No me gusta él, me gustas tú [Okuyasu x Reader]

Aprueba

Después de lo que Hana dijo, realmente quería salir a ver a Okuyasu. Sentía culpa al pensar que por mi curiosidad entré a donde no debía y ahora esta preocupado.

Me había cansado de corre, pero seguía caminando, y en las puertas que estaban cerradas se abrieron cuando pasaba al lado suyo.

Miraba su interior y en algunos eran recuerdos a los que ya había entrado.

¿Y si entro a este?

Solo será un momento.

Y entre al recuerdo...

- No digas eso - dice Okuyaso quejándose.

- Bueno, entonces dime lo que tu imaginas - dejé de reírme.

- Acércate - pide, me siento lo más pegada que puedo.

- Ahora, dime - siento como me mira y sus mejillas estaban sonrojadas.

- Nos imaginé casados, al principio no tendríamos hijos pero tendríamos a nuestra maceta y a mi padre. Quizás con los años tendríamos 2 hijo, el mayor se llamaría Keicho, cuidaría a sí hermanita Hanami aunque si se parece a su madre, estoy segura de que será lo suficientemente inteligente para cuidarse sola - los ojos de Okuyasu se miraban con un brillo muy lindo al hablar de eso.

Yo lo abracé y me había sonrojado al imaginarme lo que decía. Recuerda que le había dicho que Hanami se me hacía un nombre muy bonito, realmente pensé que lo olvidaría. Este me abraza y me da un beso en la cabeza.

- Si tu quieres trabajar, yo me quedaría cuidando a los niños, te prepararía el almuerzo e iría a llevártelo para que no tengas que calentarlo, cuando llegues tendría la cena lista y a los niños aseados, que querrían ver a su mamá - sonaba tan lindo eso.

Cuando iba a salir del recuerdo sentí que algo cambió.

- En el tiempo que no tuviéramos hijos, podríamos viajar, disfrutar de nuestra compañía sin tener tantas preocupaciones. Solo vivir el momento - toma mi cabeza y me besa pero no igual que siempre, un beso que no sabría explicar.

Okuyasu nunca me ha besado de esta forma y no recordaba que esto hubiera pasado así.

Una frase resonó en mi cabeza, necesitas fuerza de voluntad...

Las manos de Okuyasu me acercaban más a él, pero este no era Okuyasu, quizás el stand a este punto actúa independientemente, yo debo derrotarlo.

Dejo que mi stand aparezca y golpee a Okuyasu, me dolía hacer es pero, solo parece ser el. El esta fuera junto a mi.

- ¿Qué sucede? - pregunta confundido, este se había puesto de pie y se había alejado - ¿Hice algo mal?

Su voz, su cara me hacían sentir culpable.

- Lo siento, yo... - no supe que hacer, veo que se acerca y me abraza.

- Tranquila - susurra en mi oída provocando un escalofrío - ¿Por qué estas tan rara?

- No lo sé - su voz no me dejaba intentar irme.

- Si quieres ya no te beso - su voz sonaba desanimada.

- No, claro que... - Este me besa pero ahora sentía que su forma de besar era igual a la de Okuyasu, no me alejé, sentí sus manos pegarme más a él. Al separarnos rápidamente vuelve a besarme hasta acorralarme contra la pared, sus manos tomaban mis piernas haciéndome sentir escalofríos.

- ____, te amo - dice entre besos. Deja de besarme para llegar a mi cuello dejando humedad en este.

Olvidé que esto se sentía tan bien.