IX

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2007

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El tercer año en la escuela había sido solitario, pero la primavera llegó con una renovada esperanza. El evento de intercambio se acercaba, y tú tendrías la oportunidad de demostrar tus habilidades y subir de nivel. Llevabas al menos cuatro meses sin ver a Satoru ni a Suguru. Desde el incidente del año anterior, las misiones en solitario se habían vuelto la norma y ahora vuestros horarios eran impredecibles y caóticos. Era un milagro coincidir con ellos y hacía tiempo que habías aceptado que ya no los verías tan a menudo como antes.

Sin embargo, también sentías que te estaban esquivando. Aunque probablemente fuera tu imaginación, era cierto que no siempre te cogían el teléfono o tardaban días en responderte los mensajes. También se había vuelto tan difícil averiguar en qué días estarían en la escuela después de sus misiones, que dejaste de preguntar tan a menudo.

Por suerte, Shoko, cuyo poder era demasiado valioso como para arriesgarlo en el campo, estaba casi siempre en la escuela, y te había hecho mucha compañía durante ese curso.

Sonriendo para ti misma, doblaste la colada y la guardaste en tu armario mientras Shoko hablaba en el fondo. Tenías que admitir que no le estabas prestando toda la atención que se merecía. Había algo que te ocupaba la mente desde hace unas semanas y no podías sacudírtelo.

Satoru y Suguru estarían dos semanas enteras en la escuela para ayudaros a preparar el evento, y por fin estaríais los tres juntos de nuevo.

— Gojo dice que vendrá directamente al club esta noche. — Anunció Shoko mirando su teléfono mientras tecleaba rápidamente con los pulgares.

Ese nombre sí que había captado tu atención. Recogiste rápidamente el teléfono para mirar tus mensajes mientras Shoko te observaba con una ceja arqueada.

No tenías ningún mensaje de Satoru. De hecho, no había ni siquiera entrado a tu chat desde hacía semanas.

Sentiste un pinchazo de decepción en la barriga.

— Es una lástima que no les dejen participar en el evento, ¿no crees? — Shoko te miraba con suspicacia desde una esquina de la habitación. —¿Y/n?

Lanzaste el móvil a la cama y volviste a concentrarte en doblar la ropa, un poco más tensa de lo que estabas antes.

—Es una lástima que Suguru y el otro no puedan participar, pero sería injusto para los de Kioto. Ya es bastante generoso de su parte permitirles quedarse aquí toda la semana para apoyarnos.

—Ya... — Murmuró Shoko.

—Por cierto, ¿sabes algo de Suguru? — Preguntaste a tu amiga. —¿Ha vuelto a la escuela ya?

—Sí, me lo he encontrado de pasada esta mañana. — Contestó ella sacando algo del bolsillo. — Oye, ¿te importa si fumo aquí?

—¿Tú qué crees? — Respondiste con una risa. —Luego salimos, no quiero que mi ropa huela a humo. ¿Te ha dicho Suguru si vendrá también?

—No parecía convencido con la idea de salir de fiesta, pero creo que tiene ganas de vernos a todos. Tendrá que aguantarse. ¡Hoy es el reencuentro de los ganadores de Tokio! — Exclamó emocionada, lanzando los brazos hacia arriba.

En el momento de salir del taxi, Shoko estaba demasiado bebida.

Durante la cena, habías estado bebiendo algunas copas, pero no te habías dado cuenta de que Shoko había consumido varias botellas de sake sola. Para evitar que cayera torpemente, la sujetaste del codo al pasar por el lado de Nanami, quien te había abierto la puerta del coche.

Old Beats | Gojo Satoru x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora