Capítulo 27: Un regalo

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Chloe se acerca a nosotros con pasos suaves y una sonrisa en su rostro. Sostenía en sus brazos una bebé como de un año, usaba un vestidito y un moño color rosa pálido. Era preciosa pero lo que más nos llamó la atención en la criatura era la pequeña luz azul proveniente su sien. Generalmente los niños androides aparentaban más edad, nunca habíamos visto un bebé androide.

-Felicidades, ahora son padres-Dice la rubia manteniendo su sonrisa amplia, ofreciéndome la oportunidad de tenerla entre mis brazos. Connor y yo nos miramos con asombro. Con extremo cuidado la tomo, como si fuera el ser más frágil del mundo y pude sentir la necesidad de protegerla, con solo verla ya la quería. El instinto maternal afloraba en mí, como si un nuevo programa fuera puesto en marcha. Después de acomodarla mejor en mis brazos; la pequeña miraba intranquila y curiosa todo a su alrededor, balbuceaba y movía discordinadamente sus pequeñas manos. Connor la observa atentamente, como si estuviera analizándola. Se mantenía en silencio con una sonrisa y su LED brillando entre amarillo y azul. La pequeña luz de la pieza circular llama la atención de la pequeña y sonríe al ver a Connor. Él la mira de forma enternecida, y le acaricia el pelo. Definitivamente era nuestro amor a primera vista.
-¿Hija?-Le preguntó a Kamski aún sin creerlo
-Los escuché en su boda cuando dijeron que jamás serían padres y quince tener este gesto con ustedes.
-¿Se quedará siempre así de pequeña?
-Su maquinaria funciona con un mecanismo cronometrado, detendrá su crecimiento cuando cumpla 23 años.
-¿Y que cuidados necesita?-Le pregunto meciendola en mis brazos.
-Deben darle un biberón con plasma azul cada 8 horas. Igual aquí tienen un manual- se lo entrega a Connor, que lo aceptó viendo solo la portada en la tablet.
-¿Es divergente?
Le pregunta Connor mientras acariciaba las pequeñas manos de su hija. La bebita se agarraba el dedo de este. Era muy lindo verlos.
-Sí, de hecho actuará tal y como lo haría un humano a su edad; hará berrinches por todo y llorará sin motivos. Deben enseñarla a hablar y a caminar.
Lo miramos sorprendidos asimilando tanta noticia.
-Tranquilos es una máquina y aprenderá rápido. Es un modelo que diseñé exclusivamente para ustedes. No solo es físicamente parecida a sus padres, me asegure que también herede la personalidad de uno de ustedes o ambos.
Connor arquea sus cejas sorprendido
-¿Como es eso posible?
-Busqué patrones únicos en sus programaciones de base y lo fusione de manera aleatoria en ella-
Escuchabamos con total atención las palabras de Kamski.
-Puede gustarle los perros, heredar la agilidad física de Connor o puede gustarle almacenar información y tener la habilidad cognitiva de Eva o ambas cosas. Es aleatorio- concluyó con una sonrisa el pelinegro.
Eso significa que nuestra hija, tiene una parte de mí y de Connor. La idea me ilusionaba cada vez más.
-No le he puesto nombre; decidanlo ustedes, inscribanla como su hija y vallan a comprarle cosas de bebes.
-Kamski, no sabemos cómo agradecerle.
Le digo con lágrimas de felicidad que amenazan con salir.
-Ahora su familia está completa. Ya no tienen nada que envidiar a los humanos. Si tienen cualquier duda o quisieran ponerme al tanto pueden llamarme.
-Eso haremos-Le dice Connor.
-Les deseo lo mejor-Se despide tomando el elevador con Chloe, quien se despide de nosotros agitando su mano.

Entramos a la casa con el nuevo miembro de nuestra familia
-¿Cómo la llamamos?
Me pregunta Connor.
-¿Qué te parece Izzy?
-Es un lindo nombre¿Puedo llevarla yo?
-Claro es tuya también. Con cuidado-Se la entrego Connor que trata de acomodarla en sus brazos, hasta que encuentra la forma correcta de cargarla, Izzy arrecuesta la cabeza en su hombro, algo así como una forma de abrazarlo. Él sonríe ante el gesto afectivo e inocente.
-Le agrado- dice con una sonrisa triunfante. Estaba presenciando la viva imagen del amor.
-Ya veo.
-No te pongas celosa, tú también le gustas. ¿Verdad que sí?
Le preguntó a Izzy quien sonreía solo con escuchar su voz. Connor también había desarrollado de forma automática su instinto paternal. Se veía muy tierno. Lo que en un inicio había sido solo un sueño imposible se había vuelto realidad. Kamski tenía toda la razón al decir que amaríamos su regalo.
-Me encanta sus ojitos, porque son como los tuyos.
Me sonrió mientras se sentaba con ella en su regazo. Nuestro perro se acerca con curiosidad a verla y ella comenzó a moverse torpemente, creo que tenía intención de tocarlo y así lo hizo. Max comenzó a mover la cola al sentir la pequeña mano en su cabeza. El primer rasgo hereditario salía a relucir, como su padre también le agradaba los animales.
Connor y yo nos miramos con cariño por unos segundos y nos besamos. El amor en todas sus formas posibles estaba en el aire. La vida de 4 seres entrelazadas, bajo un mismo techo, unidas mediante vínculos que eran imposibles de romper. De eso se trataba tener una familia; en la cual desempeñaba mi papel de compañera, esposa y ahora el papel de ser madre.

Fin

Nota de autora:
Bueno, aquí termina Moriría por Vivir. Muchas gracias a todos los que han llegado hasta el final de esta historia. Aprecio mucho que hayan tomado su tiempo para leerla y dejarme saber que les ha gustado con sus votos y comentarios.
Me encantó escribir esta historia inspirada en Detroit Become Human. De hecho aún sigo inspirada. Si quieren un nuevo fanfic Connor's Secret ya está publicado.
Saludos🤗

Moriría por Vivir//Detroit Become HumanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora