Capítulo 39.

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Al día siguiente, Minho se encontraba en la sala del trono, sentado en él, mientras que esperaba a que sus guardias trajeran ante él a aquel beta. Minnie llevaba unas cuantas horas despierta, pero aún no pudo ir a hablar con ella, ya que estuvo ocupado todo el día en la búsqueda de pruebas y posibles sospechosos.

De pronto, las puertas de la sala fueron abiertas, dejando ver a dos guardias y, en medio, a aquel beta, el cual había sido claramente forzado a ir a aquel sitio, ya que había tenido que recurrir incluso a la violencia. Fue arrastrado prácticamente hasta donde se encontraba Minho, y fue obligado a ponerse de rodillas frente a él.

-Jeon Jungkook... Al fin te hemos encontrado. -Jungkook ni siquiera se molestó en mirarle- No ha sido fácil, claro está, pero al fin te tengo aquí, arrodillado frente a mí. -El beta permaneció en silencio- ¿Sabes? Ayer, misteriosamente, Minnie, tu esposa, apareció en las puertas de mi palacio, claramente maltratada. ¿Tienes algo que ver en esto?

-Yo no tengo nada que ver con eso. -Dijo, sin mirarle y con su característica arrogancia-

-Vamos, dime la verdad, aquí nadie te van a juzgar.

-¡Ya he dicho la verdad! -Exclamó, esta vez levantando la vista hacia Minho-

-¿¡Entonces quién ha sido!?

-¡No lo se! Yo ni siquiera estaba con ella cuando eso pasó. Yo estaba en Busan, y ella en Seúl. -Minho suspiró-

-Algún culpable tiene que haber para todo esto, y mientras no le encontremos, tú, permanecerás en las mazmorras de este palacio hasta nueva orden. ¡Llevaoslo! -Después de que Minho dijera eso, los guardias se llevaron de nuevo a Jungkook y lo encerraron en las mazmorras-

Entonces, Minho decidio ir a visitar a Minnie, tal vez ella supiera algo, aunque no era muy probable, era una de las últimas opciones que tenía.

Llamó a la puerta de la habitación donde Minnie estaba, y tras recibir una respuesta positiva, entró, encontrando a Minnie sentada en el escritorio que tenía en la habitación, justo enfrente de la ventana.

-Minnie, se supone que deberías guardar reposo.

-Solamente estoy escribiéndole una carta a mi madre, debe estar preocupada supongo. -Minho se acercó al escritorio y se quedó de pie a un lado-

-Minnie... Tengo que preguntarte algo.

-¿De que se trata? -Dijo levantando la vista de aquella carta para mirarle-

-¿Sabes quien pudo hacerte eso?

-Yo... La verdad es que no. Solamente puedo recordar a dos hombres. No eran de aquí, hablaban otro idioma, tal vez... Chino. Y después de eso... Todo se volvió negro.

-¿Por qué vendrían a buscarte desde china hasta aquí para hacerte eso?

-Bueno... Tal vez sea porque... Recientemente estuve junto a la princesa de China.

-¿Estar en que sentido?

-En el sentido... Romántico. Ya sabes...

-¿Estás enamorada de la princesa de China? ¿Yuqi?

-Tal vez...

-Pero Minnie, estas casada.

-Pero no enamorada. Jamás podré estar enamorada de alguien como Jungkook. Es vulgar, derrochador, adora ir a burdeles... ¿Cómo podría estar enamorada de alguien tan... Repugnante?

-Te entiendo... Pero no hay ninguna manera de que os separeís. O bueno, no moralmente adecuada.

-Ya lo se... Solo hay dos maneras, y las dos no son posibles.

Tutor privado |Minsung| |Omegaverse|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora