Cuando Jisung despertó, se sintió sumamente adolorido en la zona de sus caderas, supuso a que era debido a lo que pasó con aquel alfa la noche anterior. Jisung despertó abrazando una almohada, y al olerla, percibió aquel característico aroma de Minho, y entonces, recordó todo lo que la noche anterior había sucedido, y una amplia sonrisa apareció en su rostro, aunque se forzó a borrarla, ya que fuera lo que fuera que su lobo interior estaba pensando, no era ni mucho menos correcto.
Al revisar la hora y ver que eran más de las 8 de la mañana, rápidamente fue a vestirse y a desayunar, y después, se dirigió hacia el Salón de clases, donde ya estaba el príncipe, acompañado de el rey, su padre.
-Profesor, ¿como se encuentra? -dijo el príncipe, mientras Jisung se dirigía hacia el atril-
-Bien, ¿y vos, Alteza?
-¡Muy bien! Soonie está un poco mejor de su patita, aunque tendrá que aplicarle de nuevo ese ungüento.
-Me alegro que esté mejor. Después de las clases si os parece, le pondré de nuevo el ungüento. -dijo con una pequeña sonrisa-
-Esta bien, muchas gracias por todo. -dijo, regalándole una sonrisa, sonrisa que fue contagiada a Jisung-
-Bueno, será mejor que les deje. -dijo, después se dirigió hacia Jisung- Cuando tengas algo de tiempo, ven a mi Despacho. -dijo Minho, para después marcharse-
Jisung dio comienzo a la clase, Jeongin estaba sumamente atento y tomaba apuntes en su cuaderno. De vez en cuando, Jisung dejaba caer alguna que otra broma para romper el hielo y que el ambiente fuera más confortable para Jeongin. Pero de pronto, Jeongin empezó a encontrarse bastante mal. La parte inferior de su vientre comenzaba a doler y comenzó a sudar frío, y sus feromonas se dispararon.
-Alteza, ¿se encuentra bien?
-N-no, no se que me pasa. -dijo poniendo una de sus manos en su vientre inferior-
-Amm... Tal vez esto sea incómodo, pero... ¿Cuando fue su último celo, Majestad?
-N-no lo se, fue hace mucho.
-Os llevaré a vuestros aposentos y llamaré al médico. ¿Podéis caminar? -dijo Jisung acercándose a Jeongin, este se levantó y comenzó a caminar con algo de dificultad, pero aún así consiguió llegar a sus aposentos y consiguió acostarse en su cama- Iré a avisar al rey y al médico, no os mováis. -Jeongin solo asintió, después, Jisung salió de la habitación para dirigirse hacia el despacho del rey, cuando llegó a la puerta, llamó a esta, y al recibir un "adelante" decidido abrir la puerta y entrar-
-Jisung, ¿ya acabasteis las clases? -dijo levantando la vista de sus documentos para mirar a Jisung-
-No, no exactamente... Es que, creo que el príncipe ha entrado en celo, y decidí que era mejor terminar las clases por hoy.
-¿Que? ¿Entró en celo? ¿Donde está ahora? -Dijo Minho levantándose de su silla y dejando todos los documentos tirados en el escritorio, estaba bastante alterado, o tal vez asustado-
-Está en sus aposentos, yo mismo lo llevé allí. Justo ahora iba a llamar a un médico.
-Si, ve a llamar a Soobin, en sabrá que hacer. Yo iré a comprobar cómo está. -Jisung no tuvo ni siquiera tiempo de contratar, ya que rápidamente, Minho salió de su despacho y fue hacia la habitación de su hijo, mientras que Jisung fue hacia la enfermería, donde Soobin estaba-
-Soobin, necesito que vengas, es urgente.
-¿Que pasa?
-Es el príncipe, entró en celo y me temo que su Majestad no sabe cómo sobrellevar la situación.
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Tutor privado |Minsung| |Omegaverse|
FanfictionSiglo XIX. Lee Minho, rey de Corea, alfa puro. Lee Jeongin, su hijo, Omega, necesita un tutor. Han Jisung, Omega, un plebeyo de alto coeficiente, necesita un trabajo. Un amigo suyo encuentra la oferta de trabajo para ser el tutor privado del joven...