Thirty

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Jungkook acarició la suave tersa mejilla de Jimin mientras que con la otra mano hacía lo mismo en su vientre plano, así como les había informado Chanyeol, Jimin tomó la vía dormilona luego de tomarse la pastilla y comer.

Tuvo que llevarlo en brazos al nido ya que se quedó dormido en su silla del comedor en medio del desayuno.

^Por fin un poco de calma...

Jungkook asintió ante las palabras de su lobo.

~Todo debería de mejorarse de ahora en adelante ¿No?

^Debería, sí, pero no hay que bajar la guardia, habrá que esperar y vigilar que tome siempre la medicina, esperemos que el doctor pueda venir a hacer chequeos seguido.

~Vendrá cada sábado hasta que se acaben las pastillas.

Jimin se movió en ese momento, atrapando la mano que acariciaba su mejilla entre las suyas.

Sonrió y se inclinó para besar su regordeta mejilla, solo necesitaban eso, seguir a pie de la letra lo que ordene Siwon y todo estaría bien.

*******

-Chanyeol, por fin te encuentro.

Jungkook caminó hacia el castaño que parecía atragantarse con una rebanada de pastel.

-N-No le digas a Seokjin que me comí eso.-ordenó Chanyeol apuntándole con el dedo índice mientras que con la otra mano se limpiaba las migas.

-Muy tarde.-la voz severa de Seokjin se escuchó tras el pelinegro.-Ese pastel era para Jiminie.

-Apuesto a que puedes hacer más.-murmuró Chanyeol nervioso.

Seokjin caminó hasta entrar por completo a la cocina, en sus manos traía una gran caja que colocó sobre la encimera frente a él, luego ingresó casi con timidez Yoongi con una caja un poco más pequeña.

-Puedo hacerlo, sí, pero le diré a Jimin que te comiste su última porción de pastel, sabes lo huraño que está ahora con su comida.

-Bueno, antes de que peleen, Chanyeol, necesito que me ayudes con Jackson y su omega, no se les fue fácil salir de la manada y hasta ahora llegan, les dije que se podían quedar con nosotros, pero no puedo salir de aquí para mostrarles donde vivirán ahora, Jimin me necesita aquí.

-Oh, sí, yo me encargo, Seok, por favor, no te molestes, soy tu rey, solo prepara un poco más de pastel.

Seokjin bufó y los tres restantes observaron la huida del rey.

-¿Qué tienen ahí?-preguntó Jungkook observando las cajas.

Seokjin y Yoongi se miraron al instante, éste último bajó la mirada avergonzado.

-Yoongi tiene unas ideas para animar a Jimin.-respondió Seokjin colocando su mano sobre el hombro del más bajo.

Jungkook alzó una ceja y observó con curiosidad al omega rubio que mantenía la cabeza gacha.

-Yo... Bueno, mi mamá me dio hace unos años algunos consejos que ella empleaba conmigo, al parecer tuvo también complicaciones desde un principio y dice que le ayudaba mucho.

-Hemos traído una radio pequeña y unos cuantos discos, también hay libros para niños, lanita para que nos pongamos a coser, una almohada que es especial para cuando Jimin ya tenga la pancita grande, aunque no creo que eso sirva de mucho porque te utilizará a ti y bueno, muchas cosas más.

Jungkook sonrió agradecido con los omegas, no sabía si eso causaba efecto realmente, pero al menos, Jimin tendría compañía cuando él no pudiera estar cerca.

-A Jimin le encantará todo.-aseguró Jungkook.-Justo ahora duerme pero podrían verlo más tarde.

Seokjin suspiró.

-Sí, bueno, igual tengo que hacerle un pastelito a Jimin y para eso necesitaré tiempo.

-Yo puedo ayudarte.-murmuró al instante Yoongi.

Seokjin pareció genuinamente sorprendido, Yoongi nunca había querido ayudarle en la cocina, es más, casi nunca le hablaba y se alegraba de que, por fin, cambiará su actitud.

-Habrá que ponerse manos a la obra entonces.-respondió.-Gracias, Yoongi.

-Entonces yo regresaré con Jimin.-dijo Jungkook.-No sé cuánto tiempo más dormirá pero no quiero que se desperté solo.

-De acuerdo, alfa Jungkook, nos veremos luego.-dijo con una media sonrisa Seokjin.

Jungkook asintió y se despidió de ambos con una reverencia, y cuando apenas había dado unos cuantos pasos lejos de la cocina, Yoongi le llamó tras él.

-Jungkook, espera, necesito decirte algo importante.-habló el omega justo cuando el pelinegro se volteaba.

-¿Qué sucede, Yoongi?-le preguntó.

Yoongi se mordió el labio inferior, estaba nervioso y probablemente se metería en problemas con su alfa.

-Yo mmm, no le digas a mi alfa que te dije esto, por favor.-pidió en voz baja.

-No lo haré.-aseguró.

-E-Es sobre ese hombre al que traería, en realidad, él ya lo tiene aquí pero no lo ha querido traer al castillo porque sabe que tú y el rey Chanyeol posiblemente lo matarían así que, quiere interrogarlo primero para luego llevarlos con él.

Jungkook gruñó furioso y Yoongi se encogió en su lugar.

-¿Cuándo volvió?

-A-Ayer.-respondió temeroso.-Por favor, no te enfades con mi alfa, él solo quiero ayudar.

-Y yo solo quiero arrancarle la cabeza al hombre que le hizo daño a mi omega.-respondió severo.-¿Sabes dónde están?

Yoongi negó.

-Lo siento mucho, él no me lo dijo.-Yoongi no se atrevía a alzar la mirada.-Tranquilízate, Jungkook, recuerda que Jimin te necesita justo ahora y cuando sea el momento, Namjoon los llevará.

Jungkook respiró con dificultad, él no podía disipar su enojo con facilidad, pero debía hacerlo, al menos por ahora.

-Está bien, Yoongi, no quise asustarte.-le dijo luego de un par de segundos.-Gracias por la información, no se lo vayas a decir a Chanyeol por ahora ¿De acuerdo?

-D-De acuerdo.

-Vuelve con Seokjin, cualquier cosa que necesiten estaré arriba con Jimin.

Yoongi asintió y prácticamente corrió de regreso a la cocina, Jungkook hizo tronar su cuello de lado a lado y también continuó con su camino, pronto podría desquitarse, pero por ahora, así como lo había dicho Yoongi, Jimin necesitaba de él.


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