27.RECONCILIACION

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Genesis- ¿Un favor?- Pregunto aun caminando, sabia que Dyo había escapado de Alagadda por un intento de asesinato fallido y por que el embajador sabia que el descubrió que controlaba al rey. Quizás había recibido ayuda?.

Señor Amarillo- Eso no es importante ahora. Llévame con los que llamas Fundación SCP- Pensaba aprovechar la oportunidad y presentarse como un representante de Alagadda, quizás asta establecer relaciones diplomáticas.

Caminaban y conversaban siendo seguidos por un sirviente del señor blanco, maldito acosador, estaba hay para asegurarse que Genesis leyera la carta entregada y para enterarse e informarle todo lo que pasaba hay.

La fundación no tardo mucho en enterarse lo que Genesis había echo, varios carros para transportar a los dos individuos, fue un poco difícil, el señor amarillo era muy grande, mas que un humano normal, por lo que ocupo mucho espacio en el carro. Al llegar fueron recibidos por muchos doctores, mas bien Amarillo fue recibido por muchos doctores. Genesis solo se dedico a sacarle conversación a Amarillo aunque el solo la viera como una herramienta para quien sabe que, después de todo los corazones de los señores enmascarados están muertos, ellos no sienten nada.

El punto es que le hicieron una entrevista, le preguntaron del reino bla bla bla, a, y se reencontró con Dyo. No pasa nada malo al menos, por lo que fue a su celda y leyó la carta dada por el sirviente del señor Blanco, decía que Genesis había sido invitada a un baile que se realizaría en el palacio donde se albergaba el señor Blanco, hay se tenia que encontrar con el mismo para platicar sobre un tema en especifico. No iban a estar presentes ningún otro duque.

Genesis- Bueno, quien tenga miedo de morir que no nazca- Obviamente decidió ir, sin decirle a nadie, de nuevo.- !Ah!, mierda si es cierto- Estaba frente a la puerta de Alagadda cuando se acordó del detective Void, ¿Cuánto tiempo llevaba sin hablarle?, se había olvidado de el por completo- Que estúpida, bueno, cuando vuelva le hablo al toque.

Ingreso de nuevo a Alagadda sin avisarle a nadie, su vestido ahora era de color rojo profundo con detalles blancos y amarillos.

Genesis- Que extraño....Bueno, ¿ahora donde esta ese lugar?- Comenzó su búsqueda preguntando a a cualquiera que se le atravesara en el camino, la mayoría no fue de mucha ayuda pero al final se aceraba mas y mas al palacio blanco- Por fin, ya me canse, quiero sentarme.

Estaba enfrente de las puertas del gran palacio, varios nobles y gente de la realeza estaba o había ingresado ya. Ella no destacaba mucho, pero aun así algunos se le quedaban viendo mientras caminaba.

Genesis- Dime que no saben quien soy...- Claro que lo saben, Genesis se había ganado el titulo de la estafadora, o algo así, ya saben por haber engañado a Rojo. Entro y se detuvo en una escalera para admirar todo. Mucha gente reunida en una gran sala, candelabros gigantes colgando del techo que brillaba como si de mil estrellas se tratara.

La música se detuvo por un instante y empezó una nueva melodía suave, los mutantes se apartaron del centro formando un circulo esperando a que Genesis bajara.

Genesis- Ya se me quitaron las ganas- Quería irse, no ke gustaba que mucha gente la mirara, se sentía incomoda, pero lo vio, el señor Blanco estaba justo hay. Destacaba mucho por su gran tamaño, un poco mas grande que Amarillo- Creo que me enamore.

Algo le decía que la música que sonaba era en realidad una pista de baile ¿bailaría con el señor Blanco?, claro que si. Bajo lentamente las escaleras procurando no caerse. Cruzo el salón hacia el señor Blanco, este no dijo nada, solo tomo la mano de la niña invitándola a bailar. Ella acepto.

Empezaron a bailar suavemente, por fortuna para ella no eran pasos difíciles y solo le seguía la corriente al mas grande. Se veía glorioso con cada movimiento, como si hubiera echo eso miles de veces. La música termino, la gente aplaudió y siguió festejando.

Señor Blanco- Vayamos a hablar a un lugar mas privado- Sonó su monótona voz- Sígame, por favor.

Caminaron tomados del brazo hacia un balcón desolado, no había nadie hay, y no se escuchaba ruido.

Genesis- Es un honor conocerlo, dígame, ¿de que quiere hablar?- Quería parecer educada, aunque no era así y conocía perfectamente sus intenciones.

Blanco- Quiero ser directo, se que a estado buscando la lealtad de cada uno de los duques de este reino, y lo consiguió- Genesis asintió, dejando que siga- Tiene una conexión con el rey, pero quiero que sepa que eso no me intimida, y si quiere mi completa lealtad tendrá que cumplir con lo que le pido.

Genesis- Entonces, ¿me vas a pedir algo y ya?- Blanco asintió- Bueno eso es fácil, que desea?.

Blanco- Quiero que se disculpe con Rojo- No esperaba eso, abrió los ojos en señal de sorpresa. Blanco al notarlo le explico mas detalladamente- Tengo entendido que tu engañaste a Rojo para que firmara algo que no debía.

Genesis- Básicamente no lo engañe por que el estaba despierto, pero siga.

Blanco- El caso es que, obviamente, esto no le gusto para nada y estado ya mucho tiempo de mal humor. Por eso quiero que te disculpes con el personalmente y ese mal humor se le valla.

Genesis- ¿Si sabe que podría matarme no?- Blanco la miro indiferente, ese era su problema- Ni siquiera se donde vive, pero si me puede llevar seria genial.

Blanco acepto llevarla en ese mismo momento, pero Genesis quería darle un regalo, así que le dijo que la esperara hay y se fue corriendo. Al poco tiempo regreso con un pequeño animal en manos.

Blanco- ¿Qué tipo de animal es ese?- Ya se estaban dirigiendo al palacio rojo, en carruaje.

Genesis- Un mini pig, ¿no es adorable?. Se que le encantara- Es verdad que ese mini pig era adorable, pero quien sabe si a Rojo le gustaría, eso lo descubriría n unos pocos minutos. Por que ya habían llegado al palacio rojo.

Blanco- Puedes entrar, con...-Miro el regalo- Tu mascota.

Genesis- ¿No me vas a llevar?- No era su responsabilidad, mando a Genesis adentro y ella solo pudo caminar hasta encontrar una gran puerta , muy bien decorada, con muchos guardias alrededor.- Ahh.., hola?, tengo un regalo para el Señor Rojo.

Los guardias se apartaron y la puerta se abrió de golpe, lo que la asusto un poco. Pero entro. El lugar parecía un enorme cuarto, incluso había bañera y la cama que vio era enorme y muy lujosa.

Genesis- Holaaa, Rojo?. Se que no terminamos en buenos términos la ultima vez pero, podemos arreglarlo no?- Gritaba en toda la habitación- Te traje un regalito *suspiro*, tu novi-digo tu ¿amigo?, me trajo a disculparme. Acéptame pliz.

Rojo- ¿Cómo te atreves a venir aquí?, mortal- Se materializo frente a ella, aunque tenia una sonrisa se veía molesto por su ceño fruncido- Por lo menos te dignas a disculparte.

Genesis- Ammmm, te traje un regalito- Le mostro el mini pig, Rojo parecía confundido, pero tomo el al cerdito en sus manos y después de mirarlo un rato lo abrazo.

Rojo- !Pero que criatura mas adorable!, ¿de donde saliste pequeñín?- Se volteo a darle mimos al animalito, quien feliz los recibió. El regalo le había encantado, solo faltaba reconciliarse. ¿Qué podría salir mal?.

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Se podría decir que los duques son hermanos, básicamente fueron creados por el mismo ser.

Mayor: Blanco. El mas alto, responsable y sabio de los cuatro.

Del medio: Amarillo y Rojo. Ambos tienen la misma estatura, mas grandes que Dyo pero mas bajos que Blanco, vanidosos, hipócritas y un poco narcisistas. Apenas se toman su deber de duque en serio.

Menor: Negro/Dyo. El mas bajo, "rebelde", odia al embajador y considera al rey ahorcado una figura paterna. Le cae muy bien Rojo.

MI REALIDAD DESEADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora