Moriría por Vivir//Detroit Become Human

Capitulo 25: RK900

Aquella mañana me había despertado con unos besos cálidos en mi hombro. Sus brazos fuertes envolvían mi cintura y me acercaba más a él.
—Buenos días— susurró dulcemente pegado en mi cuello.
—Buenos días, creo que nos quedamos dormidos— le dije después de registrar la hora en mi sistema.
—Normal, ayer gastamos mucha energía— sonreí ante el recuerdo. Él seguía besando mi hombro y después mi cuello.
—Sí, eso debe ser— afirmé en un suspiro y cerré los ojos disfrutando de sus besos que luego combinaba con suaves caricias. Me giré para ver sus ojos color café que me miraban con cariño y algo más. Nuestros labios se juntaron en un beso suave y apasionado, estabamos punto de caer en la tentación de dejarnos llevar por el deseo, pero el momento íntimo se ve interrumpido por unos inoportunos toques en la puerta
—Chicos, vamos, ya es tarde— habló Hank del otro lado. Anoche había salido junto a Conan, debieron haber llegado en la madrugada.
—Ya vamos— respondió Connor poniendo los ojos en blanco. Me separé de él y comencé a vestirme para ir al trabajo, pero él seguía tendido en la cama.
—No quiero ir— bufó de manera infantil, abrazado a la almohada lo cual me causaba risa y ternura.
—Vamos, levantate— lo jalé por el brazo, pero él me tiró hacia él y me aprisionó en sus brazos.
—Quiero quedarme un poco más contigo.
—Y yo, pero no es momento de ponernos cariñosos. Hank nos está esperando.— forcejee intentando zafarme de su agarre.
—Vale, si me das un beso te suelto—sonreí con su inocente petición, la cual cumplí sin protestar y me dejó libre como prometió. Él comenzó a vestirse, continuaba con el mismo uniforme de CyberLife, mientras tanto yo recogía mi pelo a un lado. Le dí un último beso antes de salir de la habitación.
Hank y Conan nos esperaban el sofá.
—Ya casi me iba sin ustedes— gruñó levantándose del sofá y apagando la televisión
—Lo siento, nos quedamos dormidos— explicó Connor algo avergonzado.
—Como sea ya tenemos que irnos— ignoró lo dicho, haciendo que nos sintieramos menos incómodo, ya que era la primera vez que se nos hizo tarde.

El día había sido tranquilo, tuve una hora libre por lo que fui a visitar a Connor, que estaba en otra planta. Al llegar a la oficina encontré al humano, que estaba solo sentado en su escritorio viendo la pantalla de su celular.
—Hank ¿cómo va todo?
—Bien, por ahora solo queda archivar unos casos, Connor dijo que lo haría.
—¿Y dónde está Connor?
—Está en la cafetería con su nuevo hermano— lo miré confundida.
—¿Nuevo hermano?
—Sí, mejor veelo por tí misma— hizo una seña para que me fuera hasta donde se encontraban.

Me dirigí a la cafetería para encontrarme a los tres androides conversando. Uno de ellos era más alto y vestía un uniforme blanco, era un modelo RK900.
—Eva, llegas en buen momento— Connor camina hacia mí para darme un beso y acercarme a los demás.
—Hola Eva, justo ahora Connor me estaba hablando sobre tí— saludó el nuevo androide. Ya veo porque Hank hablaba de nuevo hermano, eran bastante parecidos, solo tenía algunas diferencias mínimas, además de la ropa, la expresión de su rostro era más ruda y sus ojos eran de un color gris azulado
—Me llamo Nines. Anteriormente fui creado para reemplazar a Connor, pero dichas instrucciones han sido reemplazadas.
—¿Por qué ibas a reemplazar a Connor?
—Porque soy un modelo más avanzado. Por ahora me asignaron un puesto con el detective Gavín Reed— explicó calmadamente.
—¿Eres divergente?— le pregunté al notar su forma tan neutral para comunicarse.
—No lo soy— niega con la cabeza
—Por ahora, con Gavín como compañero lo va a tener difícil— dijo Connor mostrando una sonrisa ladina. Eso era una posibilidad, Gavin era irritante y grosero. El androide no sabía el tipo de gente con quien debía lidiar, por lo que nos miraba con algo de incertidumbre.
—Creo que no te entendió— murmuré al ver la expresión confundida de Nines
—Yo digo que le tira el café en la cabeza— opinó Conan mientras reía
—Yo creo que le dará una paliza— dijo Connor de manera burlesca.
—Oigan, no haré nada de eso— intervino el más alto.
—Ya veremos de todos modos estaremos cerca para separarlos. Te daremos algo de ventaja— Conan le guiña un ojo.
—Pero tampoco lo mates— los gemelos continuaron burlándose de Nines quien no se inmutaba con las risas.
—Si quieres continuar como robot, puedes hacerlo, la decisión es tuya. Lo que quiero decirte es que no permitas que te humille—Connor intentó alentarlo y Nines sonrió levemente a su comentario.
—Recuerda que tienes derechos— añadí amablemente a lo que el asintió.
—Oye, tú, pedazo de lata ¿dónde está mi café?—entró Gavin ofendiendo a su nuevo compañero.
—Ya voy detective— Nines ignoró su insulto, sirvió el café y le ofrece el vaso humeante de forma amable. Este lo aceptó de mala forma.
—Ya veo que has hecho amistades por aquí— el detective le dió un sorbo a su café y nos miró de reojo. El androide permanecía firme sin responder.
—Le estábamos convenciendo de que no te matara— bromeó Connor, yo pellizqué su brazo por el comentario y Conan contuvo la risa.
—No estoy hablando contigo— regañó molesto, Gavin aún seguía resentido con nosotros.
—Nines, vamonos de aquí, tenemos trabajo que hacer— el androide siguió al detective malhumorado.
—Connor yo también me tengo que ir. Nos vemos en casa.— me despedí con un beso y volví a mi trabajo.

Siempre era la primera en llegar a casa. Una o dos horas después llegaban los demás pero esta vez ya era de noche y me comenzaba a preocupar la tardanza, cuando me sentí más tranquila al escuchar el auto de Hank estacionarse. El teniente se escuchaba molesto desde afuera.
—Ustedes no podían quedarse quietos— entró Hank peleando con los androides que estaban desaliñados como salidos de una pelea.
—¿Qué ha pasado?
—Lo siento Hank, pero no me pude quedar de brazos cruzados. Ese Gavin es un idiota—habló Connor en voz alta ignorando mi pregunta.
—Ya lo sé, pero ese no era asunto de ustedes
—¿Qué quería que hiciéramos?, dejar que continuara maltratando a Nines. Yo creo que merecía un escarmiento—habló Conan igual de alterado.
—Dejen de pelearse ¿Alguién puede decirme que ha pasado?— volví a preguntar levantando la voz y ganándome la atención.
—Connor se peleó con Gavin y luego Nines también se animó a pelear—Vociferó Hank de manera molesta, lo miré seria esperando una explicación.
—Ya estaba harto de ver cómo lo ofendía— se justificó
—Dejaron que Nines golpeara a Gavin. Y luego no pudieron separarlos.
—Era más fuerte que nosotros. Pero usted tampoco se molestó en separarlos al principio— Hank arrugó la frente sin saber que decir; parece que en un inicio estuvo de acuerdo con la confrontación.
—¿Y qué pasó con ellos?— pregunté
—Nines fue amonestado porque le fracturó el brazo a Gavín—Respondió Connor, lo miré con sorpresa no pensé que llegara a ese punto.
—Pero no es muy grave, se pondrá bien en unas semanas— explicó Conan.
—Nines le pidió perdón y prometió ayudarlo en su recuperación, parecía arrepentido. Puede que con el tiempo se lleven mejor— continuó contando lo sucedido.
—Reconozco que fue mi culpa, pero yo solo lo estaba defendiendo. Y él se transformó cuando intervine— confesó Connor de un modo más calmado.
—Estoy de tu lado y no te juzgo, tenías buenas intenciones. Además sabes que apoyo el team Android— le guiñé un ojo mientras lo tomaba de la mano, a lo que él me sonrió levemente.
—Eva, se supone que debías regañarlo no defenderlo— habló el teniente en un tono gruñón
—Reaccionar ante alguna injusticia no creo que sea algo malo, solo que no fue de la manera correcta y lo acaba de reconocer. Pero estoy segura que le ha quedado claro y para la próxima se va a controlar. ¿Verdad que sí, Connor?— lo miré de manera comprensiva y él asintió con la cabeza
—Solo quiero que dejen de meterse en líos, que luego soy yo el que carga con ustedes— expresó Hank de forma exhausta.
—Prometo controlarme para la próxima—aseguró mostrando una sonrisa inocente.