Capítulo 4 - "No escogí esta ciudad, yo sueño con salir de aquí."

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"No escogí esta ciudad, yo sueño con salir de aquí."

París, Francia.

Lena.

Mi semana había sido una completa mierda, el estrés me estaba matando y no dormía mas de 3 horas por día, me sentía demasiado cansada y la presión estaba presente día con día.

Nuevas campañas en la agencia se estaban haciendo presente y con ello el trabajo aumentaba para mí. Mi papa estaba consiente de que tenia bajo a su mando a mas de 100 personas en la agencia de Paris y no se cuántas más en Italia, pero él se empeñaba en dejarme la mayor carga a mí, todos los días me llegaba mas trabajo y el no evitaba que eso pasara, pero como yo siendo demasiado orgullosa no iría a llorar para que me quitara la carga. Por suerte Noelle se apiadaba de mí una que otra vez y me ayudaba con algunas cosas sin que mi padre se diera cuenta.

Realmente no se que intentaba probarme o demostrarme mi papa dejando casi todo en mis manos, tal vez por su mente pasaba el que no podría, lo que el no sabia era que tenía una capacidad extraordinaria para no rendirme tan fácil, por más difíciles que estuvieran las cosas, eso en parte se lo debía a él.

No había tenido tiempo de hablar con Pierre como me hubiese gustado, respondía sus mensajes a la larga, pero él no se molestaba por mi desinterés, en cambio parecía que le atraía que lo mandara un poco a la mierda por la carga de trabajo que tenía. Ni mucho menos había tenido el tiempo suficiente para hablar con Lando e irle con el chisme de que había conocido a uno de sus compañeros, pero tenía pensado hacerlo en el transcurso de día de hoy después de entregar los documentos que se encuentran en mis manos para por fin irme a mi departamento.

Siento que me urge un baño relajante y uno una ducha de apenas unos minutos, necesitaba tomarme mi tiempo para quitarme un poco de estrés y estaba dispuesta de darme ese tiempo hoy.

envió los últimos correos a algunos de los clientes que mi padre ha conseguido y apago todo dispuesta a dejar los documentos en la oficina de mi papa para poder irme a descansar, el fin de semana no saldría para nada, quería tener tiempo para mí.

Toco levemente la puerta de la oficina del señor que me tiene estresada hasta no poder más y cuando escucho su respuesta entro a su oficina. Como siempre todo se encuentra en silencio por lo que se escucha solamente el ruido que mis tacones producen al caminar.

— Esto es lo ultimo que tenia por entregar, he mandado todos los correos a los clientes nuevos y he cotizado los proveedores que me dijo Sylvia en la mañana, así que he terminado todo por hoy. — Dejo los documentos sobre su escritorio y el solo me decía un asentimiento por lo que se que se encuentra muy ocupado como para ponerme demasiada atención así que me doy la vuelta para salir huyendo de su oficina antes de que me pida algo más.

— Descansa hija. — Es lo único que dice y en realidad es algo porque no suele decir nada.

— Nos vemos el lunes.

Ninguno de los dos dice algo mas y yo salgo huyendo para tomar mis cosas. No duro más de un minuto recogiendo todo y me despido rápidamente de Noelle.

Me duelen demasiado las piernas, los tacones estaban acabando conmigo y moría por ir a deshacerme de una vez por todas.

Paso por un poco de comida china y voy directo a mi departamento sin detenerme en algún otro lugar. Justo ahora la paciencia no era una de mis mejores virtudes.

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