Tutor privado |Minsung| |Omegaverse|

Capítulo 10.

Tras regresar de su visita a casa de Seungmin, Jisung fue a cenar a la cocina, ya que ya era bastante tarde. El cocinero le hizo algo ligero para cenar, ya que decía no sentirse demasiado bien del estomago, el viaje había sido algo largo y rápido, por lo que había acabado por ser agotador. Por no hablar de que últimamente estaba siendo bastante descuidado con su salud, tal vez debería empezar a cuidarse un poco más y a comer algo mejor.

-Oh, Jisung, el rey te ha estado buscando todo el día, ¿donde habías estado? -le preguntó Mina acercándose a él-

-Estuve visitando a un amigo. ¿Sabéis por qué me ha estado buscando?

-No, nadie de aquí sabe nada. He oido que últimamente ha estado encerrado en sus aposentos o en su despacho sin a penas salir, es preocupante. El rey siempre había sido de salir al jardín a cuidar de los animales que habían o a cuidar las plantas.

-Mañana iré a hablar con él, ahora es bastante tarde.

-Tienes razón.

-Mina, tu alfa a venido a buscarte. -anuncio Changbin entrando por la puerta de la cocina-

-Ya voy. Nos vemos Jisung, Chae vino a buscarme. -dijo con una sonrisa, se quitó el delantal y salió de la cocina. Después, Changbin se acercó a Jisung y se sentó en una silla que había junto a él-

-¿Donde habías estado? El rey está histérico.

-Había estado en casa de Seungmin.

-Deberías haberlo dicho antes. No sabes como se puso el rey al ver que no estabas cuidado de su hijo y que te habías ido. ¡Casi acabamos todos decapitados!

-¡Lo siento! Pero es que necesitaba salir de aquí, y hoy es mi día libre. -hizo una pausa- Además... El príncipe de dijo algo... Y no supe como tomarmelo.

-¿Que te dijo para que saliera corriendo? -Jisung tardó en responder, pero se acercó a Changbin y le susurró lo siguiente-

-Me dijo que quería que yo fuera su padre Omega.

-¿¡Que el príncipe te dijo que!? -dijo Changbin, haciendo que todos se le quedarán mirando-

-Shhh, baja la voz.

-¿Y no le dijiste nada?

-Solo le dije que no era tan fácil que eso pasara. Ya sabes porque.

-Jisung, es más fácil de lo que crees.

-¿Tu también? ¿¡Estais todos en mi contra o que!? -dijo levantándose de la silla para ir dirección al jardín, necesitaba tomar el aire-

Cuando salió al exterior del Palacio, una bofetada de aire frío le golpeó, pero al cabo de unos minutos, se acostumbró a la fría sensación. Su cabeza ahora mismo estaba hecha un desastre. Tanto Changbin como Jeongin creían que ser el Omega del rey iba a ser tan sencillo. ¡Y una mierda! Para empezar, seguramente Minho no tenía intención alguna en comenzar una relación, y mucho menos con un plebeyo como Jisung. Y para terminar, probablemente Minho no estaría ni un mínimo interesado en Jisung, y Jisung tampoco en Minho, o eso se hacían creer ambos.

Estubo caminando por el jardín, hasta que algo calló, o más bien, fue dejado sobre sus hombros, era una capa. Al girarse, pudo ver que pertenecía al rey, pues este estaba detrás suyo.

-Hace frío como para estar tan desabrigado. -rápidamente, Jisung se sonrojó-

-G-gracias... -hizo una pausa- Amm... Me han informado de que ha estado buscandome... ¿Que necesita?

-Entremos dentro, acabarás enfermandote. -Minho echó a andar hacia el interior, y Jisung lo siguió hasta llegar al despacho de Minho, ambos se sentaron en unos sillones que habían frente una chimenea para entrar en calor- Me preocupé al ver que no estabais junto a mi hijo, y que os habiais ido del Palacio sin avisar, o sin llevar a nadie junto a ti. -dijo, mirando al fuego de la chimenea-

-Lo lamento... Fui a ver a un amigo.

-Esta bien... Pero a la próxima, avisa, o por lo menos lleva a Changbin junto a ti.

-Lo haré. -hubo un silencio entre ambos-

-También mi hijo me hizo saber que... Le gustaría que fueras su padre. -ante esto, Jisung se sonrojó- He intentado hacerle entrar en razón, más ha sido imposible.

-También me lo dijo a mí, y también intenté hacerle entrar en razón, pero no me escuchó siquiera.

-Mi hijo es así... Supongo que habrá sido difícil haber crecido conmigo como padre y no haber tenido esa figura materna, por así decirlo.

-¿Que está intentando decirme con esto... Majestad? -dijo, mirando al definido perfil de Minho, pues este continuaba mirando hacia el fuego-

-Solo intento decir que... En un futuro... Me gustaría que mi hijo tuviera esa figura materna, si es que se le pudiera llamar así. Y me gustaría que esa figura, fueras tu. -Jisung lo miró con sorpresa- Se lo que estarás pensando. Estarás pensando que soy un loco. -dijo soltando una pequeña risa- Pero desde lo que pasó aquella noche... Desde que nos besamos... No he podido evitar pensar en ello cada día. -Jisung aún no salía de su asombro, pero a decir verdad, el tampoco había podido dejar de pensar en ello-

-Es normal que queráis a un Omega a vuestro lado... Pero no se si yo estaré a la altura de tal título.

-¿Por que lo dudas? -dijo, mirándole por primera vez, haciendo que Jisung se pusiera algo, bastante, nervioso-

-P-porque yo soy un plebeyo, y un plebeyo no debe juntarse de esa manera con la nobleza, y mucho menos junto al rey, podríamos decir que es prácticamente ilegal.

-Yo soy el rey, yo puedo decidir si algo es legal o no lo es.

-Pero seguro que hay omegas mucho mejor que yo. ¿Que tal si tu Omega predestinado esté esperándote y vos estéis conmigo?

-Estoy casi seguro de que jamás conocere a mi Omega predestinado. Y si estoy destinado a conocerlo, es porque tal vez ya lo conocí, y tal vez, lo tenga frente a mis ojos. -Jisung permaneció inmóvil es su sitio, no sabía cómo tomarse está situación. Y es que tal vez Minho tenía razón, tal vez ellos fueran predestinados. Tal vez por eso, cada vez que estaban juntos, sus lobos saltaban de felicidad y suplicaban estar más cerca el uno del otro-

-Entonces... ¿Que deberíamos hacer si eso fuera verdad?

-Empezariamos por conocernos mejor, pasar más tiempo juntos... Y del resto, el tiempo será el encargado.

-Esta bien, hagamos eso. -esto hizo que ambos sonrieran, y cada vez, la distancia entre ambos se fuera acortando, hasta acabar unidos en un delicado beso-

Ese beso hizo que un escalofrío recorriera el cuerpo de ambos. También provocó que los lobos de ambos se volvieran un completo caos, e hicieran que el corazón de ambos se acelerara. Al cabo de unos segundos se separaron, pero no tardaron mucho en volver a besarse, esta vez por iniciativa de Jisung, el cual rodeó el cuello de Minho con ambos brazos, buscando apegarse más al cuerpo contrario.

Tanto Jisung como Minho acaban de descubrir una nueva adicción, de la que sería imposible deshacerse.

༶•┈┈⛧┈♛ Fin del capítulo♛┈⛧┈┈•༶

Hola! Aquí les traigo el capítulo que les prometí. Gracias a todos los cielos, mi muñeca parece estar mejor, aunque no voy a hablar demasiado alto, porque en cualquier momento podría regresar esa sensación.

Espero que les haya gustado.

Nos vemos en el próximo capítulo.

Gracias por leer 🤍🌹

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15-01-2023
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