The Game - Julián Alvarez

°The Chapter 2°

El escándalo mediático era algo constante y estando vinculada con uno de los jugadores más famosos del país, su nombre se encontraba en la boca de todos.
Llevaba días intentando ignorar sus redes sociales para evitar ver comentarios y saber de su antigua pareja y lo que estaba haciendo.

Su proceso de duelo continuaba. Ella no podía superar una relación de años en pocas semanas, pero si había podido reflexionar y se arrepentía profundamente de algunas cosas.

Se arrepentía de no haber visto todas las señales que le indicaban que la relación con el jugador no era sana. Se arrepentía de haberlo defendido en ocasiones en las cuales no debería haberlo hecho y haberse peleado con tanta gente que no le había hecho nada a ella.
Se arrepentía de todo lo que alguna vez hizo por el hombre al que le dedico meses de su vida.

Y necesitaba decírselo.

Quería gritarle en la cara lo mucho que la había lastimado y todo lo que estaba viviendo por culpa suya. Necesitaba verlo una última vez para poder expresarle todo su enojo de la manera que ella creía justa y poder hacerle sentir una mínima parte lo que ella sentía en esos instantes.

Por este motivo Abigail se encontraba a las doce y media de la noche en el auto de su amiga mirando atentamente por la ventana, intentando encontrar al hombre que la había arruinado. Mucha gente pasaba por la zona, pero no había rastro del jugador, por lo cual ella comenzó a inquietarse.

-Creo que ya está adentro Mai, llegamos tarde-

-Esperemos que no – Su amiga buscaba con la mirada entre la gente al igual que ella, desde el asiento de piloto a su lado- No maneje durante una hora para que te vuelvas con las manos vacías-

-Estamos hace rato esperando y no aparece– La joven se acomodó el dobladillo de su vestido de fiesta negro incomoda ante la situación.

-Está bien, pero yo no pienso volver hasta que no le grites a ese desgraciado-

Abby soltó una risa por la convicción de su amiga de quedarse a pesar de todo. Aunque las ganas de confrontar a su ex eran enormes, también había una parte de ella que tenía miedo de las posibles consecuencias de sus actos.

Se había enterado que todos los jugadores de Boca iban a asistir a una fiesta privada en un club que se encontraba lejos del centro. Al contarle a su amiga, concretaron un plan para poder confrontarlo en la entrada de aquella fiesta ya que suponía que no la iban a dejar entrar al recinto.
Llegaron 20 minutos antes de que comenzase el evento y llevaban esperando alrededor de otros cuarenta. Aun así, no había señales del jugador ni de sus compañeros, por lo que Abigail supuso que el equipo ya se encontraba dentro de la fiesta y pudo confirmarlo a través de sus historias de Instagram.

-Ya está Mai -Suspiro dándose por vencida mientras se recostaba contra el vidrio del auto.

-No Abby, vamos a encontrar la manera de entrar ¿me escuchaste? No me importa si tengo que...-

La voz de su amiga se vio interrumpida por un par de golpes en la ventana que estaba a su lado. Al voltear se pudo encontrar nada más y nada menos que con la sonrisa burlona del cordobés de River con el que tan mal se llevaba.

La calle en la cual estaba detenido el auto era oscura, pero no lo suficiente como para no reconocer a Julián, que la observaba atentamente desde el otro lado del vidrio junto a Enzo.
El cordobés esperaba que baje la ventanilla para poder hablarle.

Ambas chicas se quedaron sorprendidas y en silencio durante unos instantes, debatiéndose mentalmente el motivo por el cual Julián había decidido acercarse al vehículo.