𓆩♡𓆪 𝐷𝑜𝓈 𝑅𝑒𝓎𝑒𝓈 𝐷𝑒𝓂𝑜𝓃𝒾𝑜𝓈 ¡¿𝐸𝒩𝒜𝑀𝒪𝑅𝒜𝒟𝒪𝒮?! 𓆩♡𓆪

capitulo 15 "Encuentros y preparativos"

Habían pasado algunas semanas desde que Rimuru llegó al castillo. Su compañía era agradable, aunque últimamente parecía más ocupado.

Milim, con algo de impaciencia, salió de su habitación en busca de alguien.

-¿Dónde está Frey? Necesito hablar con ella -murmuró mientras recorría los pasillos.

Al poco rato, encontró a Frey supervisando algunos detalles en uno de los salones principales.

-¡Frey! -llamó Milim, apresurándose a saludarla.

Frey se giró con una expresión de sorpresa.

-Milim, qué gusto verte por aquí.

-Vine a ver cómo van los preparativos para la fiesta y la boda. Quiero ayudarte en algo -dijo Milim con entusiasmo.

Frey sonrió con amabilidad.

-No tienes que preocuparte por eso, Milim. Soy tu subordinada, este es mi trabajo.

Milim frunció los labios, haciendo un puchero.

-¡Pero antes de ser mi subordinada, eres mi amiga! Déjame ayudarte, ¿sí?

Frey suspiró y asintió al ver la insistencia en los ojos de Milim.

-Está bien. ¿Qué te parece si me ayudas a elegir mi vestido de novia?

-¿Todavía no lo has elegido? -preguntó Milim, sorprendida.

-Organizar una fiesta de compromiso y una boda no es tan fácil como parece -respondió Frey con una sonrisa.

-Ya veo... Entonces, ¿a dónde vamos para elegirlo?

-A Tempest. He oído que allí hay buenos sastres, y Shuna puede ayudarnos a encontrar algo perfecto.

-¡Entonces vamos! -exclamó Milim, emocionada.

Con una sonrisa brillante en el rostro, ambas partieron rumbo a Tempest.

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En Tempest

Al llegar, Shuna las recibió en la entrada de su taller con una elegante reverencia.

-Milim-sama, Frey-sama. Bienvenidas.

-¡Hola, Shuna-chan! ¿Cómo has estado? -preguntó Milim con alegría.

-Estoy bien, gracias por preguntar, Milim-sama.

-Me alegra mucho oír eso -agregó Frey.

-Pasen, por favor. Supongo que no han venido solo a visitarme -dijo Shuna con una sonrisa cálida mientras las guiaba al interior.

Mientras observaban los diseños de los vestidos, Milim dejó volar sus pensamientos. Quizás esta era una oportunidad para encontrarse con Rimuru. Sabía que él también estaba en Tempest, ocupado con sus asuntos.

"Tal vez pueda verlo... y si tengo suerte, podría hablar con él sobre lo que siento", pensó, apretando ligeramente sus manos contra el pecho.