Después de haber dejado la habitación vacía. Hank y Conan salieron a la comisaría para resolver unas gestiones laborales. Connor y yo comenzamos a colocar los muebles que nos había comprado Hank. Luego de un rato el teléfono de la casa comienza a sonar y cojo la llamada.
-Diga- contesté.-Eva soy Hank
-¿Ha pasado algo?
-Hay una vacante en el puesto de psicología penitenciaria aquí en comisaría ¿Te interesaría?
-Claro,por supuesto ¿Cuando empiezo?- dije contenta
-Mañana mismo
Perfecto. Muchas gracias Hank.
-No hay de que. En 20 minutos regreso- se despide y cuelga la llamada.
-¿Qué ha pasado?-me pregunta Connor
-Voy a trabajar en comisaría, como psicóloga penitenciaria- anuncié con una sonrisa
-Es perfecto me alegro mucho.- me carga en un abrazo y me besa. Fue inevitable sonreir ante su dulce gesto. Continuamos arreglando la habitación hasta quedar satisfechos con el resultado final. Fuimos al salón donde esperábamos sentados el regreso de Hank.
En poco tiempo la puerta se abre, nos sorprendimos al ver a Conan con otro look su cabello ahora es un poco más corto, ondulado y peinado hacia atrás.
-¿Y esto?-Connor camina hasta él y pasa una mano por su cabeza alborotando su peinado.-Hank me ha llevado a cortarme el pelo. ¿Cómo me veo?
-Como yo con el pelo ondulado- reímos todos juntos.
-Almenos así sabré cuál es cuál- interrumpe Hank. Chicos les compré algo de ropa no es mucha. Mejor deberían ir ustedes a escogerla a su gusto.
-Si había mucha variedad a mí me costó decidirme- comentó Conan.
-Vale,muchas gracias- acepté la bolsa.
En la noche preparé la cena para Hank, esta vez Connor me ayudó y hasta parecía interesado en aprender a cocinar. Se respiraba un ambiente familiar muy agradable aunque el único que comía en la mesa era Hank.
Como le prometí retomamos con su terapia, en cuanto acabó de cenar. Estaba menos molesto que la última vez, conversaba abiertamente conmigo, con esa actitud me resultaría más fácil ayudarlo. Le recomendé hacer ejercicios de respiración diariamente en las mañanas. Él escuchaba atentamente mis concejos y prometió cumplir con mis indicaciones.
Luego de eso vimos una película todos juntos, era entretenido ver la televisión, no pensé que me gustara. Cuando terminó nos habíamos retirado a descansar, Connor y yo nos fuimos a nuestra habitación. Se sentía muy raro ese término "nuestra habitación". Dejé caer mi cuerpo sobre la cama y suspiré profundamente, era muy cómoda, sería la primera vez que dormiría en una y además con compañía.
-¿Qué esperas? acuéstate, está muy comoda- invité a Connor que estaba de pie a un lado de la puerta, parecía tenso.-¿Qué pasa?- pregunté al ver su LED volverse en amarillo.-¿Puedo hacerte una pregunta?- se sentó en el borde de la cama, me resultaba tan tierno cada vez que decía eso.
-Las que quieras- le respondí
-¿Por qué te enamoraste de mí?- me levanté para verlo mejor, no esperaba dicha interrogante, sin embargo no pensé tanto en la respuesta.
- Tenías ese lado humano y sensible que siempre salía a relucir.
-¿Por qué dices que tenía?
-Porque ya no lo ocultas, ahora eres tú y me encantas. Tu mirada inocente, tus preguntas curiosas, la forma tan coqueta en que te acomodas la corbata, tu sonrisa, tu voz. -suspiré profundamente. -Bueno y por muchas más cosas; simplemente me enamoras y ni siquiera te das cuenta- añadí finalmente. Ante mis palabras se lanza a abrazarme noté que intentaba reprimir llanto. Lo estreche entre mis brazos.
-¿Por qué lloras cariño?
-¡Qué bonito eso que me has dicho!Perdon que me ponga así.
-No pasa nada me gusta que seas así- acaricié su espalda.
-¿Qué fue lo que te gustó de mí?- le pregunté, ya que también sentía curiosidad de escucharlo.
-Tú emanas alegría donde sea que vallas, siempre dispuesta a ayudar a los demás de forma amable sin esperar nada a cambio, tienes esa gran virtud. Me encanta lo que siento cuando me miras, cuando me hablas, como te preocupas por mí.- no pude evitar conmoverme igualmente con sus palabras.
-Tú también dices cosas muy lindas-pase una mano por mi rostro para secar una lágrima. Él me vuelve a abrazar con fuerza, escuchaba sus quejidos, no entendía qué lo hacía sentirse así, por lo que pregunté en busca de una respuesta.
-¿Por qué sigues llorando?
-Es... Es que ayer mismo estábamos en medio de una revolución y ahora me parece mentira que estemos compartiendo cama- habló con dificultad-Lo siento no puedo evitar llorar- sollozó
-No te disculpes, llora, desahogate has estado bajo mucha presión- le di un beso en la frente y él continuó buscando amparo en mis brazos.
-No quiero que me veas así, pensarás que soy un débil.
-Claro que no, solo estás siendo humano.
-Todo este tiempo intenté ser fuerte y mantener la calma pero tenía mucho miedo, aún tengo miedo.
- ¿A qué le temes?
- A perderlo todo, a no saber llevar nuestra relación, a todo este cambio.-enumeró, lo miré melancólica, sentir miedo y preocupación es algo normal, pero verlo así me hacía sentir un nudo en la garganta.
-Te entiendo Connor yo también tengo miedo. Todo esto es nuevo para nosotros, es normal sentirse así; pero no dejes que tus miedos se apoderen de tí.- él asiente y guarda silencio.
Luego de unas horas en llanto por fin logramos descansar.
Era temprano y me desperté antes que él, sus ojos se mantenían cerrados en un plácido descanso, se veía tan dulce que no pude evitar darle un beso que ni siquiera percibió. Tomé una ducha y me vestí formalmente para mi nuevo trabajo. Dejé preparado el desayuno para Hank y alimenté a Sumo. Conan ya estaba despierto llevando su uniforme de CyberLife.-¡Qué bien huele!- el teniente sale de la habitación bostezando.
-Buenos días Hank, ¿ya hizo su ejercicio matutino de respiración?
-Sí en mi cuarto.
-Le he preparado el desayuno.
-Muchas gracias. Muero de hambre- le da un bocado a la tostada.
-Buen provecho.
-¿Y Connor?
-Lo dejé descansar un rato, ahora voy a despertarlo.
- Que raro él es muy madrugador ¿Ha pasado algo?
-Anoche tuvo una crisis emocional.
- ¿Él?¿por qué?
-Nuestra vida ha dado un giro muy drástico, él está en proceso de adaptación al cambio. Piensa demasiado las cosas y además siente miedo.
-¿A qué? Si ya lo peor pasó.
-A perderlo todo- Murmuré
-Entiendo. Si se siente así, será mejor que no valla hoy a trabajar, Conan puede cubrirlo y tú puedes quedarte con él aquí en casa.
-No pasa nada, iré al trabajo. -Apareció ya vestido con su uniforme.
-Pero ¿te sientes bien?- le preguntó Hank mostrando preocupación.
-Sí, lo estoy. ¿Nos vamos?
-Si incistes- Hank se levantó de la mesa y avanzó en dirección a la salida.
-¿Seguro que estás bien?- le volví a preguntar.
-Mejor que nunca-Respondió después de haberme dado un beso y mirarme con ojos más alegres que los de la noche anterior. Supongo que solo fue un episodio puntual, en caso de volver a recaer estaré allí para levantarlo.
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Moriría por Vivir//Detroit Become Human
Fanfiction* KX700 (Eva) es la androide especializada en comportamientos y emociones humanas. Dotada de un amplio conocimiento teórico que no debería llevar a la práctica. A pesar de todo su saber se vé atormentada por una serie de preguntas que no logra respo...