Gekko: *La conexión que Mateo tenía con las pequeñas criaturas era tal que sentían en carne propia todo lo que el otro sentía.
Dolor, frustración e incluso ese leve enamoramiento que el joven estaba atravesando*____ llevaba un buen rato refugiada en aquel callejón.
La herida que había sufrido tal vez no era grave, pero si lo suficiente dolorosa como para hacerle imposible el poder moverse.—Mierda...—
Las manos temblorosas de la chica presionaron aquel corte cercano a su tobillo. Sangraba bastante, y si pisaba dolía como el diablo.
Intentaba comunicarse con su equipo por el intercomunicador, pero no tenía respuesta. Comenzaba a sentirse nerviosa, cuando un leve borboteo la hizo mirar a un lado.—¿Carnalito?—
La criatura se acercó apresurada extendiendo sus brazos hacia ella.
—Ya, campeón. Ven aqui.—____ lo tomó en brazos, estrujándolo con cariño—. ¿Dónde está Gekko? ¿Sabes si está cerca?—
El pequeño amarillo se acurrucó en sus brazos, haciendo que ella riera bajito.
—¿No puedes ayudarme con la herida al menos?—
—¡____!—
Un Gekko agitado apareció en el lugar, mirando de inmediato la herida de la chica.
—¿Por qué no contestan? Los estaba intentando llamar.—
—Lo siento, no hay buena señal aqui.—el chico le alcanzó aquella mochila de colores.
—Mis cosas, gracias... ¿Me ayudas con este asunto?—
—Oh, claro.—Gekko casi tuvo que arrancar a Carnalito de sus brazos.
—¿Qué le sucede últimamente? Esta muy pegote.—
____ revisaba su mochila en busca de insumos, por lo que no vio la mueca nerviosa de Mateo.
—No sé...—carraspeó apenas—. ¿Qué tal eso? ¿Puedes ponerte de pie?—
—Si, pero necesito una mano.—
Gekko no tardó en ayudar a la chica apenas terminó de vendar su pie.
Pero en cuanto sus manos se aferraron al brazo del peliverde, Carnalito comenzó a reclamarle algo que ella no entendía.—Ya ya, que intenso... Carnalito quiere que lo cargues.—
____ rió bajito antes de abrir su mochila y dejarlo entrar.
—Como desee, señor.—
En cuanto acomodó la mochila en su espalda, Carnalito se recostó en su hombro.
—Ahora si.—____ deslizó su brazo por el hombro de Gekko—. ¿Podemos irnos? ¿O tú también quieres que te cargue?—
Al tener el cuerpo de la chica tan cerquita al suyo, Mateo sintió todo el calor agolparse en su rostro.
Y eso solo hacía que Carnalito se aferrara aún más a la chica que lo cargaba.
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~One shots - Videojuegos
Fanfictionshots variados sobre diferentes personajes de videojuegos