1950 Thorki AU Omegaverse

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Loki rio escéptico de lo dicho por su compañera, pero al ver la mirada seria y determinada de la otra pelinegra no quedó más que mirarla.

- Debes estar bromeando, no puedo hacer eso, no es correcto.

- Por favor Loki, sé que no es correcto, pero es mejor a que mi hermano se entere de la verdad y haga una estupidez.

- ¿Y por qué no lo haces tu? Conoces mejor a tu hermano que yo.

- No es así de fácil, a diferencia tuya yo no he tenido comunicación con él desde que se casó, nunca estuve de acuerdo con que se casara con ella y bueno...

- Yo ni siquiera lo he visto en mi vida.

- Lo cuál es bueno, realmente no me veo escribiendo cursilerías a mi propio hermano, iugh, asco ¿Has leído lo que le escribía a esa mujer?

- Eh... No...

- Por favor Loki, te juro que voy a pagarte...

- Olvídate de eso, siempre y cuando me den un día extra de descanso.

- ¿Te parece los fines de semana?

- tenemos un trato.

- Hablaré con los doctores y me pondré a insistir en tus fines de semana libres.

Ambos estrecharon las manos por fin convencidos, el tener el fin de semana le daría el tiempo suficiente para obligar a su alfa ir a las terapias y posiblemente pudieran arreglar un poco su relación, si era sincero jamás, mientras salía con Fandral éste nunca había sido tan agresivo o realmente grosero con él, alegaba a la guerra lo que había endurecido su carácter, o el poder de la sociedad que comenzaba a influir en él, al grado de pensar que debía ser un omega que se dedica a su hogar, lo cual no entendía, pues varios de sus compañeros tenían su misma condición y no habían abandonado su puesto, o incluso algunos tenían buenos puestos dentro del ejército, era algo que quería hablar con Fandral, pues incluso cuando comenzaron a vivir juntos se acordó que ambos trabajarían debido a que el dinero en su unión era escaso, tanto que ni siquiera habían podido pagar una ceremonia en forma, el dinero que les pagaban en el ejército iba directamente a los víveres, ropa y estudios de Loki, quien siempre había deseado ser un enfermero y ayudar a varias personas, y justo en ese momento lo estaba haciendo, aunque jamás imaginaba el panorama tan desalentador que se presentaría para ejercer su profesión.

Dejando todo el sufrimiento de lado y tras habiendo dejado a Fandral dormido en el sofá se dispuso a ir a la mesa del comedor, fielmente convencido en que haría su parte del trato, pero realmente no sabía cómo iniciar una carta para alguien que no había sido su alfa en el campo de batalla, tal vez una buena idea era iniciar con una disculpa.

"Querido Thor..."

Si, eso sonaba bien...

"Lamento no haber escrito en este tiempo, he estado pensando en una manera de decirte lo angustiante que es saber que te encuentras lejos, que ni siquiera nos dieron el tiempo necesario para despedirnos, que en realidad ni todo el tiempo del mundo alcanzaría para hacerlo..."

Demasiado cursi, pero estaba escrito, según Hela esa era la manera en la que ambos solían escribir al otro.

"... Este tiempo que no hemos estado juntos he estado esperando por ti, prometo seguir rezando por ti en las noches, porque te encuentres bien y puedas regresar sano y salvo a casa, las palabras en esta carta no alcanzan para decirte lo mucho que odio esta distancia y las ganas que tengo de no volver a soltarte una vez que regreses. Suena muy cursi y lo siento, pero cada vez la espera se hace mucho más dura..."

Personalmente eso sonaba terrible en su cabeza, era lo que una vez había escrito para Fandral cuando se encontraba en batalla y le hacía sentir un poco culpable por brindar esa clase de esperanzas a una persona que lo que merecía era una persona honesta que hubiese tenido la delicadeza y la empatía para poder esperar a irse cuando él volviera. Sacudió su cabeza esperando disipar ese pensamiento, ese no era su problema, debía terminar esa carta para entregársela a Hela a primera hora en el trabajo.

"... Por favor Thor, cuídate, que aún tenemos mucho por vivir y disfrutar, podrás ser el héroe de tu país y el de muchos otros, pero para mí eres quien da sentido a mi existencia, es egoísta, pero siento que eres más importante solo tu qué un ejército completo.

Estaré esperando

Siempre tuya

Jane"

Terminó la carta con un sentimiento de por fin haber terminado la tarea asignada para el día siguiente, le colocó un poco de perfume incluso y la metió en un sobre, colocó los datos dados por Hela y miró la carta, de verdad que debía estar loco como para estar haciendo eso, pero si de alguna manera incluso podía ayudar lo haría, solo esperaba que funcionara, Hela estaba convencía de que así fuera, pero sería un verdadero milagro que el hombre se tragara ese cuento, suponiendo que podría iniciar con la diferencia de letras, o que posiblemente no se hubiesen tratado de manera tan cariñosa mediante cartas, había tantas formas de que pudiera darse cuenta pero que no le daría importancia, después de todo no se enteraría de que él era el autor anónimo de dichas cartas, solo en caso de que se diera cuenta recurriría a su plan B, que era decir la verdad y ser el portavoz de las malas noticias, por más que le hubiese prometido a Hela no hacerlo, pero con el simple hecho de escribir dichas cartas se iba a volver un muy buen mentiroso.

Pasaron los días y Thor tras haber entregado su última esperanza en la última carta de verdad se sorprendió al por fin tener noticias de su amada, sonrió, lo hizo como no lo había hecho el último mes, sintió su alma regresar a su cuerpo y en un momento de quietud comenzó a escribir en cuanto tuvo papel y lápiz a su alcance, envió la carta y no dejó de pensar en que esa mujer era maravillosa, en que le esperaba con demasiado amor, que podría regresar y ser una familia como siempre debió ser, sin contar el tiempo en esa espantosa guerra, tuvo que dejar la carta con el mensajero debido a que debían marcharse a la siguiente ubicación, con energías renovadas pudo andar toda la noche sin contratiempos ni excusas, el saberse amado y esperado en casa le daba esa enorme esperanza de que volvería...

Continuará...