Capitulo ocho

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Sirius O. Black

Cuando Remus se sienta a mí lado tiene las mejillas rojas. Lo miro durante unos segundos, sin entender ¿Que le dio ese toque de color a sus mejillas? El me mira de vuelta, permitiéndome regalarle una sonrisa.

-¿Me dejarías delinearte? -pregunto repentinamente. Un simple pensamiento que se pasa por mí cabeza.

-¿Ahora? -Asiento rápidamente con mí cabeza y el se encoje se hombros. -Okay.

Lo tomo por el brazo y lo obligo a subir las escaleras hasta mí habitación, donde tengo toda una bolsa de maquillaje lista para usarse.

-¿Esta es tu pieza? -De reojo noto como mira los pósters en las paredes. -Nos gusta la misma música -murmura viendo un póster de David Bowie, el que está justo en la cabecera de mí cama.

-Es que tienes buen gusto, y yo tengo buen gusto -Por eso nos besamos quiero agregar, pero no lo hago, porque no quiero arruinar el ambiente. -. Siéntate en la cama, vamos

Me hace caso casi automáticamente y yo me acerco hacia él, haciendo lo imposible por encontrar una posición cómoda donde poder maquillarlo.

-Puedes... sentarte sobre mí, si quieres, para que estés más cómodo -dice luego de verme batallar.

Mí mente se nubla y lo único que pasa por mí mente es la idea de estar arriba de Remus en una cama, en mí cama. Asiento levemente y me acomodo sobre él.

-Voy a hacerte el maquillaje completo ¿Tienes algún problema con eso? -Mi intento por romper la tensión funciona, pues me mira y niega.

-Haz lo que tu desees. -Y allí se van mis esfuerzos.

Veo como se esfuerza por no tocarme con sus manos, buscando posiciones cómodas que no involucren mí cuerpo. A si que tomo sus manos y las pongo sobre mis piernas.

-No me molesta que me toques, Moony -digo mientras comienzo a colocar la base. Tenemos suerte de que su tono sea casi tan pálido como el mío, porque si no, le quedaría horrible. -Tienes la piel perfecta, eres un maldito

-Claro, exceptuando mis cicatrices, antes era aún mejor -murmura distraídamente, con sus ojos fijos en mí.

-¿Es muy inapropiado preguntar cómo te las hiciste? Están en todos lados -Termino de colocarle la base mientras hablo y comienzo a colocarle el polvo compacto, las tres cicatrices de su cara son a penas visibles.

-Accidente de autos -responde con simpleza. -, iba tomado y no pude frenar, choqué y los vidrios me cortaron por todos lados de la cadera para arriba

Mientras el habla le coloco algo de rubor e iluminador, no sabía que podría verse más malditamente hermoso de lo que ya es.

-Si me lo preguntarás a mí, son calientes -digo sin pensar.

-¿Calientes? -Suelta una risa falsa. -Sin ellas estaba mejor

No le creo, pero porque no puedo imaginarlo sin ellas.

-Cierra los ojos, corazón -repito el apodo que me dijo hace unas semanas.

Sonríe un poco y cierra los ojos, comienzo a poner sombra marrón en su párpado.

-¿Moony? -Sus ojos no se abren, pero de su garganta sale un ruido de afirmación. -¿Vamos a hablar algún día sobre el beso?

-¿Tu quieres hablarlo? -pregunta el mientras difumino la sombra de ojos.

-Quiero -afirmo. -Abre los ojos -le indico mientras destapo el delineador.

Me hace caso y casi quiero pedirle que vuelva a cerrarlos, ya que me mira con una fijeza que solo me pone nervioso. Me acerco a su rostro y le indico que no se mueva, estamos a solo un par de centímetros de distancia mientras yo le hago el delineado, que le resalta sus ojos avellana. Por esos minutos me siento de nuevo en el armario, y, por como presiona sus palmas contra mis piernas, el también se siente así.

Háblame en español (Wolfstar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora