Tutor privado |Minsung| |Omegaverse|

Capítulo 34.

Mientras Jeongin dormía, su mente comenzó a divagar en recuerdos que supuestamente, para Jeongin no existían.

En su mente comenzaron a aparecer distintas escenas junto a Hyunjin, aquel chico con el que se encontraba durmiendo en estos momentos. Entre aquellos recuerdos, aparecieron algunos extraños para él.

Eran ellos dos, totalmente solos en el jardín del Castillo, sentados junto a la fuente. Hyunjin aparentemente le había besado, y Jeongin había salido corriendo. Y fue entonces, junto a la fuente, cuando ambos se confesaron, y después de eso, volvieron a besarse.

Entonces, justo en el momento en el que se besaron, Jeongin se despertó, totalmente agitado ¿Que demonios había sido eso? ¿Habían sido recuerdos? ¿Un simple sueño? Había sido demasiado real para tratarse de un simple sueño. ¿Y si no lo era? No, eso era imposible. Él no conocía a Hyunjin.

Rápidamente, se separó de Hyunjin y se sentó en una silla, aunque continuaba soltando sus feromonas.

Jeongin seguía intentando averiguar si aquello que había soñado, había sido solo un sueño, o eran recuerdos de antes de lo acontecido. Pero sus pensamientos fueron pausados, ya que Hyunjin se despertó. Estaba algo desorientado, por lo que Jeongin rápidamente llamó a Soobin. Este atendió a Hyunjin, y cuando terminó, avisó a Minho para darle la noticia, el cual no tardó demasiado en volver a la enfermería para ver a Hyunjin y a su hijo.

-Gracias. -Le susurró a su hijo. Este no dijo nada y permaneció sentado en la silla en la que antes estaba-

-¿Que me ha pasado? -Preguntó Hyunjin, sentándose en la cama-

-Es una larga historia Hyunjin. Lo importante es que estas despierto. Y estas sano y salvo.

-¿Cuanto tiempo he estado dormido?

-Un par de días. -hubo un pequeño silencio- ¿Como te encuentras?

-Bien... Un poco mareado pero bien.

-Eso es normal. Pronto estarás totalmente recuperado. -Hyunjin solo asintió- Pero debes descansar. No te sobre esfuerces. -Volvió a asentir-

-Padre, ¿puedo hablar con vos?

-Claro hijo. Vamos a mi despacho. -Jeongin asintió, y junto a su padre salió dirección al despacho de su padre-

Minho se sentó en su característico sillón, mientras que Jeongin se sentó en una de las sillas que había frente al sillón de su padre.

-¿Que necesitas hijo?

-Padre... Me gustaría hablar sobre mi futuro... Como rey y como omega.

-¿A que te refieres?

-¿Yo estoy comprometido? -Minho estaba en un aprieto. Claro que Jeongin estaba comprometido. Pero fue el propio Jeongin el que accedió a comprometerse con Hyunjin, porque se amaban-

-Veras hijo... Es complicado de explicar... Si, estas comprometido, pero fuiste tú el mismo que accedió a comprometerse con esa persona.

-¿Quien es?

-Es Hyunjin. -Jeongin se quedó en silencio, procesando la información- Pero si no quieres seguir comprometido con él, podemos romper el compromiso.

-N-no. El compromiso no se romperá. Al final es mi deber... Casarme y tener hijos para dar continuidad a esta familia.

-Jeongin... Eso no es así...

-¿No? ¿Entonces cómo es?

-Casarte no es tu obligación. Te casarás cuando y con quien tu quieras, con la persona a la que realmente ames. -hizo una pausa- Si no quieres tener hijos, no los tengas. Nadie te puede obligar a ello. Es tu vida, y eres tú el que decida como vivirla. -Hubo un gran silencio entre ellos- Si quieres el compromiso puede ser roto.