Capítulo 12

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A pesar de quedarme encerrada en el baño sola no me puse a llorar, Peter me pidió si podía entrar, pero no quise, al cabo de un rato salí de mi escondite y él estaba esperándome con la cena lista.
-¿Qué haces?-lo miré desconcertada- lo mejor es que me vaya...
Él se acercó hasta donde estaba yo y me miró a los ojos.
-No te queres ir-adivinó- además tenemos cosas pendientes de las cuales hablar
-No hay nada que tengamos que hablar Peter, ambos sabemos cómo tiene que ser todo, yo me desubiqué al decir lo que dije, es que.. No se cómo manejarme-solté una risa nerviosa- sos mi.. La primera persona que está a mi lado sin querer nada a cambio, bueno, no la primera en eso, pero sí la primera en eso y en hacer otras cosas..
Sentirme vergonzosa era algo muy mío, él elevó sus cejas y se le formó una pequeña sonrisa.
-¿Sabías que te ves adorable?
Negué y él hizo una caricia delicada en mi cara.
-¿Comemos?-cambié de tema- no quiero que se enfríe
Peter no me presionó ni nada para volver a la conversación de antes, simplemente me hizo reír contándome tonterías, cosas que le pasaron en su primer año estudiando Filosofía y Letras, también cosas de la época en la que iba al colegio.
Me quedé escuchándolo maravillada, porque su manera de relatar era hermosa, se notaba tanto que era un escritor, sus palabras te trasladaban.
-Voy a.. Voy a irme, gracias por todo-le sonreí e hice señas para que me abra la puerta.
Estaba por saludarlo con un beso en la mejilla cuando ese beso terminó en mis labios, los suyo eran suaves, sedosos, rodeé su cuello con mis brazos cerrando mis ojos, disfrutándolo.
-¿Alguna vez te decepcioné? En todo este tiempo en el que nos conocimos...-hizo una pausa- no se si compartir algo con vos o no, porque cada vez que te cuente cosas así vas a conocerme más desde otro lado..
-¡¿Y?! Yo confío en vos, también te comparto mis demonios-lo miré firmemente aún sin soltarlo- pero si no queres estas en todo tu derecho
-Hace tiempo no vivo con miedo a que algo que ni empezó termine-apoyó su frente sobre la mía y se quedó mirándome- pero sé que no hay futuro, no terminaste este año y todavía te faltan cuatro años más-soltó un suspiro, ¿cansado?
-¿Realmente crees que no puede haber un futuro?-elevé mis cejas confrontándolo a pesar de mi nerviosismo, porque sí, constantemente estaba jugando con fuego.
-Miento.. Eso mismo es lo que me da miedo.. -intentó apartarse y esta vez quién no quiso separarse fui yo- estamos.. Jodiendo todo.. y al mismo tiempo... no puedo.. no quiero..
-¡¿Acabas de quedarte sin palabras vos?!-quise hacerlo reír para romper con el momento tenso-¡que escribís y lees!
-Sí, me quedé sin palabras-respondió sin rodeos- me gustas mucho.. y no es la manera más novelera de decírtelo, ¿no?-esbozó una pequeña sonrisa, la suya era chiquita y tímida, cómo si tuviese miedo de que me vaya a asustar.
-Bueno... No estamos tan mal al parecer-besé su mejilla y ahí sí lo solté- ponele-le sonreí- creo que.. Mejor me voy, ahora sí
Caminé hasta la puerta y cómo ya estaba abierta lo único que hice fue abrirla.

