Estoy estudiando todo lo que mis profesores me dieron por ahora, resulta que Literatura sólo tengo los Lunes, Martes y Viernes, y para fortuna mía no me crucé a mi profesor ni me volvió a joder.
-¿Cómo venís con el primer trabajo Lali?-Candela me trajo una taza de café y esbocé una pequeña sonrisa.
-Creo que bien... Bueno, en realidad nunca me enseñaron a estudiar, siempre estudié cómo pude, mis papás no son la clase de personas que tienen toda la paciencia del mundo, así que aprendí muchas cosas prestando atención en clase y mirando videos de Youtube
-¿No fueron capaces de pagarte algún profesor particular?-Candela se sorprendió, negué con la cabeza.
-Ellos son bastante ignorantes con ese tema.. Importa más cómo voy vestida a los eventos importantes que las calificaciones
-Tus papás me hacer recordar a los de la película Matilda
-Casi-me reí por su comparación.
-Sólo que vos estas bien económicamente
Que Candela me hable acerca de eso me puso incómoda.
-En la universidad soy otra más, nadie va a regalarme notas altas por mi apellido, ¡y aunque no lo creas estoy muy entusiasmada por eso!-instantáneamente me emocioné.
-Sos rara-Candela me miró de reojo y nos reímos juntas.
-Cualquier persona con mis oportunidades sé que no habría dudaría en meter mano, mostrar billentes o cheques y comprar su título
-Sos distinta y eso es bueno, positivo.. Tenes tu propia personalidad, carácter-me halagó.
-Debes ser de las pocas personas que piensan eso de mi, la mayoría me dice que soy una milipili, no reniego de eso.. Pero por ser así, ¿porqué se meten con mi personalidad?
-Las personas opinan porque es gratis, vos estas en las redes, seguro lo sabes
-Sí... y estar en ese mundo también me divierte, pero en ocasiones.. las opiniones te angustian, te hacen sentir mal
-En la vida siempre van a pasarnos cosas-Candela soltó un suspiro y asentí-¿seguimos? Mañana nos toca nuestra primera entrega, bueno, ¡tu primera entrega! La mía fue hace un año atrás-se rió de ella misma, le sonreí, era tan cálida y divina, con suerte ganaría a una amiga real, otra más, porque sólo tengo una.
Mi compañera de carrera se fue y le pedí a mi chofer que la lleve, pero Candela se rehusó, esta clase de cosas me llamaban atención, quienes se me acercaban era exclusivamente para obtener los "beneficios" al estar conmigo.
Terminé mi proyecto y lo mandé al mail donde todos los de mi curso tenían que mandarlo, ahora sólo era cuestión de esperar, ¡era obvio que la corrección no iba a estar lista para el Viernes!Cocinarme siempre terminaba en caos, pero en vez de resignarme lo seguía intentando, "persevera y triunfaras" dicen, y si quiero triunfar y recibirme tengo que acostumbrarme a los fracasos.
Comer ensalada cómo segunda opción no fue tan malo, limpié a medias y me dormí.
Toda la noche sentí ansiedad, ¿porqué? Y no se me ocurrió otra que hacer un vivo en Instagram por la madrugada, ¡sí! ¡A las cuatro de la mañana?
-¿Están?-encendí la luz de mi velador y me cubrí la cara con esas máscaras faciales de gel para congelar en el freezer-¿que porqué no muestro mi cara?-me reí nerviosa- no estoy maquillada..-leí otro par de comentarios- ¡yo también quiero saber porque no están durmiendo!
Mis seguidores me respondieron cosas cómo que estaban estudiando y les llegó mi notificación, otros recién habían vuelto del trabajo, entre otras.
Seguí leyendo las cosas que me mandan cuando me entró un mensaje, iban a ser las cinco de la mañana, corté el vivo y entré a la casilla.
"En unas horas te toca exponer" sí, Juan Pedro.
"¿No que por acá eras Peter?"me reí con ironía.
"Peter por unos segundos está en otra parte, ahora te habla Juan Pedro profesor, te toca exponer tu trabajo, estuvo bien".
"¿Sólo bien?" Me quedé expectante a su respuesta.
"Tomá el halago, no suelo decirlo a menudo, digamos que está lo suficientemente bien cómo para que lo expongas".
"¿Realmente ya corregiste todas las entregas? ¡Estas demente!"
"Soy un docente comprometido con su materia y cumplo con las correcciones siempre a tiempo, detesto a los que se toman un mes y medio para dar una devolución, después al pobre alumno en los recuperatorio le va mal por falta de estudio"
"Qué generoso de tu parte" no fue con una intención irónica, justo esta vez no, pero se lo tomó así.
"Mariana estoy siendo buena persona y te estoy avisando de que te voy a tomar oral para que te vaya bien, ¡aceptá que no soy mala persona!"
"Me tenes pena.. Crees que no voy a poder con eso sola, no me juzgues, no sabes de lo que soy capaz, puede que sea una sorpresa" salté a la defensiva.
"No quise atacarte, no en este caso, sólo quise ser buena onda, y mejor no vuelvo a intentarlo, lo que hice recién no lo tuve que haber hecho" y el estúpido me bloqueó, me bloqueó en Instagram.
La cantidad de palabras que me tragué para no putearlo fue algo increíble.
Aproveché esa bronca para estudiar y más tarde dar un oral brillante, lo último que tenía que hacer era desafiarme, si hay algo que heredé de mi familia es el hambre por ganar, por siempre tener la última palabra.
Terminé dos tazas de café y revisé la pantalla de mi celular, ya era la hora, Alicia me dejó en la puerta de la universidad y tomé aire, solté un suspiro.
-¿Te sentís mal?-Candela se preocupó.
-¿Porque crees eso?
-Tenes los ojos rojos Lali
Rápidamente corrí hacia el baño y lo pude comprobar.
-Estudié desde muy temprano, y tomé una cantidad importante de café italiano puro, puede ser eso-tomé aire y solté un suspiro, me encogí de hombros- voy a estar bien
-Cualquier cosa contas conmigo-Candela me animó.
Retoqué mi maquillaje y abandoné el baño, al llegar al aula Juan Pedro estaba hablando con un grupo de alumnos, no se volteó, yo sólo para joder lo saludé.
-Hola profesor-sonreí porque capté toda su atención, sus ojos verdes eran hermosos, cómo los de un felino.
-Hola alumna-no se hizo el loco y me respondió, a pesar de que era obvio que me detestaba- hoy te toca dar un exposición oral-me lo recordó.
Elevé mis cejas y volví a sonreír.
-¡Mi primera oportunidad para demostrar que merezco estar acá!
Giré para darle la espalda aunque moría por ver su cara, ¿cual habría puesto?
-Alumna Mariana Espósito-me llamó al cabo de unos minutos- vas a exponer lo que estuvimos viendo y analizando, tenes la libertad de dar también tu opinión personal
-Genial-me paré y pasé al frente, agarré un marcador y escribí unas palabras en la pizarra, expliqué con lujo de detalles absolutamente todo, y cuando di mi punto de vista Juan Pedro no opinó nada, sólo me felicitó.
Varias personas se quedaron sorprendidas, porque sí, yo Mariana Espósito fui felicitada y frente a todos.
-Si ella es "buena" entonces esta carrera va a ser un chiste-escuché a un compañero mío hablar con otro- ojalá que no bajen el nivel sólo para que apruebe ella
Y eso fue suficiente para que de media vuelta e intente atacarlos, no pude hacerlo porque Juan Pedro me llamó, me salvó de meterme en problemas.
-No... Acá no se arreglan las cosas así-me miró a los ojos serio- se arreglan con el diálogo, no a las puteadas
-¿Puteadas? ¡Yo no puteo a la gente!-me ofendí- pero me dieron ganas de putearlos, vos no sabes lo que estaba pasando..
-No, no sé lo que estaba pasando, sólo vi tu cara y tus gestos, te transformaste en Hulk, creí que ibas a volver verde
-¡Ja ja! Muy gracioso profesor Juan Pedro, gracias por detenerme... Prometo la próxima vez usar el diálogo, aunque esos tipos merezcan otras medidas
-¿Otras medidas?-soltó una carcajada.
-En cierta manera estaban hablando mal de mi a mis espaldas, no sabes lo horrible que es tener que fingir que no los escuchas, para mi lo que pasó no fue gracioso, y espero que no te rías de todo, porque aunque no me estes faltando el respeto en este momento el sentimiento es igual, es cómo si no fuera humana y las cosas no me afectaran
Saludé a Juan Pedro con la mano y no me respondió nada, ¿acaso lo había dejado mudo?
Me despedí de Candela y volví a mi departamento, pero antes me compré un ramo de flores amarillas; lo puse en un jarrón, las flores siempre le daban color a los ambientes, y en ocasiones esa cosita sencilla me alegraba e iluminaba mi día.
Me hice un té de durazno y revisé a mi teléfono celular, tenía miles de notificaciones pero la que más me llamó atención fue una en particular, Peter me habló al número de mi línea, no a Instagram, directamente a lo más personal para comunicarse.
"Perdón, a veces no me doy cuenta de las cosas" leí en voz alto para mi misma.
"Sos profesor de Literatura, se supone que percibís los sentimientos de los protagonistas de las historias, igual gracias por disculparte".
"¿Estamos bien Mariana?"
"Acá soy Lali, Mariana suena a que me están retando, mi profesor de Literatura me dice Mariana" bromeé sin saber si mi manera jodona de responderle iba a ser de su agrado o no.
"Ok, entonces estamos bien Lali, por cierto, por acá soy Peter".
Otra vez no entendí hacia donde nos estaba llevando la conversación.
"¿Vas a bloquearme por acá también?".
"Por ahora no tengo motivos"
¡¿Qué por ahora no tiene motivos?! ¡¿Qué?! No entiendo nada.0
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Nuestra manera
FanfictionLali Espósito nació en una familia de millonarios, desde chica nunca conoció los "no", está acostumbrada a que le den todos los gustos, pocas veces en su vida otra persona la confrontó... (¡pero claramente eso va a cambiar!). Para sorpresa de muchos...