VIDA DE COLORES - HWANG HYUNJIN

Capítulo 27

Author's POV

1 mes.

4 semanas.

28 días, para ser exactos.

672 horas desde que Hyunjin había decidido alejarse de Youngmi para protegerla.

Ambos chicos estaban llegando a sus límites y lo sabían.

Se necesitaban mutuamente. El uno representaba para el otro lo que el aire significa para el resto.

Era un viernes por la tarde. Youngmi había terminado sus clases temprano por la mañana, pero no se fue a su casa. Se quedó en la biblioteca, pensando.

Dándole vueltas al mismo asunto que ocupaba su cabeza hace semanas.

¿Hyunjin estaría bien?

Él le había dicho que necesitaba dedicarle más tiempo a sus estudios, pero, ¿tanto como para que dejaran de verse por completo?

Youngmi no se lo había comentado, pero ya estaba comenzando a desesperarse.

Cada vez que le sucedía algo bueno, se emocionaba por contárselo al pelinegro. Pero todo eso desaparecía cuando recordaba que no podía hacerlo.

Aún tenía a Felix y estaba agradecida por aquel chico, más ambos sabían que no era lo mismo.

Nadie podía si quiera intentar reemplazar a Hyunjin.

Siguió mirando el libro que llevaba con ella para aparentar que estudiaba, aunque no había leído más de 3 párrafos.

Miró la hora en su teléfono.

18:55

La última clase de Hyunjin estaba por finalizar.

—A la mierda con esto. — Guardó todo dentro de su mochila y se decidió a ir por su mejor amigo.

Caminó a paso apresurado hasta su facultad y esperó fuera de su salón.

Volvió a revisar la hora.

19:03

Hyunjin debía estar por salir en cualquier momento.

Y sus predicciones no fallaron.

Su pulso aumentó levemente cuando lo vio atravesar la puerta.

Tenía ojeras y arrastraba sus pies con pereza. Aún así, a sus ojos seguía siendo probablemente el chico más atractivo que había visto.

Estaba por acercarse a él, cuando vio que su maestra le seguía por detrás.

—Hyunjin, ¿podemos hablar un segundo? — La mujer mayor pidió.

—Uh... Sí. — El más alto accedió, aunque sus palabras no denotaban seguridad.

—¿Estás bien?

—Claro. — Respondió inmediatamente.

—¿Seguro? Porque tus calificaciones dicen lo contrario.

—Oh, eso... Estoy cansado, es todo.

—¿No te preocupa?

—¿Qué debo hacer, entonces? Ponerme a llorar no me hará rendir mejor. — Respondió sin interés.

—No se trata de eso.

—Agradezco su preocupación, pero estaré bien. — Hizo una reverencia para irse.

—Hyunjin, estás reprobando. Y no solo en mi materia, sino que en todas las otras. 

El muchacho se tensó, pero mantuvo su misma expresión indiferente.