Capítulo 8

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Mi cara estaba apoyada en una almohada que no era mía, no estaba en mi departamento, estaba en otro, y voluntariamente me metí en la boca del lobo, pero no sé porqué sé que Peter no es malo, no es ningún villano ni tampoco me engañó cómo para que termine donde estoy ahora.
Él se quedó leyéndome poemas del manuscrito mientras no me apartaba de su lado, estuvimos así gran parte de la madrugada hasta que nos dormimos, y cuando nos despertamos todo se volvió raro.
-Se supone que en dos horas nos vemos..-tomó aire y soltó un suspiro, lo noté preocupado- esto.. Que no salga de acá, ¿ok?
Me miró a los ojos y asentí con la cabeza.
Sin saber que esperar me cambié, me puse la ropa del día anterior y saludé a Peter con la mano, volví a mi auto y lo puse en marcha, mientras volvía a mi hogar me reí cómo una tarada, toda la adrenalina que sentí con cada roce y caricias fue algo increíble, una experiencia muy difícil de olvidar.
Me saqué el maquillaje y me bañé, otra vez tuve que arreglarme, hice hincapié en ponerme mucho corrector en las ojeras.
-¡Qué carita Lali!-Candela se burló de mi- ¿pasó algo que estás extremadamente maquillada hoy? No pareces vos, pareces otra persona..
-Nada, sólo dormí medio mal y tenía ojeras, ¿exageré con el corrector?-me preocupé.
Candela hizo la seña de más o menos con la mano.
Entré al baño para mirarme al espejo y sí, mi maquillaje era completamente horrible, metí mi mano en mi bolso para sacarme todo con una toallita desmaquillante.
-A ver...-hablé sola, busqué mi base, mis labiales y mi mascara de pestañas pero no encontré nada, ¡¿qué?! ¡¿Me olvidé el maquillaje en mi casa?! Entré en pánico porque nunca solía salir a cara lavada, y ya no tenía tiempo para comprar algo, en diez minutos la clase iba a empezar.
Hice tiempo para estar escondida en el baño lo más que pudo, Candela se acercó preocupada.
-¡¿Tanto drama por lo del maquillaje?!-elevó sus cejas- sólo tengo manteca de cacao con color rosa perlado y mascara de pestañas, ¿queres?-me los ofreció.
-¡Cualquier cosa! ¡Lo que sea!-actuar de manera desesperada ante algo así era algo muy mío, mi mamá me crió diciéndome que siempre tenía que verme "impecable".
Cuando faltaban dos minutos para que llegue el profesor a mi primera clase del día di la cara, me senté lejos, apartada de donde solía pararse Peter.
Él entró, saludó con simpatía y acto seguido su cara se tornó seria, arrancó hablando de los parciales, y dijo el nombre de quienes teníamos que dar el recuperatorio.
Me puse de pie para buscar mis correcciones y él se me quedó mirando por unos segundos, ¿habría notado la diferencia? Se le escapo una sonrisa y acto seguido se dio media vuelta para que nadie lo note, eso me hizo sonreír a mi, volví a mi asiento sintiéndome bien.. ¿Porqué? 
Candela que estaba al lado mío me miró a los ojos y elevó sus cejas, eso era problemático... ¿percibió algo?
Negué con la cabeza y me enfoqué en la clase, Peter arrancó con una energía admirable, no dejó de hablar ni por un minuto, me di cuenta de que estaba acelerado.
El timbre sonó y otra vez apareció el círculo de tres amigas que babeaban por él, lo taladraron a preguntas que pacientemente terminó respondiendo, pero estaba apurado, saludó y se fue todo apresurado al exterior de la universidad.
Lo vi alejarse y Candela me codeo.
-¿Por eso tan maquillada?-soltó una carcajada y me mordí los labios nerviosa- él estaba con cara de muerto.. No sé bien lo que esté pasando entre ustedes, pero si tenes dudas de si alguna vez se relacionó con otro alumno de esa manera no Lali-negó con la cabeza- es una persona muy profesional, es más suele poner distancia entre sus alumnos..
-Pero no te pregunté nada..
-Pero si sos igual de sensible y tu cabeza es rebuscada cómo la mía tarde o temprano te lo ibas a preguntar
¡Buen punto!
-¿Tan obvia fui que me miraste y adivinaste que algo había pasado?
-Te está saliendo por los poros el "tuve sexo del bueno", ¡estas luminosa! ¡Tu piel! ¡Toda vos! ¡Y mirate la carita! ¡No necesitas ni una gota de maquillaje Lali!-me halagó- deberías estar a cara lavada más seguido
-Es algo que no voy a cambiar, y lo de tuve sexo del bueno..-hice una pausa- ¿puedo confiarte algo?-bajé mi voz aún más y ella asintió- por favor, nunca me claves una puñalada por la espalda-de golpe me agarró miedo, los traumas del pasado de alguna manera siempre vuelven- yo.. Tuve un novio.. Pero cuando era más chica claramente, y nunca estuve lista para.. Creo que ese fue uno de los motivos del porqué terminamos, tuve mucha suerte de que él no lo haya difundido por todos lados, a pesar de ser un idiota no era mala persona-suspiré- "ponele"
-Entonces, vos nunca.. ¿Nunca estuviste antes con una persona?-¿porqué Candela estaba sorprendida?
Negué con la cabeza algo avergonzada.
-Nunca sentí esa piel, esa conexión, esa necesidad arrasadora que hace que no puedas pensar con claridad y simplemente te lleva a hacerlo-sentí una leve emoción en mi pecho al recordar las sensaciones que sentí cuando estuve con Peter.
-Entonces Juan Pedro fue el primero-Candela me sonrió y asentí nuevamente- no tenes nada del que avergonzarte La, ¿fue dulce por lo menos? No parece una persona así
-Fue... Fue lindo, él fue lindo conmigo, y estoy agradecida de eso-mi sonrisa no se borró.
Peter todo apresurado volvió con un café en la mano, no se dio cuenta de que yo estaba cerca de la entrada que me llevó puesta y su café terminó en mi camisa, él abrió ampliamente los ojos y miró hacia ambos lados, buscó en su maletín y me intentó limpiar la camisa con un pañuelo descartable.
-Perdón-se quería morir- tu camisa es blanca, no miré mientras caminaba y..
-Peter-me reí- no pasó nada, puedo comprarme otra camisa, puedo lavarla, no es nada.. -no pude evitarlo, le sonreí en modo tarada y Candela me llamó haciéndome volver a la realidad.
Saludé a Peter con la mano y se fue, tenía otra clase que dar.

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