podrías quererla cuando me tuviste-me tienes a mi? No es bonita, apuesto que no te complace como yo...

—No te permito que hables así de mi esposa —Eren le tomó de la muñeca, apretando su agarre—. Si no la vas a respetar como tu hermana, respétala porque es mi mujer.

Pieck se soltó de su mano evidentemente enojada.

—¡Cállate! ¡Deja de decir tantas estupideces juntas! Eren escucha lo que estás diciendo, no tiene sentido.

—Solo estoy diciendo la verdad. Amo a Mikasa con toda mi alma, con cada centímetro de mi cuerpo.

Mikasa contuvo la respiración al escuchar esas palabras, su corazón casi se sale de su pecho.

—No tendría porque decírtelo, con que ella lo sepa es más que suficiente pero insistes en que algo entre nosotros aún puede pasar —Eren acortó de nuevo la distancia—. Y si tengo que llevármela de aquí para que no le hagas más daño, créeme que lo haré —finalizó.

Pieck se quedó seria.

—Si te quieres mentir diciéndote que la amas, adelante, el único infeliz serás tú —guardó silencio por unos segundos— ¿Cómo te atreves a querer dejarme en un momento como este?

—Te dejé hace mucho tiempo Pieck.

—Te necesito más que nunca.

—Yo a ti no. Tengo todo lo que necesito a lado de Mikasa —Eren caminó hacia la puerta que tenía adelante a una distancia considerable—. Siento que hayas perdido casi todo, pero aún tienes a Colt, él es tu esposo y en un matrimonio siempre se deben apoyar, más ahora que estarán atravesando tiempos malos.

Eren llamó a la puerta y segundos después Colt abrió, sorprendido y algo nervioso, probablemente por el asunto del dinero.

—Hola Colt, prometo no quitarte mucho tiempo —dijo Eren.

Este es el porque no podemos tener cosas lindasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora