|Diecinueve|: Fotografías

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Capítulo Diecinueve: |Fotografías|

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Capítulo Diecinueve: |Fotografías|

No reconozco el camino que está transitando el vehículo en el que voy metida. No tengo muy claro que lo que ocurrió en los últimos diez minutos y por una u otra razón tampoco quiero ser consciente de lo que es mi vida en este presente tan difuso. Lo único que si logro sentir es la mano de mamá sujetándome la mía con una fuerza suficiente para hacerme saber que va a acompañarme en todo momento, incluso cuando estoy siendo llevada a una comisaría policial.

Los policías no fueron muy detallistas al momento de darme información sobre porque debía acompañarlos, sólo se limitaron a informarme que todo esto tiene que ver con Hades, Kevin y Amber, de ahí no agregaron gran explicación. Puedo deducir que ellos, al igual que yo, han continuado recibiendo recados y por eso han puesto una denuncia. Eso es lo mejor que puedo concluir con el poco raciocinio que me queda.

En la radio que lleva encendida uno de los uniformados se oye la voz de una mujer que explica a sus oyentes la importancia de la educación sexual en jóvenes, a penas ese tema se escucha en la instancia el hombre alarga su mano y cambia de estación, siendo remplazada por una música clásica, Ludwig van Beethoven, Joseph Haydn o el jodido Chaikovski, no lo sé. Sin embargo, mi cabeza queda en la pregunta que ha hecho la mujer de la anterior emisora: ¿Los jóvenes se sienten seguros al momento de tener un encuentro sexual?

Mis recuerdos entonces se sitúan en la primera vez que Hades y yo lo hicimos, en como los nervios me estaban carcomiendo y la vergüenza me azotaba como lo hace el oleaje en la orilla del mar, pero en cuento estuve en los brazos del chico de hoyuelos en los cachetes todo eso se esfumo y la seguridad de su presencia me acobijó como lo hace una manta en una fría noche. Me sentí tan segura que no dude ni un instante en entregarme a él en cuerpo, corazón y alma. Con todo esto en mi cabeza una nueva duda surge desde lo más profundo de mis entrañas:

«¿Y si no vuelvo a sentirme así de segura en los brazos de nadie más?»

La patrulla se detiene en un semáforo en rojo y es aquí cuando logro despabilarme al pestañar dos veces y girar mi cabeza a un lado para así mirar el rostro de la mujer que me acompaña. Mi madre se mira preocupada, lo noto encada línea de su cara.

—Todo está bien. —Me sale decir a la vez que le tomo la mano con más fuerza.

No quiero que ella piense que está haciendo las cosas mal como madre cuando en realidad ha sido la mejor de todas.

En respuesta los extremos de su boca pliegan una leve sonrisa y asiente.

Los minutos pasan y con ellos el final del vieje que estamos haciendo. El vehículo se detiene y los hombres bajan de él para abrirnos las puestas. Mamá sale por la derecha y yo por la izquierda. Una vez afuera caminamos al frente, siguiendo en todo momento a los hombres que nos dan indicaciones de loque debemos hacer al estar dentro de la estación policial.

Maravillosa Destrucción| Completa ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora