🌸
Una rara rutina que empezó a tener desde una edad temprana era la de observar por su gran ventana a las personas "normales" vivir su día a día, tal vez por el hecho de que se imaginaba a él teniendo ese tipo de vida, y, estaba seguro de que algún día aquello pasaría, y cuando eso sucediese experimentaría la mayor felicidad en su vida.
A pesar de todo lo que le ha pasado a sus veinticuatro años el no perdía la esperanza de algún día encontrar a su destino, si, tal vez ha tenido días difíciles tanto emocional como físicamente por su maldición pero aun así se prometió a sí mismo ser positivo ante todo lo que sucediera.
Este día era diferente a los demás. No estaba siguiendo su rutina como siempre lo hacía, en vez de eso estaba acostado en la alformbra de su cuarto con la cabeza reposada sobre el regazo de su hermano mayor Jongho mientras este le leía uno de sus libros favoritos.
Seonghwa amaba estos momentos de tranquilidad que pasaba junto a su familia sin que nada de mala suerte le estuviese sucediendo. Sin embargo, sabía que esa tranquilidad abandonaría su cuerpo cuando les dijera la noticia a sus padres y hermanos.
Desde hace mucho tiempo, después de que sus mayores se hayan graduado de la universidad, la idea de mudarse cruzó por su mente. Quería experimentar lo que era vivir como los "normales" y, al mismo tiempo, tratar de encontrar a su salvación.
Sonaba muy arriesgado, lo sabía muy bien, pero si no tomaba ese riesgo por miedo - como siempre le ha sucedido - jamás podría cumplir sus sueños y deshacerse de la maldición Park.
— Te ves muy distraído ¿En qué tanto estás pensando Hwa?
Le dio una cálida sonrisa y negó con su cabeza — No es nada.
Antes de que el castaño pudiera decir otra palabra un ruidoso pelimorado entró a la habitación interrumpiendo el cómodo silencio.
Wooyoung - su vecino, mejor amigo desde pequeños y novio de San desde que eran jóvenes - entró con unas bolsas en las manos siendo seguido por un sonriente San.
— ¡Les trajimos sus postres favoritos! — habló emocionado el menor dejando las bolsas cuidadosamente en la alfombra.
Los ojitos de Seonghwa se iluminaron al ver esos aperitivos inmediatamente se enderezó sentándose sobre sus talones para recibir una cajita con sus galletas favoritas — ¡Gracias, Woo!
— ¿Para mi no hay un gracias? — reprochó San, sentándose al lado de Jongho pasándole una malteada a este — Yo fui quien dio la idea de traérselos.
Rio por el comentario de su hermano y agregó — Muchas gracias también a ti, Sannie.
El mencionado sonrió con satisfacción.
— ¡Hwa hyung! ¡Tienes que ver esto! — Wooyoung sacó de entre las bolsas una revista — ¡Es sobre la marca de moda que más me gusta! Mira, mira. — la abrió dejándola sobre la alformbra para que todas la vieran.
Su boca formó una pequeño "o" — ¿Es de aquella marca que me compraste mi sudadera favorita? — el menor asintió efusivamente.
Park al intentar ver más cerca la persona de la portada terminó tirando la malteada de Jongho encima de la revista y en la alfombra. — Ay, no no. Woo perdona, perdóname. No era- no era mi intención.
Se levantó exaltado tirando su caja de galletas en aquel desastre. Jongho lo sostuvo evitando que se cayera — Hwa, Hwa tranquilo, está todo bien. Relájate.
Wooyoung sacudió su cabeza muy confundido procesando todo lo que ocurrió en pocos segundos.
— Pero... la revista de Woo, la comida-
— Está bien, Hwa, no hay problema — intervino San — por si acaso trajimos más — señaló una de las bolsas que estaba a su costado.
Seonghwa miro triste al pelimorado — Perdón, Woo, por esto — tomo el pedazo de papel entre sus manos viendo el desastre que había causado.
— No te disculpes, hyung. Fue un accidente — sonrió para tranquilizarlo —, además siempre puedo comprar más de esas revistas y admirar a Hongjoong sunbaenim.
— ¿A quién? — pregunto confundido.
San soltó una pequeña carcajada por las ocurrencias de su novio — Kim Hongjoong fue un estudiante de la misma universidad en la que va Woo y ahora es el CEO de su marca favorita.
— Wow — soltó sorprendido. Por otra parte, Jongho agradeció mentalmente a su hermano y cuñado por haber hecho relajar a Seonghwa de lo sucedido.
— ¡Niños, bajen a comer!
— ¡Mamá! — reprochó San ante aquel apodo que su madre seguía utilizando en ellos a pesar de su edad.
— ¡Ya vamos, má! — respondió el menor de los hermanos.
— Adelántense, nosotros recogeremos esto.
Aunque los dos menores intentaron ayudar ambos Choi se los negaron y sin otra alternativa acataron lo que sus hyung les dijeron.
════ ∘◦❁◦∘ ════
"Es hora" pensó Park una vez que había terminado su postre. Suspiro nervioso y miró a su familia.
— Tengo algo que decir...
De repente cinco pares de ojos lo miraron fijamente con confusión haciéndolo sentir más nervioso.
Tartamudeando les explico lo que tenia en su mente desde hace un tiempo aunque nadie decía nada en lo que Seonghwa hablaba sus miradas eran de preocupación mezclada con temor.
— ¿Qué opinan?
Hyebin y Juwon se miraron a los ojos con intranquilidad. Hyebin fue quien rompió el silencio — Si crees que es lo correcto, te apoyamos mi amor.
Los demás asintieron de acuerdo con aquello.
Sintió sus ojos llenarse de lagrimas — Gracias, muchas gracias — sonrió feliz. Se levantó de su silla haciendo una reverencia de 90 grados con efusión haciendo que de inmediato se golpee la cabeza con la mesa.
— ¡Hwa!
— Estoy bien — sonrió apenado llevando su mano a su cabeza para sobarse.
Seonghwa finalmente a sus 24 años decidió que debería dejar su miedo atrás y estaba decidido a salir al exterior para encontrar a su destino; esperando que nada malo pueda suceder.
🌸
ESTÁS LEYENDO
•Malédiction• Seongjoong/Honghwa
FanfictionNadie sabe el por qué ni el cómo es que en la familia Park exista una maldición en cada uno de los miembros de la familia, la cual hará que el poseedor tenga una inimaginable mala suerte. Sin embargo, y por fortuna, está maldición tiene una cura, u...