La hija de Pitch Black (Jack Frost) ×EN CORRECIÓN×

16. No es lo que crees.

¿Recuerdan que he dicho que tal vez tengo miedo? Bueno, reemplacemos el tal vez por un absolutamente. Sí, no soy una gran fan de la nieve desde que las historias de mi padre se infiltraron en mi cabeza.

-Bueno, me encantaría jugar contigo pero tengo asuntos importantes que atender, Jack. -Me excusé.

Comencé a caminar en el dirección contraria. El deseo de observar sobre mi hombro era muy grande pero me maneje para resistirlo. No debía hacerlo. Podrá ser un gran chico y un ¿amigo? No usaría esa palabra... Tal vez ¿un conocido? No lo sé. El punto es que es un Guardián y el enemigo de mi padre, que por cierto planea seguir con su venganza.

No es posible que esto acabe bien, no puedo continuar encariñandome con él. No lo soportaría.

-Eres buena poniendo excusas. -Dijo alguien sobre mí.

Abrí los ojos impactada, ¿acaso leyó mi mente? Oh, eso no es posible ¿verdad? Llevé mi vista a la copa de los árboles, roja como un tomate. Allí estaba Frost, flotando con su mirads burlona fija en mí.

-¿Necesitas enfriarte? -Preguntó conteniendo una risa.

-¿Enfriarme?

Con un movimiento de su cayado lanzó nieve sobre mí, casi sepultándome con ella. Pude oír su risa pero no verlo. Unas manos corrieron la fría nieve que tapaba mi rostro. Me encontré con una mirada juguetona al abrir los ojos.

-Y ahora tú eres un hombre de nieve. -Se burló. -¿Sabes lo más gracioso? Funcionó. Ahora debes quedarte conmigo y jugar.

Comenzó a caminar alrededor de mi prisión de nieve, con el cayado sostenido detrás de su espalda con ambas manos. Abrí mi boca sorprendida por lo que acababa de pasar ¿Y este era el chico tímido que conocí?

-Eres un manipulador.

-Soy el espíritu de la diversión, ahora... ¡Ríe! -Quitó la nieve de mi cuerpo con, supongo, su cayado.

Apenas hizo esto, me eché a correr hacia el lago congelado ya tan conocido. Él me siguió con brazos u manos extendidos. Conocía bien sus malévolas intenciones.

-¡Cosquillas no, Frost! -Grité mientras corría.

De alguna forma, acabé en la orilla del lago sin escapatoria. Dí un paso hacia atrás, pero no confiaba mucho en el hielo congelado. Podría caer si no era seguro. Eché una mirada hacia atrás. El lago congelado, los árboles y las pocas flores que crecían por allí. Volví mi vista al frente y me encontré con Frost y su sonrisa burlona.

-No te atrevas. -Gruñí.

Se acercó un paso más y comencé a correr sobre el lago. A cada paso que daba se formaba un humo violeta sobre el hielo, permitiendome correr.

-¡Te atrapé! -Gritó alguien detrás de mí.

A continuación caí al suelo boca arriba, de alguna forma. Frost comenzo a hacerme cosquillas.

-B-b-basta. -Dije entre risas.

Él se detuvo y se acostó a mi lado, riendo. Nos miramos a los ojos por unos segundos. Sus ojos son hermosos, ¿cómo no lo noté antes?

Parece que los días en que le tenía miedo a muerte fueron años atrás, cuando la realidad es que sólo han pasado unos días.Parece imposible de creer, pero un día es largo y muchas cosas pueden pasar.

-¿Interrumpo algo?

-No, ¿tú que crees? -Contestó Jack de forma sarcástica.

-No es lo que crees. -Expliqué suspirando.

¡¿No puedo estar tranquila nunca?!
Su pose era firme y amenazante. Justo cuando creía que Shadow iba a tomar su papel como hermano mayor sobreprotector... Se echó a reír.

-Siempre quise decir eso. -Dijo al calmarse. -Aguarda... ¿Ese es Frost? -Preguntó con asco.

-Gracias, también es agradable conocerte. -Volvió a comentar.

-Calladito te ves más bonito. -Lo miré y luego regresé mi vista a mi hermano. -Oye, hermanito de mi corazón, no molestes.

Capítulo corto, MUY corto. Pero quería publicar algo así que... xD

¿Que les pareció este momento entre ellos?

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¿LES GUSTARÍA QUE HAGA UN FANFIC DE OTRO PERSONAJE O PERSONA?

Adióh criaturitas del frío