~One shots - Videojuegos

Joel Miller 🔞

*Conociste al mayor de los Miller por medio de su hermano.

*Solían hacer patrullas juntos, y a pesar de que en un inicio no congeniaron muy bien, con el pasar del tiempo se hicieron buenos amigos

—Te lo digo en serio, estoy haciendo un licor casero delicioso. Serás el primero en probarlo si admites que tengo mejor puntería.—

—No admitiré nada, y de todas formas lo probaré primero porque soy el único amigo que tienes.—

—Que malo...—

*Cierta noche, mientras todos cenaban en el gran salón, Joel y tú se escabulleron a tu casa, donde finalmente probaron el licor.

*A pesar de que en un inicio creían que la bebida no era tan fuerte, rápidamente comenzaron a sentir calor.

—¿Excitarme? Hace mucho que no pienso en esas cosas...—el hombre miró su pantalón antes de darle un sorbo a su vaso—. Ya ni debe funcionar.—

—... Déjame ver eso.—

A pesar de estar muy alcoholizado, Joel sintió perfectamente cómo la mujer se sentó sobre sus piernas.

—Ya, bájate... No es gracioso...—cerró los ojos con fuerza al sentir como deslizaba su mano a través de la cremallera.

—¿Quién dijo que sería gracioso? Le puse al licor unas hierbas que supuestamente son afrodisíacas... quiero ver si funciona.—acarició el bulto a través de la tela—. Levanta tumbas... Asi se lo llamaba el negociante que me las cambió por unas balas.—

Joel echó la cabeza hacia atrás, dejándose tocar.

Se sentía muy bien.

Por su parte, ____ dejó de sentirse adormilada, como si el licor se hubiera evaporado.

Le atraía Joel, y esa rara situación que se le acababa de presentar no la desaprovecharía.

Sabía de sobra que Joel ya pisaba fuera de los 50, y que debido al estilo de vida estresante que llevaban era muy probable que no pasara nada más.
Pero entonces lo sintió.

—Mira nada más...—sonrió al sentir que su miembro se endurecía—. Pues parece que funciona. El licor funciona.—

—No, cariño... No es por el licor.—Joel respiraba con dificultad, aún con la cabeza atrás—. Carajo... Se siente muy bien.—

____ no pudo evitar emocionarse con aquello, apresurando sus caricias sobre el miembro que ya estaba más que rigido en su ropa interior. Finalmente lo sacó... Y no pudo resistirse.

—... ¿Qué haces?—

Joel miró confundido como la mujer se levantaba y desabrochaba su vestido, dejándolo caer al suelo. No traía nada debajo.

—No vamos a desperdiciar un... Suceso tan especial ¿No?—volvió a acomodarse sobre él.

Antes de poder caer en cuenta de lo que estaba pasando, ____ se acomodó sobre el miembro y se sentó de prepo, dejándolo abrirse paso en su interior. Una corriente eléctrica le recorrió todo el cuerpo con aquello. Se sentía increíble.

—____, esto no esta bien... somos amigos.—Joel la miró, un poco más consciente de lo que estaba pasando.

—¿Por qué dices eso mientras tus manos me agarran la cintura?—ella tomó su rostro, mirándolo fijamente mientras seguía moviéndose sobre su virilidad—. Déjate llevar, Joel... Pasemos un buen rato juntos.—

La mujer devoró sus labios, al mismo tiempo que apuraba sus movimientos. Joel sabía que probablemente se arrepentiría en la mañana, pero a esas alturas le era imposible detenerse. Hacía muchos años que no sentía tal satisfacción.
Se aferró con necesidad a la cintura ajena, haciendo más profundas las penetraciones.