CAPITULO 20
+
Estos días me he sentido tan estresado mi único entretenimiento ha sido evelyn ella es una de las pocas mujeres que no me aburre pero últimamente hacer lo mismo de siempre con ella, comienza a cansarme debo buscar más diversión me lo merezco.
Me levanté en la madrugada mi taylor estaba tan dormida ella me vuelve tan loco tenía mi ropa puesta eso me excitaba, como quisiera hacerla mía en estos momentos que esta dormida, tocaba sus hermosas piernas tantos pensamientos vienen a mi cabeza que muy pronto los haré realidad
La dejé descansar hoy me encontraría con un viejo amigo con el cual empecé mis primeros crímenes, se había ido por un tiempo pero regresó y le tengo que dar su bienvenida
Subí a mi coche, antes tenía que hacer una parada.
Llegué a unas de las mejores joyerías en new york la dueña es unas de mis chicas está casada con un político ya que le encanta el dinero
Aún no habría su tienda pero se que llega muy temprano, entre por la puerta de atrás
La vi de espalda, esa mini falda que hacían lucir esas piernas largas era excitante, la tomé de la cintura y le susurré al oído — me extrañaste linda
Ella dió un pequeño brinco — ¡ah! Me asustaste — se mordía los labios
— me tienes muy abandonado
— lo mismo digo amor — mordió mi oreja
— acaso ya te diviertes con el imbécil de tu esposo, te hace gemir como yo lo hago
Ella reía — estás celoso
La tomé de la barbilla — tu no eres la gran cosa ¡celos! Por favor solo te quiero para follar ¡lo que pase en tu puta vida a mí me vale madre!
— me encanta que me hables así, me estás excitando ¡háblame más sucio!
— así — la tomé fuerte de los pelos y baje mis pantalones — ya sabes que hacer
Ella se hincó — me encantas tanto evan — tomó a mi duro amigo introduciéndolo a su boca lo tomaba como si fuera una paleta, lo lamía y mordía
— ¡ah! Hazlo más rápido linda
— espera lo tienes tan grande que quiero disfrutarlo
Su lengua hacia magia, la puse de espaldas contra la mesa alzando su falda, hice a un lado su panti metiéndosela toda, le daba embestidas fuertes
— ¡Evan hazlo más fuerte!
— a tus órdenes linda
Subí la intensidad, sus gemidos podían escucharse por toda la tienda, la tomé del cuello dándole más fuerte
— creo que — ella cayó al suelo inconsciente
— es enserio ¡Oye! — la movía — mierda te desmayaste antes de que me corriera — reía — que lastima ya no aguantas
Odio que no me dejen terminar, que ni crea que la voy a levantar solo le puse algo de alcohol y me largue.
Maneje por cinco horas ya estaba entumido el imbécil de mi amigo me citó tan lejos, prendí un cigarro para des estresarme cuando entró una llamada
(Muñeca 🔥)
— que mierda quieres
— ¿Evan?
— estoy muy ocupado deja de quitar mi tiempo
