Para cuando Wednesday encontró la cabaña, ya estaba empezando a oscurecer, si no se daban prisa volverían tarde y Enid haría demasiadas preguntas.
La pelinegra estaba dispuesta a entrar cuando Dedos la alertó de que alguien se acercaba.
Rápidamente se escondió en los arbustos.
Era el chico que pintó el cuadro en su visión, estaba entrando a su pequeño rincón secreto.
Wednesday se maldeció, cómo conseguiría ahora un dibujo del monstruo.
Pasaron 10 minutos en lo que la pelinegra ideaba un plan, hasta que por fin se le ocurrió uno.
La chica, salió de su escondite y sacudió su uniforme, después, tocó la puerta de la cabaña y esperó a que el chico le abriera.
-¿Quien...? Oh Wednesday, ¿Qué haces aquí? -La chica de trenzas abrió los ojos sorprendida, ¿la conocía?
-Espera... ¿Sabes quien soy?- El chico soltó una pequeña risa mientras se apoyaba en la puerta.
-Claro, la increíble Wednesday Addams, la que dicen que con solo hablarle pierdes la lengua misteriosamente, se supone que de su anterior instituto fue expulsada por cometer dos asesinatos, es imposible no saber quien eres. -La pelinegra lo miraba boquiabierta, le fue difícil recuperar la compostura.
-Vale, tu me conoces, pero yo a ti no, ¿quién eres?- El chico puso su mano en el pecho y puso cara de sorprendido.
Sin levantar sospecha Wednesday puso sus manos detrás de ella y le hizo señas a Dedos para que pasara dentro y cogiera uno de los dibujos.
-¿No me conoces? ¿A mi? El mismísimo Xavier Thorpe, como no vas a saber quien soy por favor.- Wednesday seguía mirándolo fijamente , nervioso, Xavier siguió hablando.
-En realidad, si soy conocido, mi padre es un vidente muy famoso y todo eso, pero pensaba que me recordarías por otra cosa, aunque entiendo que no lo hagas, hace 4 años, era más bajito, estaba más gordo y tenía mucho acné.
-¿Cómo...?-La pelinegra no pudo terminar la pregunta debido a que el chico la interrumpió.
-Supongo que la pubertad.
-No, quería preguntarte que cómo es que nos conocemos.- Xavier miró al suelo mientras soltaba una pequeña risa avergonzado.
-Pues, tu familia vino al funeral de mi abuela, se ve que tu abuela y la mía eran muy amigas y disfrutaron juntas su juventud estafando ricos. Tu y yo nos aburríamos así que nos pusimos a jugar al escondite, yo tuve la genial idea de esconderme en el ataúd junto a mi abuela, nadie se dio cuenta e iba de camino al crematorio, definitivamente creí que moriría quemado, pero tu, oíste mis gritos y me sacaste, así que me salvaste la vida.- Wednesday recordó esa situación y estuvo a punto de sonreír, solo a punto.
-Es verdad, escuché los golpes dentro de la caja, creía que tu abuela había conseguido burlar a la muerte y estaba pidiendo ayuda.
La pelinegra pudo ver detrás del chico a la mano saliendo por una de las ventanas abiertas con un papel en la mano, su plan había funcionado.
Xavier sonrió mientras le mantenía la mirada a la más baja, hasta que una pregunta le cruzó la mente
-Por cierto, ¿qué haces aquí?-La pelinegra optó por decir una verdad... a medias.
-La directora Weems me dijo que tenía 3 días para elegir una optativa, vi la luz y pensé que aquí habría alguna.
Wednesday no mentía del todo, es verdad que Weems le dijo que era obligatorio escoger una optativa antes de que pasen los 3 días, solo que no había venido por eso, normalmente les daban una guía de donde podían encontrarlas, pero por suerte, Xavier se lo creyó.