-¿Vas a ir a tu casa o te vas a quedar?-Alicia estaba esperándome abajo porque la llamé hace un rato, ella me miró a los ojos, nos conocíamos muy bien-no quiero meterme en tus cosas, ¿pero estas haciendo todo esto para llevarle la contra a tus papás?
-Todo indicaría que es una especie de provocación, pero la verdad es que por suerte todavía no lo saben, y cada cosa que hice hasta hora fue por elección propia, soy consciente de lo que está pasando.. nadie me obliga.. y sí, vuelvo a casa, no da que me vuelva una ocupa
Alicia asintió con la cabeza y me hizo caso, estacionó el auto en la puerta de mi edificio y afuera estaba esperándome Candela.
-¡¿Qué haces acá?!-me sorprendí y la vi mal, sus ojos estaban llenos de lágrimas.
-Discutí con Andrés, ¡hace años no lo hacíamos tan feo!
Sin dudarlo le di un abrazo, juntas subimos por el elevador y le di un vaso con vino tinto, juntas salimos a mi balcón.
-¿Qué fue lo que pasó?-me dio curiosidad.
-Tonterías de convivencia, pero él está cansado, hace dos años no se toma vacaciones y cree que eso no lo afecta, lo amo, y sé que me ama... Pero tiene que saber cuando parar y cuidarse, y por eso me enojo, porque no se cuida, ¿y quién sabe si algún día del estrés le pasa algo? ¡Él es mi compañero de vida! ¡Y justamente lo quiero vivo!-se puso a llorar, yo no sabía que hacer, el que alguien se muestre emocional frente a mi también era algo nuevo.
-¿La vida en pareja tiene altibajos?-le pregunté y asintió con la cabeza.
-No existe la relación perfecta La, existe la relación con obstáculos, siempre va a haber un obstáculo en el camino y está en uno hacer algo para superarlo-ella me dio un abrazo y después de alejó un poquito- estas muy.. Curiosa
-No hablemos de mi, estamos hablando de vos y Andrés
-Vamos a solucionarlo, como siempre, lo cual no resta el que me preocupe y en ocasiones quiera matarlo-cambió de actitud y habló mejor de humor- pero hay algo que quiero sabes, ¿qué está pasándote Lali?
-Es complejo...-hice una pausa y me quedé pensativa para analizar mi presente- siento muchas presiones, la presión de mi familia para ser un modelo a seguir que obviamente no es problemático, después está la carrera que elegí y el que quiero destacarme para probarme a mi misma y al resto que soy inteligente.. y en el medio de eso apareció una persona que no esperaba conocer-me intimidé, Candela elevó sus cejas interesada- Juan Pedro, no voy a negar que sus miles cambios de humor me vuelven loca pero tiene algo que..
-¡Es sexy!-Candela se rió y asentí- y una luz desde lo intelectual
-La verdad es que no entiendo porqué no me ignora cómo antes, soy todo lo que una persona con su personalidad e intelecto detesta, rubia teñida, lectora que arrancó a leer leyendo novelas cliché para adolescentes, vivo en las redes sociales ventilando cómo es mi "mundo", cualquier persona de la Universidad de Filosofía y Letras se avergonzaría de interactuar conmigo...
Ser tan dura conmigo misma también era algo muy mío, me angustié y sentí una presión en mi pecho.
-Lali sos una buena persona, y los que te juzgan lo hacen porque claramente no te conocen, sos capaz, sos buena alumna, sos divertida, solidaria.. No sos un desastre-Candela me sonrió y ahora me emocioné-¡no seas tarada!-me abrazó.
Ella se quedó conmigo un rato más hasta que decidió emprender la vuelta para hablar con su novio, ella ya estaba tranquila, Alicia la llevó y así me sentí segura de que iba a llegar bien.
Cuando cerré mis ojos para dormirme ya eran las dos de la mañana, me tapé hasta el cuello y me relajé.

El Viernes llegó y no me crucé más a Peter, en su clase lo miré de reojo e hice cómo si sólo se tratara de una persona más.
Tomé apuntes, leí en silencio y cuando sonó el timbre lo primero que hice es escabullirme entre el resto de los alumnos.
Salí a comprarme un café al lugar de siempre y cuando estaba por volverme sentí que me agarraban suavemente del brazo, salté a la defensiva y suspiré de alivio al ver de quién se trataba.
-Hola Juan Pedro-lo saludé como si nada.
Él clavó su mirada en la mía y percibí un algo... ¡¿Qué?!
-¿Estas evitándome?
-Puede que.. No es horario para hablar cómo dos personas que se conocen de otro lado y
Apoyó su mano sobre mi cintura y me acercó a su cuerpo haciendo que quedemos escondidos en un callejón de esos llenos de grafitis modernos.
-Te extrañé
Las piernas se me aflojaron, ¡¿qué?!
Sonreí cómo una estúpida y dejé se hacerme la resistente, lo besé de manera fugaz.
-Hablamos en otro momento, ¿ok? Perdón por evitarte desde hace unos días.. Creí que vos también estabas evitándome..
-Tiempo.. te di tiempo, y me di tiempo porque siento que todo esto que..-nos señaló- son muchas emociones juntas, ¿no? Y no estas acostumbrada, y lo que menos quiero es que te agobies.. Que te asustes..
Sus ojos estaban brillosos y eso me hizo sonreír, ¿porqué era tan bueno? ¡¿Porqué?!
¿Sentir ganas de abrazarlo todo el tiempo es porque me provoca ternura?
Volvimos a besarnos y nos separamos, no volvimos a hablarnos.
Él me hizo una caricia y cuando quise agarrar mi café Peter me lo devolvió.
Lo saludé con la mano y salí de nuestro escondite, volví a la U.V.U con una sonrisa imborrable. 

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