❝𝑵𝒖𝒆𝒔𝒕𝒓𝒂 𝑷𝒓𝒐𝒎𝒆𝒔𝒂❞ [𝘔𝘰𝘯𝘬𝘦𝘺 𝘋. 𝘓𝘶𝘧𝘧𝘺 𝘺 𝘵𝘶́]

024

¡La Operación Utopía a empezado!
¡Mr. Prince y la Duquesa de las Mentiras!

Vivi se aferró a su cercana, escondiendo su rostro en su ropa y ocultando las lágrimas que salían sin cesar. Le dio el tiempo suficiente para calmarse y poder tomar una decisión con la mente más tranquila. Fue entonces cuando se acercó a sus demás nakamas para contarles lo que tenía en mente.

Por otra parte, la Duquesa de las Mentiras, conocida por sus amigos como _____, se acercó a su capitán, quien seguía sentado en la arena, escuchando lo que la princesa Vivi tenía que decir, mientras su rostro estaba cubierto de heridas, incluyendo su nariz sangrante.

-No quiero opinar al respecto -mencionó la apostadora, extendiendo su mano hacia su capitán para que la sujetara-. Pero lo que sí estoy de acuerdo es con hacerle frente a Crocodile y acabar con todo el daño que le está haciendo a Arabasta. -Colocando su mano en la mejilla de su capitán, deslizó su pulgar para quitarle la sangre-. Puede que no tenga la habilidad de Mihawk o la fuerza de Ace, pero haré lo que esté a mi alcance.

Luffy la miró con seguridad, y una sonrisa apareció en su rostro.

Las mejillas del Sombrero de Paja empezaron a ser estiradas por su cercana, quien no tenía intenciones de soltarlas.

-No vuelvas a golpear de forma estúpida, idiota. Vivi también tuvo parte de la culpa, pero resuelve las cosas hablando, no golpeando.

--¡Bien! ¡Bien! ¡No lo volveré a hacer! -respondió, tomando las muñecas de su nakama para evitar que siguiera jalándolo.

-Eso espero -amenazó, aún teniendo sus manos sobre sus mejillas, acercándose a él y dándole un pequeño beso en su, valga la redundancia, mejilla, para luego dirigirse hacia los demás, dejando a su capitán confundido pero nervioso-. Si vamos directo hacia donde se encuentra Crocodile, el camino será más corto, lo que quiere decir que no haremos tanto rodeo esta vez. ¿Estoy en lo cierto, princesa? -cuestionó, mirándola.

-Así es.

-Bueno, ¿dónde está el maldito de Crocodile? -añadió Sanji, encendiendo su cigarrillo.

Dejando de lado el tema de Arabasta, Usopp terminaba de contar el dinero que tenía en sus manos, dando un total de mil berries, para luego entregárselos a Nami.

-Es un placer hacer apuestas contigo -murmuró sonriente mientras contaba el dinero.

-De seguro solo fue en la mejilla -reprochó el mentiroso, dudando de la palabra de la ladrona-. ¡Ni siquiera viste bien!

-Si lo vi, así que guarda silencio.

Finalizó la navegante, mientras se acercaba al círculo donde estaban sus nakamas viendo el mapa que Vivi había colocado sobre la arena.

Otro viaje dio comienzo en ese momento, siendo Nami la única que iba sobre el camello nombrado 'Pestañas', mientras que los demás caminaban a paso lento para ahorrar energía, aunque el calor no era de mucha ayuda y tener a alguien aferrado a tu brazo gran parte del camino solo empeoraba las cosas.

-Por alguna extraña razón siento que me están utilizando -opinó, sintiendo cómo Luffy tomaba de forma tímida la mano de su cercana y entrelazaba sus dedos, dejando que su brazo libre abrazara el de _____ para poder estar más cerca del viento que le daba las cartas a su dueña.

-Te quiero -soltó en un susurro, mientras sentía cómo el viento le daba directo a su rostro, sonriendo ante tal acto.

-Eso es manipulación -habló Zoro, acercándose a su mejor amiga y agachando un poco la cabeza para recibir un poco de ese preciado aire.