Kate Lovegood siempre fue tachada de rara, Lunática... Loca.
¿Porqué?
Porque ella jamás se equivoca, jamás hace nada sin planear y nunca en su vida dejaría algo al azar.
💙Marauders Era💙
[Lucius Malfoy x oc]
K...
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❝Mi perfecta reina❞
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Kate abrió su boca y sus ojos enormemente al ver quien estaba de pie en el pasillo, en medio de la noche.
–¡Lucius!–Regañó al verlo ahí, lo jaló del brazo a su habitación y cerró la puerta–¿Qué haces aquí?–
–Vi a Sabrina entrar a la habitación de Reg hace un rato y me dije que tal vez no querías estar sola–Explicó con una sonrisa orgullosa.
–¿Y cómo entraste?–
–Pues el acertijo que me tocó no era muy difícil, gracias a Salazar–
Ella lo vio no muy convencida por esto, pero al ver su sonrisa ese sentimiento en su estómago surgió de nuevo y la niebla volvió a hacer que olvidará porqué debía preocuparse.
–Gracias por venir entonces–Ella volvió a tomar asiento frente a su escritorio–Estaba terminando una carta–
–¿Y esa pintura verde?–Preguntó el Malfoy viendo la pintura en el escritorio–No sabía que pintabas–
–Es de Sabrina–Mintió la rubia sonrojada.
–Ya decía yo que si tenía más talento que solo comprar cosas caras–Bromeó.
La Lovegood le quiso decir que el verdadero talento de su mejor amiga es la manipulación e insultar de una forma casi tan creativa como la del propio Malfoy, pero mejor se lo guardó.
–Espero que mañana podamos salir de aquí temprano sin que nadie nos vea–Siguió el rubio mientras tomaba un libro–Sería incómodo explicar qué hago en tú habitación–
–¿Te vas a quedar?–Soltó ella sin contenerse.
–Claro ¿Esperabas que viniera aquí en pijama solo a saludar?–
–No, pero no creí que quisieras dormir en una cama sin sábanas de miles de hilos egipcios–
Lucius abrió su boca fingiendo estar ofendido y esto hizo reír a la rubia, pero luego el aplaudió dos veces y Dodds apareció.
–¿Qué? Yo amo mis sábanas–Se excusó mientras el elfo cambiaba las sábanas.
–¿Algo más amo Lucius?–Preguntó el pequeño elfo acomodando su trajecito hecho a la medida.
–No Dodds, puedes irte a dormir–
–Entendido amo, le recuerdo que dejé su uniforme de quidditch en el armario de la señorita Lovegood y también su escoba–
