Jungkook, un apuesto ingeniero, soltero, maduro y sobre todo idealista, sueña con su chico ideal, está seguro que el hombre de sus sueños está en alguna parte esperando ansiosos por él hasta que se topa con la personificación de su persona soñada a...
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"Mi adicción por ti comenzó el día en que me sonreíste."
Después de un reconfortante baño de tina y haberse quitado todos los rastros de pintura de lugares que no sabían que era posible que pudiera mancharse, Jimin y Jungkook seguían en bata aún jugueteando, la pereza había tomado el control de sus cuerpos.
Definitivamente estar entre los brazos de alguien a quien amas es algo de otro mundo, el detalle más sencillo y pequeño dado por la persona que tienes en tu corazón se convierte en el tesoro más especial y maravillosa que existe.
Jimin estaba tardando en el baño, se había sentido mareado por el olor de la pintura y falta de ventilación en la habitación, mientras esperaba Jungkook se cuestionaba si debían regresar a casa, de madrugada.
¿Habrá un hotel cerca? No, no había ninguno.
Una notificación de su celular lo sacó de sus pensamientos.
Vio la pantalla, era Taehyung.
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Cuando Taehyung dice Jack, (hace referencia al protagonista de Titanic)
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Jungkook sonrió al terminar de leer el mensaje, hasta que analizó todo el contenido, un momento dijo <pensamos>, ¿en plural?
